• Episodio XXXVIII •

6 1 0
                                    

               ~ Quien realmente eres, Yuiki? ~

Yuiki se había quedado en silencio un momento, sabía que esta pregunta era muy personal para ella, en estos meses que nos llevamos conociendo, jamás me ha contado algo sobre ella, algo de su historia es a lo que me refiero, no sé si desde siempre a sido una demonio o una vez fue humana, no sé nada.
—Yo solía ser una aldeana en un pueblo en Alemania por los años 1930, mis padres eran muy adinerados así que a mi no me faltaba nada.
Tome su mano para que se sintiera más segura. Sabía que este tema era delicado.
—Mi nombre..era algo como..Emma? Algo así, no me acuerdo muy bien.
—Emma es un nombre muy bonito, Yuiki, podría llamarte así? O al menos deja llamarte Emi.
—Sería algo raro ya que hace muchos años no me llaman así pero, esta bien.
Sonreí.
—Tu sigue, yo te escucho.
—Bien..pues yo en aquellos años conocí a un chico muy lindo, era atento y cariñoso, lo que toda mujer quisiera tener. Se llamaba Matteo, nos conocimos cuando éramos jóvenes, vivíamos en un pueblo llamado Bamberg, él también era de mi estatus social así que mis padres y los suyos nunca negaron nuestro amor, años más tarde nos casamos y tuvimos a una pequeña niña, la tuve cuando yo cumplí..unos 23 años, más o menos.
Quede sorprendida ante las palabras de Yuiki, no podía creer que, en su vida pasada, formó una vida sin problemas.
—Matteo y yo teníamos 4 años de diferencia, mientras yo tenía 15 años él tenía 19, cuando nos conocimos, cuando tuvimos a nuestra pequeña él ya tenía 27 años.
—Te acuerdas cual era el nombre de tu hija?
—Creo que se llamaba Sarah.
—Sarah es un lindo nombre, Emi.
—Lo había elegido Matteo..pero gracias igualmente.
Se notaba en su mirada cuanto amo a ese chico llamado Matteo, cuando hablaba de él le brillaban sus ojos como una joven toda enamorada, se me hacía tierno ya que me recordaba a mí cuando hablaba de Kazuki.
—Cuando llegó el año 1939, cuando comenzó una guerra contra Francia. Cabe aclarar que yo para ese entonces no era judía y Matteo tampoco lo era, Sarah apenas tenía unos 3 años, era de noche, y escuchamos unos disparos proveniente de nuestros vecinos..
Su mirada se dirigió al suelo, sabía que esta era la parte que más le dolía de toda su historia, por alguna razón ya pensaba que iba a suceder.
—Matteo se despertó y fue a ver que estaba pasando, un par de nazis estaban pasando por el lugar buscando a judíos, Sarah se había despertado gracias a los ruidos fuertes. Se escondió detrás de mí mientras salía detrás de Matt, al principio solo se escuchó un disparo, metí a Sarah a su cuarto y...
Su voz se quebró, sabía que venía la peor parte, al mirar sus ojos, se cristalizaron y una lágrima se escapó de sus ojos, limpie sus lágrimas y tome sus manos, la abracé para que se sintiera un poco más cómoda.
—Matteo vino corriendo a casa intentando ocultarme..unos militares corrieron detrás de él y..le dispararon cuando él me estaba ocultando en la habitación..
Me sorprendí, me esperaba cualquier otra cosa pero menos eso.
—Los militares empezaron a inspeccionar la casa y encontraron a Sarah..ella empezó a llorar mientras me llamaba para que fuera a buscarla pero era imposible ir ya que me tenían amarrada..a ella también la mataron..en frente de mis ojos..
Me tapé la boca con mis manos, la pena me gano y solté algunas lágrimas, supongo que lo que yo e vivido no es nada comparado a lo que Yuiki o..Emma vivió en ese entonces.
—Mataron a mi esposo y a mi hija en frente de mis ojos..para que luego ellos..por turnos..
Agarro su cabeza y se cubrió la cara, soltó un sollozo.
—Empezarán a abusar de mi uno por uno..
Asco. Fue la única sensación que sentí.
—C-como cuantos..eran?
—Unos 15 o 20 hombres, lo no recuerdo bien..
Abracé a Yuiki, sabía que todo eso fue muy difícil para ella.
—Termine siendo el juguete sexual de todo ese pelotón, me llevaban a muchos lugares de Francia, solo para que en la noche mi cuerpo quedara destrozado, por dentro y por fuera.
Desvíe la mirada, Yuiki había vivido una vida feliz hasta los 26 años.
—Todo lo que hacía ese pelotón conmigo lo estaban haciendo a escondidas de su jefe, Adolf Hitler. Así que cuando él se entero 2 años después, mato a todo ese pelotón y yo por lo menos alcancé a escapar.
Dos años viviendo todo ese infierno..valla que Yuiki es fuerte, y mucho.
—Vivi por un tiempo en lo mismo, fui la amante de muchos hombres, aún me dolía la muerte de mis seres queridos, pero cuando me encamaba con un hombre todo ese dolor se desvanecía..
—Ya veo..por cuanto más estuviste así?
—Un año, mori a los 27 años, mientras me acostaba con un hombre, al terminar, él me mato.
—Valla forma de morir..
—Lo se..en un abrir y cerrar de ojos ya me encontraba en el dichoso infierno. No eran tan malo, era como una ciudad vuelta en llamas, allí todo era legal, y llegue así, como estoy ahora.


—Al paso del tiempo, aún siendo prostituta, conocí a un chico que quería viajar al mundo de los humanos pero para ellos necesitaba a una chica, pagó mis servicios y me platicó sobre su plan, que dominaría el mundo y todo eso.
Me reí un poco, acaso todos los villanos quieren dominar el mundo?.
—Cuando subimos, fuimos de cuerpo en cuerpo matando gente, volviéndolas locas y luego, como consecuencia, él se quedó en el cuerpo de tu padre, y yo, en el de tú madre.
—Disculpa?
Yuiki desvió la mirada.
—Nunca le hice nada a tu madre ya que era una mujer muy dulce, y fue la primera vez que sentí lástima por ella ya que se embarazó..de ti, Yuki.
Hay supe que, Yuiki nunca fue la mala, siempre fue obligada a hacer algo que lo quería por conveniencia de otro demonio.
—Luego tu mamá hizo el mismo ritual que hiciste tu, solo que esas cicatrices se borraron cuando fuiste creciendo.
—Ya veo...es bueno que hayas soltado todo, Yuiki.
—Eso espero..
—Puedes volver a tu vida amorosa con Vudú. Hasta puedes tener hijos con él ya que tienes cuerpo propio.
Golpee su brazo con mi codo, ella se sonrojó pero de color..azul?.
—C-cállate...
—Solo digo, azuladita
—No me llames así.
—Como digas
Nos reímos un rato y quedamos abrazadas unos momentos.
—Es mejor que vallamos a dormir, mañana debemos ir a la UA.
—Claro..vamos
Luego de eso, ella se hizo una pequeña cama en el suelo, nos pusimos pijama y fuimos a dormir, me daba pena todo lo que había pasado Yuiki, me gustaría llevarla a Alemania para que pudiera ver su antigua casa..si aún seguía allí después de todo lo sucedido..

Continuará...

Continuará

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
En tu mente, pero no en tu corazón (Kirishima x Lectora) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora