Cap 43

647 38 6
                                    

Julietta

Despues de acabar esa conversación con mi tío Mike y finalizar con las tareas de financias me dirijo a donde la guardia donde espero encontrarme con Raphael ya que la conversación con mi tío me dejó pensando.

Una vez llegó un guardia me detiene haciendo que Raphael que está a unas metros alejado nos mire con curiosidad.

-¿Necesita algo princesa?

-Solo venía a ver a su supervisor- le digo seriamente.

El guardia asiente dejandome pasar hasta posicionarme al frente de Raphael.

-Hola- me dice.

-Hola Raphael, solo quería ver cómo iba la guardia.- le informo haciéndome pasar por toda una profesional.

-Bien- me asegura.

Yo asiento y nose que más decirle.

-¿Algo más? "Princesa"- dice con cierto tono de burla en su voz.

-No, nada más capitán- digo rodando los ojos.

Me doy media vuelta ya que no tengo más que hacer sinceramente, empezaré a adelantar algunos deberes y después iré con algunos de mi hermanos.

Ben

Me concentro en la peli que estoy viendo, sinceramente no le encuentro sentido nos ponen feísimos piensas que somos seres horrendos estos humanos.

Me apuesto lo que sea que el director o el humano que nos haya visto y empezó a contar leyendas sobre nosotros nos pilló en medio de una transformación, joder que feos.

Miró mi reloj que me indica que son las cinco de la tarde, me centro en la película hasta que un olor raro proveniente de Darío me hace mirarle fijamente.

-¿Que?- me pregunta al pillarme observándolo de una manera diferente.

-Hueles a alguien...¿La conozco? Me apuesto lo que sea que has metido a la dueña de ese olor a la casa.- le informo cruzandome de brazos... No me creo que mamá y papá se hayan ido literalmente una semana y estos ya meten a casa a cualquiera así de simple.

-No es de tu incumbencia, además callate que si fuera tú querida Keily seguro que no te molestaba.- me dice con soberbia.

-Callate- le advierto- eres el menor debes de mostrarme respeto Darío y tenemos unas normas te guste o no las cumples, como vuelvas a mencionar a Keily con ese tono no me hago cargo de lo que ge pueda llegar a hacer.

Le amenazó serio antes de irme y agarrarme a puñetazos con el, no sirve siempre a sido así, un niño egoísta y pensando que vive bajo sus leyes. Cretino.

Bufo en molestia y me dirijo a la casa de Keily, se donde vive ya que un día la acompañe a casa por qué su hermano tenía fiebre y estábamos juntos en le biblioteca de mi casa cuando la llamaron.

Mi loboDonde viven las historias. Descúbrelo ahora