09. De un color rojo

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Arabella había hecho algunas amistades en su nueva escuela, John comenzó a ser más cariñoso con ella. Incluso lo era enfrente de los demás chicos.

Pero no eran nada.

No había dejado de pensar en esa tarde donde perdió su virginidad con John, fue delicioso.

Aunque también fue doloroso, le dolían las caderas. Pero se las ingenio para mentirle a su madre.

Miriam dejo uno de sus trabajos a petición de Arabella, sabía que el alcoholismo de su madre era por el trabajo. Y no le gustaba verla así.

✎ᝰ..

Hoy tocaba educación física en la escuela de la rubia, era cansado estar corriendo por toda la cancha. Pero así era la vida.

—¿Que tal con ese tal John?—preguntó Magali con una sonrisa agotadora.

—Bien, supongo—murmuró agitada.

—No me dijiste cuantos años tenía.

—Es mayor que yo.

—Ten cuidado, Ara—la miro preocupada.

—John nunca me haría nada, es bueno.

Después de pasar tiempo corriendo, ambas fueron a sentarse con otro amigo
llamado Theodore.

—¿Y serás romeo en la obra?

—Sí, pero ahora tienen que elegir a Julieta.

—¿Puedo ser el árbol?

Los tres se rieron y luego volvieron a hablar de temas importantes, criticar a sus compañeros. Claro que sí.

—Por favor que Lizeth no sea mi Julieta.

Ambas chicas le dieron un suave empujón en el hombro.

—No seas así—Arabella se quejo rodando sus ojos.

—¿Que? Lizeth es literalmente una cara de pizza—se burlo—. Con tantos granos.

—Theo, el acné no se contagia.

—Eso espero, me daría mucho asco besarla.

—Ya deja de ser tan llorón, por todo te quejas.

—¿Yo? ¿Quejarme? ¿Cuando?

—Ay por favor, eres el sujeto que más se queja.

—No tanto como el profesor Rudy.

Los jóvenes pasaron educación física jugando entre ellos, trotando y haciendo mucha actividad física. Era muy agotador estar bajo del sol.

✎ᝰ..

Arabella estaba caminando hacía los probadores para tomar su ropa y cambiarse nuevamente.

Pero sintió una punzada en su abdomen bajo.

—Mierda—susurro al darse cuenta que mancho sus pantalones.

El dolor era insoportable y el sangrado era muy grande, nunca le había bajado tanto. Ahora sentía vergüenza, estaba en la escuela y sus pantalones totalmente manchados.

Se amarró la sudadera alrededor de su cintura y la puerta se abrió de golpe.

Era Magali.

—¿Todo bien?

—Sí—tomo su vestido y se lo llevo en mano.

—¿Te irás así? 

—Me bajo y me duele mucho.

Magali se detuvo a ver si otras personas estaban alrededor de ellas. Eran los años 50, estos temas debían ser tratados en privado.

—Ve a la enfermería.

—Me duele mucho—se inclino abrazando su abdomen.

—Llamaré a una maestra, ya vengo.

Magali corrió escaleras arriba y se perdió de la vista de Arabella, la joven se retorcía de dolor y soltaba pequeños quejidos.

Como pudo comenzó a caminar hacía las escaleras para llegar a la enfermería, hasta que la voz de la maestra la detuvo.

—Usted debería estar en clases.

—Es que tuve un problema.

La joven maestra se acercó a ella y Arabella susurro.

—Estoy menstruando y duele mucho.

—Venga conmigo señorita McCartney, la llevare a la enfermería. ¿Le duele mucho?

La rubia asintió y la maestra la tomo del brazo, pegandola a su costado y la llevo a la enfermería.

La maestra se quedo ahí para ella, la enfermera le dijo a Arabella que se quitara la sudadera y ella lo hizo. Era una mancha gigantesca en su pantalón.

—Dios, esto es demasiado. Tendrás que ir a casa.

—Pero no puedo caminar, me duele.

La enfermera y la maestra se miraron, para luego dirigir su mirada a la joven.

—¿McCartney, has tenido relaciones?

Arabella las miro y su mentón tembló levemente.

—Hable ahora señorita McCartney, porque lo que tiene allí abajo es una hemorragia.

✎ᝰ..

Arabella sería trasladada a un hospital cercano a la escuela en la ambulancia, la enfermera y la maestra seguían con ella en la ambulancia.

—Por favor.. no se lo digan a mi madre.

Rogó con los ojos llorosos y ligeramente rojos.

—Lo lamento, pero usted al ser menor esto debe ser comunicado a los padres.

—Pero—

—Pero nada, entienda. Debemos llamar a su madre y decirle la verdad.

Arabella se callo y se recostó sobre la camilla de la ambulancia.

—¿Hace cuantas semanas tuvo relaciones?

—Hace 2 semanas.

—Mira, nosotras también fuimos adolescentes y también quisimos experimentar cosas nuevas. Pero, tu eres demasiado joven.

—No pensé que..

—¿Quedaría embarazada y lo perdería? Ya sabes lo que esta bien y lo que está mal. Y no, no te digo que no tengas relaciones pero cuídate. Esto es muy arriesgado.

Algunos enfermeros trajeron una silla de ruedas para que Arabella no tuviera que caminar, la enfermera y la maestra la siguieron hasta que las alejaron.

—¿Crees que estará bien?

—Eso espero.

✎ᝰ..

Arabella estaba en una camilla viendo al doctor enfrente de ella.

—Ahora abra esas piernas, aunque seguro ya sabe como abrirlas.













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John Lennon's Girl. [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora