Parecía Un Ángel

50 4 0
                                    

Las pequeñas hordas siguieron llegando casi por dos días más y todos estaban cansados y de mal humor cuando por fin Alfa decidió ponerle fin  al reunirse con ellos y aunque Carol intentó matarla, la mujer solo les advirtió que ampliaría sus dominios, estableciendo nuevos límites que no debían cruzar. Cass se negó a ir a la reunión y dejar solo a Theo pero Daryl tenía miedo de que aprovechar que no estaba para irse de Alexandría, lo cual agradeció saber que no pasó.
Todo volvía a la normalidad o al menos lo parecía porque Lidia era ahora el blanco de las malas miradas y los comentarios desagradables, Cass sabía cómo se sentía eso, como era estar del lado del enemigo y aunque quería ayudarla, se mantenía alejada porque solo sabía que el miedo sacaba lo peor de las personas y podia traer viejos rencores al presente poniendo en peligro a su hijo.

Michonne había preparado la cena para todos pero aunque Theo fue con la promesa de hacer una pijamada con los niños Grimes, Cass decidió quedarse en su habitación para evitar que Daryl se sintiera incómodo con su presencia, después de todo él no tenía porque seguir viviendo con ella y quizá ahora que Carol estaba de vuelta podrían mudarse juntos o con Michonne.
La rubia se había dado un baño y estaba cepillando su cabello cuando alguien llamó a su puerta, suspiró cansada pero aún así se puso de pie y se encontró con Daryl mirándola serio.

- ¿Paso algo?

- ¿Por qué no fuiste a cenar? - le preguntó sin responderle.

- Estoy cansada y solo quiero irme a dormir. - ella se encogió de hombros y volvió a caminar a su tocador para terminar lo que hacía.

- No tienes porque evitarme, tienes el mismo derecho que cualquiera de pasar tiempo con los demás. Esta es tu casa también.

- Okey... gracias supongo. Puedes irte ahora. - ella no quería ser fría con él pero había entendido que ya no podía contar con su amistad y empezaba a aceptarlo aunque fuera doloroso.

- ¿Que pasa contigo?

- Daryl enserio estoy cansada, no pasa nada. Solo no tengo ánimos de hablar o pelear o sentirme mal por hacer lo que me pediste que hiciera. Así que solo vete y no te preocupes por mí.

- ¿Aún piensas en irte? - ella sonrió de lado y lo miró

- No, no con todo lo que está pasando. Podría hacerlo pero ¿donde es seguro? Theo no se merece que le quite a las personas que quiere, que le quite su hogar solo porque yo no quiero estar aquí.

- ¿Harías algo por mí?  - Cass frunció el ceño al escucharlo pero aún así asintió - Habla con Lydia, dile que merece estar aquí... las cosas no fueron fáciles para ella y tú... - el se detuvo antes de decir algo que la lastimara más, pero ella lo conocía y termino por él lo que no se animaba a decir.

- Yo estuve en la misma posición ¿cierto? Queriendo a un monstruo que quiso matarnos a todos. Me encantaría ayudarla, me encantaría decirle que todo estará bien y solo tiene que resistir pero sería una mentira porque cuando la gente tiene miedo, hace cosas estúpidas y cuando todo explote, no me verán como la chica que los ayudó a ganar la guerra. Solo seré... un enemigo más.

- Eso no es cierto. La gente te quiere, te respeta. No eres como él.

- No importa. Nunca importa porque al final, solo ven los errores. ¿Sabes cuantos niños fueron a mí clase hoy? - Daryl negó con la cabeza - Lydia, Gracie, Judith y Theo. Lo mejor que puedes hacer es guiarla tú. Yo no soy buena para ella en estos momentos, lo siento... ahora solo quiero dormir. ¿Puedes irte? - Daryl la vió suspirar, el cansancio en ella era evidente y no le quedó más remedio que irse pero le rompió el corazón escuchar sus sollozos detrás de la puerta porque podía ver qué ella intentaba mantenerse fuerte y tenía miedo que a pesar de sus palabras, terminara rindiéndose porque sabía que lo que decía era cierto.

Make Me Your VillainDonde viven las historias. Descúbrelo ahora