WHY - Lando Norris

49; bad idea right?

Max esta en mi habitación, con una sudadera hecha especialmente para mi porque he quedo en la NYU.

Sí, un mes ha pasado y todo se ha sentido irreal.

Lando desapareció, lloré mil horas y luego estaba plantando flores en mi jardín para calmar mi ansiedad, cuando el correo llegó.

Mi felicidad no cambia dentro de mi cuerpo cuando leí "aceptada" en la parte superior. Ni siquiera puedo ocultarlo en mis redes sociales.

—Para la universitaria más hermosa —agita la sudadera de color gris y me la tira en mi cara, haciéndome reír antes de aventarme a sus brazos—. Sabía que lo lograrías.

—Soy inteligente, lo sé.

Las letras son en color morado y se que piensa en mi cada vez que ve ese color. Me lo ha dicho muchas veces.

—Anda pruébatela.

Salimos media hora después, junto a Charles y Arthur. Celebramos con champaña en un yate por mi logro. A la celebración se colan Pierre, George y Alex. Mi mejor amiga no esta porque esta en Francia con su familia.

Kelly Piquet esta tirando indirectas en twitter, pero como siempre hago como si ella realmente no existiera. Me parece gracioso como todos esperan que por fin explote y que la antigua Avery, la que peleaba por todo saliera flote.

Pero cambie, esa noche que me destruyó supe que pelear un lugar que no te corresponde ya no es decisión tuya.

Y eso mismo pasa con Lando, quien desapareció después de ese día y nadie sabe de su paradero. Lo último que supe es que estaba con Martin Garrix en Nueva York, pero fue hace semanas.

—¿Pero saben que me molesta? ¡Que Lando no este aquí! —me quejo como niña pequeña porque el alcohol ya esta haciendo efecto en mi y ser ridícula ya no esta pasando en el filtro de moralidad—. Llámenlo y díganle que su mon amour esta triste por él.

—Él es tu mon amour, tu no eres su amor.

—Lo sé, George. Por algo lo llevo tatuado.

—¿Qué te tatuaste qué? —Max me mira con una ceja alzada, así que muerdo el labio inferior con inocencia antes de alzarme el suéter y dejar ver mis costillas donde hay un tatuaje.

—No lo hice por él, pero, me recuerda a él. Cállense todos mejor, que Maxie se pone celoso.

—Bueno, A... creo que es hora de ir a casa —Arthur me toma por los hombros haciendo que ruede los ojos. Estoy bien, sólo quiero ser un poco ridícula hoy.

¿Y sí le llamo?

—Quiero ir en el convertible de Max, pero baja el techo —ni siquiera espero que digan algo cuando ya estoy llegando a su auto y me subo—. No manejes tan rápido.

Se ríe de mi amenaza y yo no le doy importancia a las miradas de mis hermanos. Se que tienen miedo de que después de todo lo que pasó con Lando caiga con Max, pero es imposible. Somos amigos.

A trompezones llego a mi habitación y me rio cuando Max casi casi me avienta a la cama. Trae un vaso de agua para mi y me lo tomo sin ni siquiera pensar en que ya tengo ganas de vomitar.

—Gracias Max, haz hecho que este día se sienta completamente mio —lo abrazo con fuerza, porque me hace sentir totalmente una niñita bajo su calor—. Cierra la puerta cuando te vayas.

Apaga la luz y se aleja deseándome buenas noches. La felicidad ni siquiera me deja pensar en que Lando no se ha tomado ni siquiera la molestia de...

—Escuché que me buscabas. No eres mi mon amour, pero eres el amor de mi vida.