Cap 39

723 43 10
                                    

Julietta

Me despido de mis hermanos para ir junto a Raphael ahora que mis padres no están podré visitarlo más amenudo solo como amigos.

Voy de camino a su mini cabaña no sin antes pasar por la cocina y comer un poco de chocolate.
Una vez finalizado me vuelvo a dirigir a mi destino principal.

Me pongo enfrente de la puerta comprobando por última vez mi vestimenta la cual consiste en unos leggins negros y una sudadera azul. Tocó la puerta varias veces y espero paciente. La puerta se abre mostrándome a un Raphael vestido con unos vaqueros negros y una sudadera gris, unas gotitas de agua caen por su cabello (seguramente acaba de salir de la ducha)

Raphael

De todo lo que pensaba hacer en todo el día no me imaginaba a Julie en mi puerta impaciente mirándome descaradamente.

-Hola- le digo para que ella comience a hablar diciéndome el por qué a venido.

-Hola¿Que tal?

Yo sonrió ampliamente y ella me mira desconcertada.

-No te rías.

-¿Que haces a qui Julie?- le pregunto algo más serio sin borrar la sonrisa, ya que como Adam nos pille me castra.

-y-yo solo venía a verte- dice- por qué ahora estoy al cargo y bueno ya sabes que vamos a trabajar juntos- dice intentando mantenerse seria.

Observo como se muerde los labios a causa del nerviosismo y yo me imagino otra vez besándola como las otras veces.

-¿Quieres hablar de algo en especial?

-no- dice ella tragando grueso- no tenemos nada de que hablar tú y yo somos amigos.

¿Amigos? ¿AMIGOS?

Noto que me empiezo a molestar y ella parece notarlo que me mira con los ojos muy abiertos, respiro y se me ocurre soltarle la mayor estupidez de mi vida.

-¿Sólo amigos? Los amigos no se besan.- le recuerdo haciendo que ella vuelva a estar tensa.

-No recuerdo eso- dice segura de si misma jugando con sus manos y no lo aguanto no entiendo.

Me voy a dar la vuelta cuando me toca la espalda y me abraza haciendo que me relaje, solo ella causa eso en mi desde pequeña una sensación de paz. Jamás la miré con otros ojos a pesar de que fuera mi mate¡Por dios era una niña! Y ahora... Ahora daría lo que fuera por ser su novio, amante, amigo y todo lo que ella quisiera que fuera.

-¿Estás bien?- me pregunta separándose algo de mi.

Me agachó a la altura de sus labios y los rozo con los mios pero no quiero besarla, quiero que lo decida ella que sea ella la que tome el control sobre mi cuando quiera y que sepa que puede hacerlo, solamente ella. Fui un estúpido por dejarme por otra mujer teniéndola a ella a mí lado.

Dejo de pensar a sentir sus labios contra los míos otra vez joder mi sabor favorito sin duda, la cojo en mis brazos y la meto dentro de la cabaña para que estemos agusto y a solas. Sólo mía y yo solo suyo... Pero entonces inconscientemente me toca la marca de Mara haciendo que está me arda y deje de besarla dejándola en el suelo.

-Perdon- le digo a lo que ella se da cuenta y empieza a bajar la cabeza.

-Creo que hasta a qui deberíamos llegar Raphael- dice ella casi en un susurro.

-No, no es tu culpa.

-¡No la superas!-dice está vez alto.- Eres de otra mujer... Yo no puedo intervenir en eso Raphael no..no puedo...

-No Julie escucha... Está marca me la hizo ella, yo no la amo joder- digo frustrado- Yo te amo a ti desde el momento que te conocí, eso fue un error mío te juro que ya pasó no quiero nada con ella y nunca lo quise.- le digo.

-Raphael estás marcado...- dice ella triste- ya no soy una niña para no saber el significado de una marca de unión... Tú no me amas y eres de ella.

Mi loboDonde viven las historias. Descúbrelo ahora