𝐃𝐈𝐄𝐍𝐓𝐄 𝐃𝐄 𝐋𝐄𝐎𝐍 [Roier X Tú] (FDC #2)

seis

Algunas horas después de comer me encerré en mi setup para mi llamada con mis amigas, afortunadamente mi esposo había dejado que tuviera privacidad mientras él se iba a pasear a Mushu

Inicié la videollamada e invité a Rivers, ella ya estaba con las otras dos chicas así que cuando respondió pude ver a las tres ahí 

—Holaaaaa.— saludé contenta mientras alargaba la "a" lo más que podía 

—Ey pero si es la Mulán.— saludó Ari —¿Cómo andas?.— 

—Bien bien, ¿ustedes? ¿todo bien por allá?.— pregunté con una sonrisa 

—Rivers se enojó porque por accidente le tiré su celular.— contó Ama entre risas —Así que todas estamos bien menos ella.— 

—Cállate verga, no es la primera vez que me tiras algo.— reclamó Rivers cruzándose de brazos 

Pude notar que aquellas chicas empezaron una pequeña discusión mientras Ari solamente se burlaba, sonreí aunque en el fondo me moría de envidia, quisiera poder estar con ellas y no solo por videollamada

—Te voy a dejar en paz solo porque la pendeja esa quería hablar con nosotras para algo importante.— amenazó Rivers y la miré ofendida 

—¿Me dijiste pendeja?.— cuestioné 

—Tú no, otra pendeja.— se burló y todas reímos 

—Bien, tengo que contarles algo que no supe a quien más contarle.— avisé —Es muy importante.— 

—No te preocupes, desahógate aquí, nosotras te escuchamos.— dijo Ari 

—Nadamás no nos digas que tu matrimonio es un fracaso porque llevan poco tiempo casados.— pidió Ama —Si Roier te hizo algo avísanos y entre las tres vamos a partirle su madre.— 

Reí un poco, me aliviaba tener ese respaldo por parte de ellas aunque mi esposo era un pan de dios, tan solo imaginármelo contra tres chicas que manejaban algunas técnicas de boxeo me daba risa

—No tiene nada que ver con mi matrimonio.— avisé —Realmente tiene que ver más con mi salud...—

Empecé a contarles lo que había pasado desde ayer, el mensaje del doctor y su diagnóstico de hoy, la última vez que estuve enferma prefería enfrentarlo sola pero ahora tenía gente en quien apoyarme y amaba que ellas estuvieran aquí conmigo... o bueno que me prestaran atención a través de la pantalla 

—No manches, ¿y cómo te sientes?.— cuestionó Ari preocupada 

—¿Cómo le vas a preguntar "cómo te sientes"?, pinche pregunta pendeja, la neta.— dijo Ama y su hermana la miró mal 

Sonaba mal pero tenía razón ¿cómo esperaban que se sintiera alguien que de un momento a otro fue condenada a repetir el mismo proceso que casi la mata?

—Aún no es un diagnóstico confirmado pero me siento bastante desanimada.— conté —No quiero preocupar a Roier con mi estado de animo pero siento que si no me doy tiempo para sentirme triste en algún momento voy a estallar y será peor para todos.— dije 

—No reprimas tus emociones wey.— pidió Rivers —Tienes a un wey que moriría por ti, no le ocultes como te sientes porque créeme que lo harás sentir excluido de todo tu proceso.—

—No quiero que se sienta excluido pero tampoco quiero agobiarlo con mis sentimientos.— dije —Cuando pasó toda mi crisis del corazón era complicado para mí saber que estaba muriendo pero era aún peor para él, imagínense lo horrible que es saber que la persona que amas está muriendo sin poder hacer nada.—

Las tres se quedaron calladas, todas tenían parejas que amaban más que a nada así que ponerlas a pensar en algo tan triste era complicado

—A todo esto, ¿Cómo ha reaccionado él desde que se enteró de tu problema?.— preguntó Rivers cortando la incomodidad del momento —Ahora que me lo imaginé, yo siento que si estuviera en su lugar estaría deprimida que te cagas.—

Lo pensé un poco, mi esposo se la estaba pasando de una manera positiva, como si quisiera ignorar lo que estaba pasando 

—Se lo ha tomado sorpresivamente bien.— conté aun pensativa —Es como si de alguna manera él confiera en que todo va salir bien, incluso cuando ni yo misma confío en eso.— 

Pude ver que las tres se miraron bastante preocupadas así que es hice una señal para que me explicaran lo que al parecer las tres habían pensado 

—No quiero ser yo quien lo diga.— dijo Rivers —Pero si estás bien pendeja.— 

—Van dos veces que me dices pendeja eh Rivers, no creas que se me va a olvidar.— reí algo nerviosa 

—Es obvio que don tripas está reprimiendo sus sentimientos.— contó ahora Ama —Mira wey, yo siento que mientras tú intentas que él no se preocupe, él está intentando que tú no te enteres que está preocupado ¿se entiende?.— 

Ahora lo entendía mejor, eso tenía más sentido que simplemente decir que mi tripón estaba actuando indiferente ante mi diagnóstico, me sentía estúpida por no haberlo notado antes

—¿Cuándo te dirán el diagnostico real?.— preguntó Ari —Osea el confirmado 100%.— 

—Aún tengo que hacerme los estudios, hoy solo fui a que el doctor me explicara un poco las cosas y que me diera algunas recomendaciones.— dije —Yo creo que la próxima semana tendré todo ese asunto claro.— 

—Hagamos un plan.— sonrió Ari emocionada —Chancludas ft. Mulán para descubrir la manera para que ni ella ni su pareja repriman sus emociones.— 

—¿Les vas a dar terapía o que?.— se burló Ama

—Mi vida no tiene suficiente drama, déjame.— exclamó Ari 

Mientras las tres empezaban a poner de acuerdo con su plan para ayudarme yo no podía dejar de darle vueltas al asunto, ¿sería bueno dejar que ellas tomaran las riendas en este asunto?