Capitulo 5

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Antoni Greco

Señor....solo, nosotros la dejamos,en una tienda para recibir una llamada,y cuando viramos ella ya no estaba.....

Dice uno de los guardaespaldas,eso no me importa,mi prometida está desaparecida,mi hijo lo está,maldita sea, guardaespaldas inútiles,sin perder más el tiempo saco mi arma de la parte atrás de mis pantalones y les disparo entre las cejas a cada guardaespaldas inútiles,sus cuerpos caen pesadamente en el piso de la mansión de mis padres.

Estábamos mis padres y yo,aquí,mi prometida y mi hijo están desaparecidos desde ayer, yo no me pensaba quedar aquí como inútil y no buscarla.

Entonces el timbre suena por toda la mansión y todos nos ponemos en alerta,me recorre un extraño escalofrío por todo el cuerpo.

Tanto mis padres como mis hermanos,sacamos nuestras armas para ir afuera de la mansión a ver qué era o quién era.

Abrimos la puerta,y miramos hacia el frente pero no había nadie, un aire da en nuestros rostros y un extraño olor llega a nuestras fosas nasales,un olor ferroso.

Entonces miramos hacia abajo,y nos quedamos quietos al ver lo que era, o quién era.Yo me quedé en shock,no podía ser.

Era ella,mi ángel,mi pequeño ángel,estaba acostada en la puerta enfrente de mi casa, pero no era eso lo que me llamó la atención,si no lo que había en el piso y en todo su cuerpo.

Sangre

Era sangre maldita sea,tenía heridas en su cuerpo, rápidamente tomo su cuerpo en mis brazos,veo que aún está respirando,con dificultad pero está respirando.

Todos nos ponemos de acuerdo para ir al hospital a tratar de salvar a la mujer que amo y a mi hijo.

Lo sentimos señores,no pudimos hacer nada—Dice el médico que atendió a mi prometida¿qué,cómo mierda no pudieron hacer nada?—las heridas que tenía,eran muy graves,había perdido mucha sangre, también tenía varios disparos en su cuerpo,en medio de la operación para retirar una de las balas,tubo un breve infarto, volvió a la vida por cinco minutos pero se volvió a ir,con respecto al bebé,ya no está, también fue afectado por todo lo que pasó el cuerpo de la señorita Angela,lo siento señores,pero la señorita Angela y el bebé, fallecieron.

¿Qué? no,eso no puede ser posible,el médico se va y nos ahí en medio de la sala de esperas del hospital, yo solo miro a mis padres y hermanos, y mis lágrimas empiezan a salir rápidamente,mi madre me abraza,luego mi hermanita, y después se le unen mi hermano y mi papá.

Los tengo a ellos,pero me falta ella,me falta mi pequeño ángel, recuerdo su risa,sus ojos verdes que resaltaban con su cabello rojo, cobrizo.

Recuerdo cuando me dijo te amo,por última vez y no lo sabíamos.

Antoni,te amo y siempre te amare,eres mi Serpiente Roja, mi demonio que llegó a mi vida para quitarle toda la tranquilidad que había,pero eso me gusta, te amo tanto Antoni.

Tambien te amo,mi pequeño ángel,y siempre te amare.

Con ese recuerdo en mi mente,meto un grito desgarrador y mi familia me aguanta más fuerte para no dejarme caer, los necesito,en estos momentos los necesito mucho.

Esa es la maldición de formar parte de la vida de un mafioso,pones en peligro a quienes se te acercan fuera de este mundo.

Despierto,con la respiración un poco entrecortada,por el sueño que acabo de tener o más bien,un recuerdo de algo que pasó hace dos años, aunque hayan pasado dos años,aveces duele.

Amor Italiano #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora