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HAZEL BAKER

— ¡¿Has visto que en menos de un mes ya tengo bastantes vistas?! —le digo a Jade mientras estamos en su habitación.

— Y todo por empezar en un orfanatorio, dale las gracias a esa señora que le comentó a dos personas cuyo trabajo es mánager musical que cantas muy bien y te han escogido —me dice con una gran sonrisa traviesa. Estás consiguiendo lo que has querido mi vida y estoy muy orgullosa de ti —me da un fuerte abrazo.

La verdad es que sí, fue gracias a aquella señora que ahora sé que se llama Flora. Me escuchó cantar detrás de las puertas y cuando terminé me habló de que dos mánagers querían cogerme para que trabajase con ellos y yo muy emocionada acepté.

— Vamos a ser las más ricas de la ciudad —yo me río y ella me sigue la risa.

— Eso está claro, ganaremos a la familia Hallen —me guiña un ojo y yo sonrío pero los recuerdo me vienen de nuevo.

Aún no me he recuperado, he empeorado un poco, últimamente he tenido pesadillas y no se me pasaba el miedo. No se cuando me voy a recuperar, pero ya llevo seis meses y solo he logrado empeorar un poco, tampoco quiero ir a un especialista, soy de esas que le gusta recuperarse solas, sé que es muy molesto de mi parte, pero eso es lo que pienso yo.

— ¿Crees que voy a recuperarme? —mi voz ahora es baja y triste.

— Ya me lo has preguntado más de mil veces y siempre te respondo lo mismo, está claro que vas a tener una vida con Zion y vas a recuperarte ya verás —me arrima a ella hasta que apoyo mi cabeza en su regazo y empieza a masajearme el cuero cabelludo.

Hoy es Sábado y después del éxito de mi primera canción quieren seguir conmigo, así que hoy me dejan libre, pero claro, tengo que ir pensando otra canción.

— Esperemos que sea pronto...

— Se me olvidó decirte que hoy Jeff quiere verme y que me quiere decir algo, la verdad tengo miedo, pero le he dicho que si, así que en menos de una hora debo bajar, ya que me recoge con la moto. Sinceramente no me gusta la idea de la moto pero bueno si se trata de Jeff hago lo que sea —Se ríe por dentro y yo arrugo la cara.

— Eso ha sonado muy bonito, raro de ti, sin duda ese pervertido te está hipnotizando —me río y ella deja de masajearme la cabeza, una manera para hacerme de rabiar.

La verdad es que los veo genial juntos, son tan tierno y a la vez tan ardientes, pero claro eso es lo que me cuenta ella, ya que yo llevo sin ver a Jeff desde que me fui de la casa.

Siempre me está contando algo de él, también me enseña pequeños regalos que la da y entre otras cosas más.

— Solo te aviso que hasta que no me recupere no quiero que tengas relaciones sexuales con Jeff, quiero que nuestros bebés nazcan a la vez —me levanto y me quedo sentada en frente suya.

— Eso va a ser difícil, pero al menos podemos usar protección, no creo que vaya a aguantar sin hacer algo con él. Está tremendo, al igual que Zion, al parecer están haciendo ejercicio cuando pueden y se están volviendo unos musculosos muy potentes —nos empezamos a reír las dos.

Eso me hace recordar los fuertes brazos de Zion agarrándome y protegiéndome como lo suya que soy.

— ¡Mañana es tu cumpleaños! —me dice de repente Jade.

Nueva VIDADonde viven las historias. Descúbrelo ahora