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"Hyunjin"

Nos separamos de aquel tan suave, lindo y dulce beso, nos miramos a los ojos y le sonreí ampliamente.

– Tu labio está sangrando, Hyun

Dijó limpiando mi herida con un pedazo de papel, sonreí al mirarlo concentrado y cuando estaba dejando el papel en la mesa dejé un beso en su mejilla, el me miró y noté sus mejillas sonrojarse de nuevo mientras me sonreía. Aún manteníamos algo de cercanía, ya que yo no había soltado su cintura.

– Gracias por curarme, Lixxie

– No hay de que, Hyun 

Nuestras miradas expresaban todos nuestros sentimientos, ante mis ojos era perfecto, era tan lindo, sus rasgos tan delicados y suaves, sus bonitas pecas que eran como constelaciones, esos ojos tan bonitos y oscuros que tenía y su cabello que caía con suavidad. Simplemente era precioso en cada uno de sus aspectos, quería protegerlo, que nadie le hiciera daño. No tenía idea de todo lo que había estado sufriendo, pero quería ser un apoyo para él, y quería causar esa tan linda sonrisa que tenía.

– Eres muy bonito

– Que dices Hyun, para nada

– No, hablo en serio, eres muy bonito 

Su sonrisa brillaba y sus mejillas rojas resaltaban sus pecas, sonreí junto a él al saber que había causado esa reacción.

– Tú eres muy guapo

– Claro, solo mírame 

Él se río de mí y me abrazó escondiendo su rostro entre mi cuello y mi hombro.

– Hyun... Tú no vas a alejarte ¿Verdad? No quiero que te alejes

Al escucharlo solo dejé caricias en su cabeza y negué.

– No lo haré

– tú no me tratarás mal ¿Cierto?

Sus palabras me habían causado una opresión en el pecho, sabía que Felix había pasado muchas cosas malas, y no podía creer como le podían hacer tanto daño a una persona tan linda y pura.

– No, Lixxie, lo prometo

Trataba de consolarlo y hacerlo sentir seguro entre mis brazos, acariciaba aún su cabeza con suavidad. Podía sentir su respiración cada vez más calmado y como si dejará caer su peso cada vez más. Traté de hablarle y con esto me di cuenta de que se había quedado dormido, me levanté cargandolo con mucho cuidado de no despertarlo y subí por las escaleras buscando su habitación, cuando llegué a esta lo recosté suavemente y lo cobije. Pensé por un rato qué hacer y cuando estaba decidido a salir de la habitación sentí como tomó mi brazo, volteé a verlo y aún cerraba sus ojos.

– Quédate conmigo, Hyun

Me dijó adormilado y solo fruncí mi ceño sin saber que responderle.

– No debería quedarme, Lix

– Por favor, no te vayas

Sonreí al ver como se recorría haciéndome un espacio a su lado y golpeabo este con su mano, pero sus ojos aún seguían cerrados. Solo me acosté a su lado y él inmediatamente me abrazó para acurrucarse en mi pecho.

– ¿Y si llega tu madre?

– ella no importa, nunca viene a verme a mi cuarto, solo va al suyo y se duerme

Por fin abrió sus ojos y me sonrió de lado.

– Si estás aquí siento seguridad, quédate esta vez

Asentí aceptando su petición y él satisfecho volvió a recostarse, pero ahora en mi pecho buscando algo de seguridad en este, yo acaricie su cabeza y acomodaba su cabello.

Su respiración volvía a sentirse gradualmente más tranquila y volvió a quedarse dormido profundamente. Bajé mi mirada logrando visualizar poco de su rostro, y sonreí de lado con algo de tristeza. Recordaba ahora las cosas que aquel idiota había dicho, cosas que me habían hecho descontrolarme.

☆☆☆☆

El idiota que al parecer se llamaba "San" se reía mientras nos golpeabamos el uno al otro, algo que me hacía tomar un poco más de enojo. Tomé el cuello de su camisa y cruzando su pie con el mío hice que cayera al suelo, me coloqué encima inmovilizandolo un poco y gracias a la furia golpeé su rostro algunas veces seguidas mientras veía como él trataba de cubrirse.

Felix es como una putita

Escuchar eso me hizo soltar cada vez más golpes y con más fuerza, ¿Cómo se atrevía a decir algo así de Lixxie? Pero él solo se reía como un loco.

– Debo aceptar que tiene un cuerpo increíble, aunque sus brazos y sus muslos son un asco, llenos de cortadas y golpes...

No callaba el idiota, y yo no dejaba de golpearlo cada vez más cegado por el enojo.

– No hables así de él

– No digo mentiras, cuando lo folle-

No quise que siguiera hablando tanta mierda y solo golpeaba ya sin objetivo alguno, ya no tenía control de lo que hacía y solo me mantenía con un enojo realmente inexplicable... Al parecer Felix había hablado, pero no había escuchado nada de lo que había dicho.

– ¡HYUN, DETENTE!

Su voz fue como un balde de agua que me hizo retomar la conciencia, miré al imbécil por una última vez, que lucía totalmente ensangrentado y me levanté para irme con Felix como si estuviera desconcertado.

☆☆☆☆

Confiaba plenamente en Felix, y lo quería en grande, así que odiaba saber que alguien pensaba en él como un objeto. Mientras aún lo acariciaba escuché la puerta principal abrirse, sonaba algo de ruido en la cocina y supuse que era su madre. Luego escuche como subía la escalera, así que me puse algo nervioso, ¿Qué pasaría si me encontraba así con su hijo? Era algo que me preocupaba, pero toda esa preocupación se desvaneció en el momento en el que vi que su mamá pasaba por la puerta y ni siquiera se tomaba el tiempo de voltear a la habitación, después de unos segundo escuché como cerró la puerta de la habitación de a lado.

Ya más tranquilo cerré mis ojos y me deje ganar por el sueño y la comodidad que sentía a lado del rubio, quedándome así completamente dormido.



















¡Hola!

Lo escribí con sueño honestamente, y es bastante corto, así que no es muy bueno, solo quería explicar un poco más del como Hyunjin se interesaba en ayudarlo. De igual forma espero les guste.

Gracias por leer.

Hasta pronto. 🌷

El arte más bello, eres tú.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora