capítulo 18

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— A ver, ¿por qué no querías que el tal Wonbin se enterara de tu relación con Eunseok?—Sangyeon me dio un vaso con agua y se sentó a mi lado. Después de que mi turno terminara y tuviera que irme, fui directo a la casa de mi mejor amiga para contarle lo que había sucedido, aunque ella no se encontraba en ese momento, fue su hermana Jiyeon la que me abrió y me dejó pasar para que esperara a Sangyeon en su habitación, la cual llegó casi una hora y media después.

Me quedé en silencio unos segundos y le di un trago al agua, recordando la mirada de dolor y desolación en los ojos de Wonbin, me partió el corazón verlo poner una sonrisa mientras nos felicitaba por nuestro noviazgo, luego se darse la vuelta para ir a ponerse el uniforme fingiendo que no le había dolido lo que escuchó.

— No puedo decirte.—contesté con la cabeza baja.— Es algo privado.—Sangyeon abrió los ojos en grande, no necesitó que yo le dijera nada, ella sola averiguó lo que estaba pasando.

— No puede ser... El Wonbin ese está...—la detuve antes de que terminara la oración. Suspiré volviendo a beber del agua y me limpié los labios con el dorso de la mano.

— Me siento como una basura, Wonbin se confesó conmigo, me abrió su corazón y yo fui una maldita egoísta, puse mis sentimientos por encima de los suyos, importándome poco lo que él...

— Como debería de ser.—mi mejor amiga me interrumpió.— No deberías priorizar los sentimientos de otras personas sobre los tuyos, Sinae, no es sano... Y quiero que sepas que está bien ser egoísta de vez en cuando.—palmeó mi hombro suavemente, recordé que ya habíamos tenido una conversación sobre eso años atrás, cuando estaba con Taeyang.— ¿Sabes? Hay algo que no me cuadra en todo esto... Llámame paranoica o como quieras pero no creo que Wonbin sea un santo, ¿por qué le diría a una persona que apenas conoce sobre su orientación sexual y de su enamoramiento por su jefe? No tiene sentido... No me lo tomes a mal pero eres muy ingenua, tienes demasiada confianza en la bondad de las personas, seguramente vio eso en ti y supo que si se confesaba contigo no intentarías nada con Eunseok, porque no nos hagamos tontas, se nota a leguas la atracción que hay entre ustedes dos, hay que ser ciego o estúpido para no verlo.—quise soltar una risa al recordar a Shotaro pero no era momento de reír.

— No creo que Wonbin sea así.—murmuré terminándome el agua y le devolví el vaso a Sangyeon, agradeciéndole. Ella se levantó para ir a la cocina por algo de comer y yo me acosté en la cama, miré el techo y solté un suspiro mirando la hora en mi celular, eran las nueve de la noche, así que todavía faltaba un rato para que el restaurante cerrara.

— ¡Sinae, ¿quieres ramen?!—Sangyeon me gritó desde la cocina, mis tripas hicieron ruido al escuchar la palabra ramen, haciendo denotar el hambre que tenía, no había comido nada desde la mañana cuando pasé a la cafetería de Jake y Jay a comprar unos sándwiches y un par de malteadas para Eunseok y para mí.

— ¡Sí, ya voy!—me puse de pie y salí de la habitación para ir con mi amiga.— ¿Quieres que prepare el ramen?—pregunté al entrar a la cocina.

— No, ya pasaste toda la tarde cocinando, toma un descanso de la cocina y déjame consentirte... Pero antes una pregunta, ¿con ésta agua es suficiente?—me enseñó la cacerola.

— Échale un poco más para que los fideos se cocinen bien.—asintió yendo a hacer lo que le dije.— Oye, se me estaba olvidando decirte, algo más sucedió hoy... Sungchan sabe del embarazo de Haeun.—solté parándome a su lado.

— ¡¿Qué?! ¿Le dijiste?—se volteó hacia mí bruscamente, haciendo que parte del agua en la cacerola se derramara sobre el piso y parte de la encimera.

Kitchen Assistant | Eunseok SongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora