Rehabilitación

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Ya con el hueso soldado venía la parte que siempre se saltaba o al menos lo intentaba, la rehabilitación. Por andar siempre a las prisas de tener partido el fin de semana o de que tenía alguna pelea en puerta pocas veces cumplía con las sesiones en orden pero ahora bajo la atenta mirada de tres médicos y dos entrenadores aparte de un fisioterapeuta Tori estaba empezando a mover el hombro.

Poco a poco iba recuperando tanto la movilidad como la fuerza, algo que le entusiasmaba pues podría dejar de postergar su pelea algo que moría de ganas de hacer, extrañaba la adrenalina de los combates, aparte después de todo lo vivido ya no había nada que Jade pudiera decir en su podcast que la asustara.

La sala de rehabilitación del hospital solía estar llena, y ese día no fue la excepción así que solo entraron Tori y unos rubios Sofía y Andrew.
- Aún no puedo creer que Jade se atreviera a esto - seguía quejándose la actriz al notar las miradas en ella, a pesar de la gorra se alcanzaban a ver partes de su cabello que llamaban la atención.
- A mi hasta me lo aliso - dijo Andrew - ya no tengo mis rizos nada definidos como los llama Carina
- Pensaba en ponerles depilador nivel hombre lobo en el shampoo, les salvé la vida.

La plática terminó al llegar al rincón destinado al trabajo con ligas donde Tori seguiría probando que tanto podía mover el brazo sin problemas antes de intentar golpear algo.
Mientras se quitaba la chamarra para quedar en top (algo que ya no le estaba gustando mucho a Jade) y se acomodaba el pants alcanzó a escuchar a otras 2 pacientes con las que compartía horario, tenían al menos dos sesiones burlandose de como Sofía o Paulina solían acompañarla y como ellas incluso siendo menores iban solas.
- La bebe no puede andar sin compañía - dijo una
- Sh, aguas, no te vaya a escuchar la bebé - le respondió su amiga
"Al menos a mi si me quieren, ahora entiendo por qué vienen solas" pensó Tori pero no lo dijo, prefirió centrarse en su ejercicio del día.

- Tus mediciones van bien, tus resultados igual - dijo Carina quien ahora competía con Maya por el título de "la rubia de la pareja"
- Solo otras dos semanas de rehabilitación y creo que podríamos hablar ahora sí de una recuperación al 100% - terminó Andrew
- Pero si todo salió bien ¿Por qué aún tengo que ir a rehabilitación? - preguntó Tori
- Parte de una buena recuperación es el descanso y no apresurar procesos, jamás has descansado de una lesión lo que debes, salvó tal vez la golpiza que te mandaron poner - empezó el doctor
- Y aún así hay que recordarte que pisaste el gimnasio aún convaleciente y se te botaron unos puntos - recordó la doctora - entendemos tus ansias y que estás bien, de hecho estamos muy felices de eso pero por esta ocasión nos gustaría ser extremadamente precavidos, terminarás tus sesiones de rehabilitación, no pediremos subir la frecuencia ni la carga de trabajo, cumplirás en tiempo y forma.

A la peleadora no le quedó otra más que resignarse, entendía lo que le decían pero no era algo a lo que estuviera acostumbrada, desde que empezó a jugar en los equipos de la policía sabía que debía abrazar el dolor y seguir jugando, no habia tiempo para descansar.
Adoraba el recuerdo que tenía de David entrenandola, alentando y felicitando, al menos los pocos que tenía, pero el saber que eso había puesto en riesgo su vida a estas alturas le hacia pensar que tan buena idea era seguir recordando eso.
Antes de seguir pensando eso tomó sus audífonos y puso alguno de los podcast viejos de Jade, su voz le relajaba y le ayudaba a olvidar al menos por rato todo.

Encontró el primer programa que escuchó, aún recordaba como batalló con sus audífonos y por un toque de más terminó en el radio y no en su tarjeta SD. La voz de Jade no había cambiado nada a pesar de que la chica definitivamente había madurado (algo que Tori agradecía) algo que agradecía pues en si fue su voz la que la enamoró.

- Seep estaba muy despistada - se dijo al terminar de oir otros 3 programas - cómo rayos no identifiqué la voz.
- El amor te hace ciego - respondió alguien asustando a la peleadora que se cayó del sofá.
- Pensé que estaba sola - dijo mientras se incorporaba.
- Llegué hace unos 20 minutos pensé que estabas dormida y no te quise molestar l- respondió Sofía - nos traje algo de comer, entonces ¿Estabas escuchando a Jade?
- Si, de los primeros programas que le escuché, no sé por qué no relacione su voz, digo ya empezaba a tratarla y convivir con ella.
- El amor te hace ciego, bueno, sordo en tu caso - respondió mientras le pasaba a Tori su tupper con la comida - odio estás politicas de "cero Unicel" - se quejó
- Oh vamos, así es más fácil saber que es lo de quién, digo ya sabes que el tupper de Marvel es mío, el rojo es tuyo y pues a Paulina le toca comprarse el suyo - dijo Tori - retomando lo de Jade, pues no sé, cuando la conocí tenía novio, tal vez por eso no ubiqué su voz. Si me hubiera dado cuenta me habría decepcionado.

- No me conocías, ni sabías mi estado civil y eso no te impidió tener un crush en mi - le recordó Sofía apuntandole con su tenedor - o me vas a negar eso, aún recuerdo que Jade me dijo que hasta viste Fake it y Austin y Ally por mi.
- Es diferente, digo sabía que estaba en chino que te conociera y era aún menos probable tener alguna relación, así fuera de amistad contigo.
- Y mira, resulta que si me conociste y al parecer te adopté y yo ni supe a qué hora.
- Y también ando con la chica que me enamoró solo con su voz, por medio de un programa de una hora de una pequeña estación local.

La voz de mi Dulce Amor segunda parte Donde viven las historias. Descúbrelo ahora