Cap 22

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Eros

Después de esa reunión me dispongo a irme a dar una vuelta, para pensar en mí abuela y lo mal que lo abra pasado mamá para que se lanzará así a ella.

Me siento en un tronco en medio del bosque mirando como los rayos del sol se filtran entre las hojas de los árboles...y a su vez la paz que da este sitio.

Con la cabeza entre mis manos decido suspirar varias veces y siento que alguien se a sentado a mí lado.

-Dario no estoy de humor-le digo a mi hermano.

-No soy tu hermano- levanto mi mirada para encontrarme con Bianca haciendo que suspiré.

-No tengo un buen día.- le informo por qué no estoy de humor para sus reclamos o berrinches de niña pequeña.

-Lose-admite- solo venia a por frutos del bosque y te encontré a qui, nose qué te sucede pero creo que la compañía no te vendría mal.- me dice mirando al frente y me fijo en su cesta media llena de frutos.

Su mano coge dos moras de la cesta y se la introduce en la boca, para volver a coger unas pocas más y ofrecerme a lo que le cojo una contento.

-Son mis favoritas-le admito.

Ella sonríe.

-No están mal.

Sonrió no parece tan inmadura, está en silencio solamente a mi lado compartiendo la fruta de su cesta, seguramente iba de camino a su hogar.

Julietta

Toco varias veces la puerta asegurándome que nadie me ve y me abre.

Me coje de la mano y me mete dentro de esta rápidamente.

-¿Estas bien?

-Bueno si.

Me abraza y suelto todo el aire retenido que no sabía que lo tenía ahí, y me acuerdo me acuerdo de cómo siendo una niña de seis años bien empapada con mi osito a su puerta y sentí esta sensación de protección a su lado, así era feliz me sentía bien.

(...)

Después de ese abrazo nos sentamos en unas sillas de la cocina y me servio una taza de leche acompañado con dos galletas.

-Hoy conocí a mí abuela materna y mi mamá... Bueno no reaccionó bien.

-¿Te hizo algo la señora?-dice preocupado y tenso.

-no no nada de eso, solo que bueno habló mal de mama.

El me observa en silencio y yo agacho la cabeza hasta que siento su mano en mi pierna haciendo que mi piel se erice.

- mmm después mi madre se abalanzó sobre ella y... Bueno mamá nos comentó que no fue una buena persona con ella pero si con el tío Alex.

-Ya...En el mundo suele a ver gente así- me dice sin apartar su mano de mi pierna.

Nos quedamos en silencio y yo lo miro atenta, dejo caer mi mirada a su hombro y la curiosidad me mata por saber quién es esa joven a la que me puso los cuernos conmigo, jeje por qué así fue dos besos me sentí mal por eso pero besa genial el hombre.

-¿Como se tomó tu pareja al enterarse de que te bese?- pregunto con miedo.

-No es mi pareja- me dice seco.

-¿Por qué tienes la marca?

- Es difícil Julietta no me apetece hablar de eso, además, hablabamos de tus problemas no de los mios- me dice calmado pero con cierto tono de molestia en su voz.

- lose- le afirmó- pero no está nada mal escuchar también al otro.

El me manda una mirada desesperada no quiere hablar pero se que oculta algo, algo que tiene que ver con la mujer que la marco.

-Creo que te deberías ir, tus padres te buscarán.

¿Me está hechando?

-Si seguro que me buscan y pensaran cualquier cosa al estar contigo a solas- le suelto con una mueca.

Mi loboDonde viven las historias. Descúbrelo ahora