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— Vamos, quiero llevarte a un lugar — dijo Seo-jun cuando pagó la cena.
— ¿A dónde? ¿vas a secuestrarme? — el río.
— Tu sola te secuestraste — ella solo sonrió asintiendo.
Los chicos salieron del restaurante, el chico llevó a su amada novia a un lugar que ya habían visitado en la secundaria, ella lo miró con los ojos brillos al ver donde estaban.
— La pista de patinaje — dijo sonriendo.
— Aquí fue una de nuestras tantas citas, quiero que veas cómo mejore patinando — ella río.
— Sorpréndeme.
La pareja entró poniéndose los patines.
— Te digo algo — habló Seo-jun — la primera vez que te traje en realidad fue por que quería patinar de la mano contigo y abrazarte para no caer, el lugar perfecto para enamorarte — ella río.
— Pero te caíste muchas veces — Han la miró mal, ella río.
— Me tenías que sostener, no dejarme caer.
— Bueno, pero ahora ya sabes, ¿no? — se levantó tomando la mano de su pareja — el que se caiga primero pierde.
— Hecho.
La pareja entró a la pista de hielo y comenzaron a patinar, Seo-jun patinaba como todo un profesional sorprendiendo a su chica.
— ¿Estuviste practicando? — el asintió tomando la mano de ella.
— Si, lo hice — confesó con una sonrisa egocéntrica — hagamos una apuesta, el primero en llegar a la columna de haya pide su premio, ¿qué te parece? — ella asintió.
— ¿Listo para perder? — preguntó Ji-Kyung.
— ¿Perder yo? — rio — hagámoslo.
Los dos se pusieron en posición, los dos comenzaron a patinar rápidamente hacia la columna, gracias a que Seo-jun era más alto llegó primero.
— Eso es injusto, tú tienes piernas más largas — dijo llegando con el abrazándolo del torso.
— es envidia — ella río y dejo un beso rápido en sus fríos labios para después separarse del abrazo.
— Okey, acepto que perdí, ¿qué quieres que te de como premio? — él lo pensó un poco.
