35. Sesión de fotos

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Arabella estaba en la tina con espumas, se estaba relajando tanto. Moriría por estar allí por siempre.

La espuma, aromatizada con lavanda, la envolvía en una nube de tranquilidad, y el vapor cálido acariciaba su piel.

Hoy tendría un almuerzo con John y quería oler muy bien, aunque John siempre olía a cigarros.

En cambio Arabella siempre olía a flores y coco, cuidaba muy bien de ella. Recordo cuando su madre le decía que gastaba mucho en su cuidado.

Pero aun así siguió cuidándose corporalmente.

Justo cuando sus pensamientos se sumergían en la anticipación del encuentro, el sonido estridente del teléfono interrumpió la calma.

Arabella frunció el ceño, un poco molesta por la interrupción. Salió del baño con cuidado para no resbalar, el agua goteando de su cabello y la espuma deslizándose por sus brazos.

Tomó una toalla suave y se envolvió con ella, aún con la mente a medio camino entre el baño y el esperado almuerzo.

Con un suspiro resignado, levantó el teléfono. Al otro lado de la línea, la voz inconfundible de John Lennon la saludó con su característico acento.

-Hola, amor-dijo con tono suave pero algo dubitativo.

Arabella sonrió, imaginando su rostro al otro lado del teléfono, pero esa sonrisa se desvaneció cuando John continuó:

-Lo siento mucho, pero tengo que cancelar el almuerzo de hoy. Surgió algo.

El corazón de Arabella se hundió un poco, aunque intento no mostrar su decepción.

-Oh, entiendo, John. No te preocupes.

Respondió intentando mantener su voz ligers, John se disculpo varias veces. Prometiendo que se verían en otra ocasión.

Después de colgar el teléfono, Arabella se quedó en silencio por un momento, mirando el baño lleno de vapor que había dejado atrás. El agua aún estaba caliente, la espuma aún fresca. Decidió que, aunque su almuerzo había sido cancelado, su día no estaba arruinado. Se volvió a meter en la tina, cerró los ojos y dejó que la música continuara llevándola a otro lugar.

✎ᝰ..

Arabella estaba aburrida, la almorzó y ya había visto la TV. Pero seguía aburrida.

Mientras pasaba los canales de la TV su mirada se dirigió a una cajita de madera que tenia en su mesita de noche.

Solto el control y tomo la cajita, de allí saco un porro qué tenía guardado.

Encendió el porro y, tras una calada profunda, sintió cómo la tensión se disipaba.

La mezcla de humo y aire fresco que entraba por la ventana abierta le dio una sensación de libertad. Dejó que la brisa suave se llevara el humo, mientras sus pensamientos se dispersaban,

Flotando como nubes en su mente. La música seguía sonando de fondo, una mezcla perfecta para acompañar el ambiente tranquilo y despreocupado que había creado.

Justo cuando comenzaba a sumergirse en esa calma, el teléfono volvió a sonar. Con un poco de fastidio, alcanzó el aparato, pensando que quizás John había cambiado de opinión. Sin embargo, cuando contestó, la voz al otro lado era femenina, profesional y directa.

-¿Arabella? Soy Nora, la fotógrafa.

Arabella se enderezó un poco, interesada.

-Queremos ofrecerte una sesión de fotos para esta tarde. Es un trabajo estilo romántico, muy elegante. ¿Estás disponible?

John Lennon's Girl. [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora