𝐃𝐈𝐄𝐍𝐓𝐄 𝐃𝐄 𝐋𝐄𝐎𝐍 [Roier X Tú] (FDC #2)

quince

Pasaron algunas horas de vuelo hasta que llegué a mi destino, Argentina. Lo primero que hice al bajar del avión fue ir a buscar mi equipaje, pero para mi mala suerte la aerolínea había "extraviado" mi maleta

Ahora no tenía ni siquiera otro cambio de ropa así que tendría que ir a comprar algo para usar al menos mañana, según dijeron que solucionarían mi problema en algunos días

Estaba esperando a Iván y a Rodri fuera del aeropuerto, pasaron 10 minutos hasta que vi un auto estacionarse frente a mí, bajaron la ventana y pude ver a mis amigos

—¿Y tus maletas?.— cuestionó Rodri

—Larga historia.— respondí mientras me subía a la parte de atrás

Iván iba conduciendo así que arrancó, noté como me veía de reojo por el retrovisor

—No sé como conseguimos que la Mulán viajara para estar con nosotros, pero es re bueno.— sonrió Rodri, iba de copiloto —¿Cómo andas?.—

Iván detuvo el auto gracias a un semáforo

—Mal.— dije y noté que ambos se giraron un poco para verme —Perdieron mi equipaje.—

—¿No pensás que a vos siempre te pasan cosas malas?.— cuestionó Iván burlándose

—Tengo mala suerte.— murmuré de recelo —Lo único que me salió bien fue mi carrera.—

—Y tu novio.— exclamó Rodri

—Esposo.— corregí

De inmediato recordé que no le había avisado que había llegado así que tomé mi celular para escribirle

"Ya estoy en Argentina,
pasaron por mí al aeropuerto"

"Ya deberías regresar,
te extraño):"

Reí un poco por la rapidez de su respuesta, era como si estuviera atento esperando mi mensaje

—Por cierto, ¿dónde te quedarás?.— cuestionó Rodri sacándome de mis pensamientos

—Déjenme en cualquier hotel.— pedí —De todas maneras ni equipaje traigo.—

—Si querés te acompañamos a que compres las cosas que necesites y vamos juntos a comer.— ofreció Iván mientras arrancaba de nuevo

—No quiero quitarles mucho de su tiempo.— dije apenada

—Vos sos nuestra invitada acá.— dijo aquel chico que iba conduciendo —Nuestro tiempo está a tu disposición.—

—El de vos, el mío no.— interrumpió Carre —Yo tengo cosas que hacer, perdóname Mulán, si querés solo los acompaño a comer, ya después ustedes se van a hacer sus compras.—

Asentí estando de acuerdo, no le iba a reclamar nada

—Entonces vamos a comer.— sonreí, realmente tenía hambre

—Conozco un lugar buenardo.— avisó Iván —Te encantará.—

—No tienen que complacerme, vamos a los lugares que suelen ir.— pedí

—Vos mereces algo mejor de lo que estamos acostumbrados.— dijo Iván provocando burlas por parte de nuestro amigo

No dije más, solo miré de nuevo mi celular mirando que tenía más mensajes de mi esposo

"¿Qué estás haciendo?,
yo estoy intentando cocinar
algo"

Seguido de eso me envió una foto de él posando con un plato de comida en sus manos, reí al ver que parecía que se le había quemado

"¿Desde cuándo se te quema
la comida? Tú cocinas mejor
que yo JAJAJA"

"Yo ando en el auto de Spreen,
iremos a comer algo"

"SE ME QUEMA DESDE
QUE TE VAS A COMER
CON ALGUIEN MÁS"

"Apaga las mayúsculas, siento
que me estoy mensajeando
con un anciano JAJAJA"

"NO DESVÍES EL TEMA,
¿YA NO ME QUIERES?"

"POR DIOS, LLEVAMOS SOLO
UNAS HORAS SEPARADOS"

"APAGA LAS MAYÚSCULAS
Y NO ME GRITES"

Volví a reír, extrañaba tener a mi esposo a mi lado haciéndome los dramas más innecesarios

—Mira vos, lo que provoca el amor.— se burló Rodri —Yo quisiera estar como vos, re loco por alguien, tanto que me vuele la cabeza.—

—En algún momento llegará alguien que te cambie el mundo.— aseguré dejando mi celular a un lado

—Sé que tenés razón, por qué eso le pasa a la gente que es buena y afortunada.— se burló —Y yo soy un tipo con suerte bastante bueno.—

—No puedes presumir tu suerte si te la vives cayéndote.— dije riendo un poco

Ambos chicos rieron también y me enfoqué más en hablar con ellos antes de seguir con mi celular.

Ellos me estaban poniendo al día con todo, me platicaron sobre las nuevas cosas que tenían en mente para hacer en sus streams y cosas adicionales de sus vidas

—¿Tienes una gatita?.— cuestioné a Iván, me acababa de contar ese detalle

Por fin estaba estacionando el auto así que supuse que habíamos llegado, bajamos y ellos iban caminando mientras yo estaba atenta a lo que decían

—Se llama Micha.— contó sonriente —Es negra y un toque rara.—

—¿La puedo conocer?.— cuestioné emocionada

Era cierto que tenía a mi Mushu, pero yo amaba a los pequeños gatitos, incluso podría decir que me consideraba un poco más de gatos que de perros

—Si querés después de ir a comprar cosas te llevo a mi casa.— ofreció

—Paren, yo sigo acá eh.— se quejó Rodri —Si van a hacer planes solos no los digan en voz alta.—

Reí aunque sabía que si no lo estábamos invitando era porque él había dicho que ya tenía cosas que hacer