Capitulo XLV

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        Pov Félix

Acababa de despertar ayer había sido un gran día.

Me levanté, tomé una ducha y me vestí para bajar a desayunar.

— ¿Perfume hijo? ¿Ocasión importante?- asentí sonriente mientras me sentaba y mamá me servía el desayuno.

— Saldré con EunJi hoy y quería verme bien.- mi madre sonrió y se sentó a mi lado.

— Que bien hijo, me gusta esa sonrisa tuya.

— Es por ella mamá, solo por ella.

Después de comer y subir por mi teléfono salí de casa rumbo a la parada de autobús.

Jinnie 💘

Voy a tú casa, ¿Ya estás lista?
10:23p.m.

Espere por su respuesta pero no hubo alguna.

Llegué a la parada y comencé a cruzar el puente a mitad de este pude observar el pequeño riachuelo del canal.

Mirando al suelo observé algo brillante, lo tomé y caí en cuenta que era un collar.

Me pareció familiar, casi igual al que tenía EunJi pero no podía ser el mismo.

Seguí con mi camino y al ya estar al inicio de su calle me paralicé.

Habían dos autos policiales justo en la entrada de su casa, observé a más personas fuera y caminé más rápido hacia ellos.

Ya cerca observé a Chan abrazando SeungMin.

— Félix...

Ya mi respiración se estaba volviendo irregular.

— YongBokkie relájate primero.- me habló ChangBin que acababa de salir de la casa.

— ¿Qué sucede? ¡¿Ellas están bien?!- traté de entrar pero Bin me detuvo por los hombros.

— Félix calma.

— ¡¿Pero qué sucede?! ¡¡Respondanme!!- escuché sollozos desde adentro y luego observé a la señora Park derramando varias lágrimas.- Señora...

— ¡¿Félix en dónde esta?! ¡Dime Félix!- estaba tan confundido y me acerque.- ¿Dónde está mi hija?- preguntó entre lágrimas.

Observé a mi alrededor los chicos bajaron sus cabezas y sentí una punzada en mi pecho.

— ¿Ella no llego anoche?- negó.- ¿Pero yo la acompañe hasta el pue...?- tomé el collar de mi bolsillo, ¿Es de ella?- ¡Oficial yo encontré.. este collar en el puente! Es de ella...- su madre observó el collar y rompió a llorar.

— Si es de ella...

Me comencé a exasperar.

— Tenemos que esperar a que cumpla 48 horas de desaparecida.- habló el oficial.

— ¡¿48 horas oficial?!- exclamó SeungMin también entre lágrimas.- ¡Debió ser ese sujeto! ¡Estoy seguro!

— ¿A quién se refiere joven?

— ¡Si debió ser él!- dije yo está vez.- Ella me dijo que lo había visto más de una vez pero que no se había acercado.

— ¡¿Qué?! ¡Si le hace daño lo mataré!- gritó la señora Park.

°Una Segunda Oportunidad° Lee FélixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora