Darkness

010 | Tiempo

Madisson McCall:

Aveces me encantaba mirar las estrellas, el cielo estrellado y la luna iluminando todo a mi alrededor.

Una media luna brillosa y hermosa iluminaba el cielo, pude verla cuando mire por la ventana de la veterinaria.

Deaton había curado mis heridas del cuchillo, bueno, solo las desinfecto para que no se infectaran, sentía que curaban.

Scott todavía no despertaba, eso era bueno, pues necesitaba saber que decirle cuando esté lo hiciera, no podría soltarle una bomba así como así, sabía que a él le resultaría difícil escucharlo, pero quería creer que estaría de mi lado y me entendería.

No quería afrontarlo, no ahora.

Me levanté de la silla, haciendo que todos los presentes levantarán sus vistas a verme.

—Saldre un segundo — dije caminando hacia la puerta.

La mano de Stiles me detuvo, gire a ver al castaño, quien tenía la mirada cansada, todos lo estábamos.

—¿A dónde quieres ir? Puedo llevarte — me dijo el castaño.

Negué.

—quiero estar sola — respondí.

Me safe del agarre de Stiles y camine hacia la puerta, salí y camine hacia la carretera.

Todo estaba oscuro, solo las luces del letrero de la veterinaria iluminaba el camino, aún así quería estar afuera, quería que el viento pegará en mi cara y me relajara un poco.

Camine por la orilla de la carretera durante varios minutos, mire a mi alrededor para ver si no venía ningún carro, al no ver a nadie me acerque a la carretera y me acosté en el centro.

Mire el cielo oscuro.

Lo único que lo iluminaba eran pequeños puntitos blancos, eran estrellas y esa media luna en su punto más alto.

Solté un pequeño suspiro y mis ojos se cerraron.

Jamás creí arrepentirme de algo tanto como lo estoy haciendo ahora, no debería hacerlo, pues ella intento matar a mi hermano, pero tampoco quería matar a la madre de Allison, todo fue tan rápido, su cara cuando lo clave en su pecho, sus ojos llorosos y su boca en forma de sorpresa, me resultaba difícil olvidarlo.

Mis ojos volvieron a abrirse después de varios minutos, pues mi teléfono sonaba como loco, saque el teléfono de mi bolsillo y vi la pantalla.

Scott...

Respire ondo y conteste la llamada.

—Madisson, ¿Dónde estás? — preguntó el castaño.

—sali a caminar — le respondí.

—Bien, iré a casa ¿Quieres que pasemos por ti? — preguntó el castaño.

—No, caminaré — Respondí.

Diciendo eso colgué.

Scott había despertado, y yo todavía no estaba lista para hablar, necesitaba más tiempo.

Me levanté de la carretera y comencé a caminar hacia mi casa, estaba pensando una forma en la cual decirle a Scott que había matado a la mamá de su novia, pero cuando intentaba encontrar las palabras para hacerlo, mi mente se quedaba congelada.

Mi teléfono volvió a sonar, está vez era Isaac.

—¿Que pasa? — pregunté.

—Soy Derek, escucha lo que te diré, pues tienes que contar la misma versión — Dijo el castaño, estaba confundida — Yo mate a Victoria Argent.