018 | Familia O Manada.

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Madisson McCall:

El cielo estaba completamente nublado, unas nubes oscuras que tapaban el color celeste del cielo, una tormenta estaba pasando justo arriba.

Las nubes negras y los grandes truenos se escuchaban a medida que el carro en el cual estaba avanzaba.

Era el carro de Allison, la castaña manejaba, a su lado estaba Lydia y yo estaba en los asientos de atrás, mientras miraba por la ventana, ¿Cómo termine aquí? Bueno algo larga la historia, pero estaba aquí porque vigilamos a los betas de Derek, quienes iban a una conferencia con el entrenador, iban en el camión al cual seguíamos.

Era extraño estar con ellas, pero aún así decidí venir, porque no quería que nada malo sucediera, solo quería cuidar a mi hermano y a Isaac, quien ya es oficial y es mi novio.

Su pedida fue sencilla, pero bonita al mismo tiempo, ambos estábamos sentados en una parte bonita y tranquila del bosque, Isaac había llevado una sábana para hacer un picnic y pasar el rato juntos.

Mi sorpresa cuando salió con un pastel de chocolate (mi favorito) y en el centro decía "¿Puedo ser tu novio?" Mis ojos se habían iluminado de la emoción y acepte al instante, tenía tiempo deseándolo.

Mis ojos estaban cerrados y estaba recargada sobre la ventana, mientras recordaba ese hermoso momento, pero todo fue interrumpido por nubes grises y el recuerdo de esa noche, era una pesadilla que me perseguía.

Si tan solo no hubiera estado tan cerca del precipicio.

—Madisson, Madisson — Lydia intentaba hablarme.

Al ver qué no hice caso llevo sus manos a mi cara y trono los dedos frente a ella.

Mis ojos se abrieron y mire a la castaña que estaba en frente de mi.

—¿Si? — pregunté mirando a la pelirroja.

—¿Estas bien? — preguntó Lydia.

—¿Te importa? — pregunté levantando mi ceja. — lo dudo, no después de lo que pasó en casa de Scott hace unos meses.

—Ahora entiendo muchas cosas sobre esto, entiendo porque querías matarme, y creo que podríamos ser buenas amigas — Dijo Lydia mirandome.

—Perdon — susurré.

—¿Que dijiste? — preguntó la pelirroja.

—Perdon — repetí — no quería hablarte mal, solo estoy algo nerviosa por lo que pasa.

—Todos lo estamos — Dijo Allison girando a verme.

Allison regreso su vista al frente al igual que Lydia, yo segui mirando por la ventana, los relámpagos y truenos por alguna razón me estaban relajando y me hacían olvidarme de la herida que estaba en mi abdomen, la cual Isaac me ayudó a coser, pues está no curaba y comenzaba a preocuparme.

—¿Estoy muy cerca? ¿No estoy demasiado cerca, verdad? — preguntó la castaña.

—Eso depende — dijo Lydia mirándola — solo estás siguiendo al autobús o estás planeando subirte en el.

—Si deberías retroceder — le dije a la castaña.

—Eso tambien depende, ¿Estamos hablando del autobús o del novio y ex novio al cual acosan — Dijo Lydia burlándose de ambas.

—No acosamos a nadie — le asegure a Lydia — solo cuido a mi novio y hermano, no sé cuál sea la excusa de Allison.

—Despues de lo que pasó no me alejaré de el — me aseguro la castaña. — y por cierto, todo comenzó cuando tú tocaste a mi puerta, y después dijiste que pasáramos por Madisson.

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