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— Ponle este brillo labial — sugirió Ji-kyung dándoselo a su hermana.
— Si, le quedará perfecto — dijo la hermana tomándolo.
La hermana menor maquillaba a la menor de los Han, estaban charlando mientras reirán y soltaban uno que otro chiste.
— ¡Okey dokey yo! — Cantó una voz masculina.
Las tres chicas miraron una escena un tanto graciosa, Seo-jun cantaba y bailaba en toalla.
Tomó una botella de agua y se hecho el líquido mientras cantaba, se giró bailando encontrándose con la mirada de las tres chicas, Joo-kyung parecía traumada, Go-woon estaba asqueada y Ji-kyung intentaba no reír.
— Que asco — dijo Go-woon — pensé que no estabas, ¡ve a ponerte ropa!
Seo-jun miró su propio torso y después dejó la botella de agua.
— Hola — saludo, para después girase y seguir bailando.
Pero no pasaron ni cinco segundos cuando corrió y se escondió en su cuarto para después gritar.
Ji-kyung no soporto más y soltó una carcajada.
— ¡Oye! — gritó Joo-kyung — ¡Yo no vi nada! ¡Tampoco Ji-kyung!
"Si supiera que ya le vi hasta el alma" pensó Ji-kyung.
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— Gracias por todo — dijo Go-woon.
— Gracias a ti por invitarnos — agradeció Ji-kyung — ¿te puedo abrazar? — Go-woon sorprendida se acercó con los brazos abiertos, la mayor de las Lim la envolvió en un abrazo.
— Ya nos vamos, te veo después — dijo joo-kyung, las amigas se separaron.
Las hermanas salieron de la casa de los Han y comenzaron a caminar hasta la parada de autobús hasta que Ji-kyung recuerda que dejó su teléfono en la casa de los han.
— Mierda — murmuró la chica.
— ¿Qué pasa? — preguntó su hermana.
— Olvide mi maldito teléfono, iré por el, vete a casa, luego te alcanzo.
— Okey, ten cuidado hermana.
— Claro — dijo con una sonrisa para después girarse y volver a la casa de los Han.
Al llegar tocó la puerta siendo recibida por Go-woon, esta la miró confundida.
