𝗣𝗔𝗥𝗔𝗗𝗢𝗝𝗔 ||Boku No Hero||

Capítulo 30

Azumi había perdido la noción del tiempo mientras se arreglaba, y ahora, se encontraba corriendo por los pasillos, intentando llegar a su salón. Sus compañeros ya se habían ido, obligados por Iida, y la presión de llegar a tiempo la hacía moverse rápidamente.

De repente, chocó contra el pecho de un muchacho de orejas puntiagudas.

—¡Ay, perdón! —dijo Azumi, mientras recogía el papel que había caído al suelo por el impacto. La sorpresa la invadió, pero rápidamente le entregó el papel al chico, acompañando el gesto con una sonrisa amable hacia él y sus dos compañeros— me encantaría quedarme, pero el tiempo hace tik tok —añadió antes de echarse a correr de nuevo, desapareciendo por el pasillo.

El muchacho de orejas puntiagudas se quedó mirando el lugar por donde Azumi había desaparecido, su rostro sonrojado. La chica a su lado, casi saltando de emoción, exclamó:

—¡Estás tan sonrojado!

El chico desvió la mirada, tratando de ocultar su rubor.

—No es nada —murmuró, aunque sus amigos no dejaron de sonreír por su evidente nerviosismo.

Los Tres Grandes llegaron al salón, y la clase entera estaba sorprendida por su presencia. Sin embargo, Azumi estaba dormida en su escritorio, sin darse cuenta de que la clase ya había comenzado. Su noche había sido agotadora, y el cansancio era evidente en su rostro.

—Sigo viendo sus cuerpos como humanos, ¿qué debo hacer ahora? No puedo decir nada más, tengo la mente en blanco. No puedo, quiero irme...

Dark Shadow, con la presencia de los Tres Grandes y el estado de Azumi, la despertó disimuladamente. Azumi apartó la cabeza del pupitre, con los ojos entrecerrados y una expresión digna del cansancio.

—¿Quiénes son esos? —preguntó en voz baja, pero al parecer todos la escucharon, ya que todos voltearon a verla.

—Los Tres Grandes de la U.A —respondió Deku.

—Pues no parece, menos el que está pegado a la pared.

—Él es un poco asustadito. Este ratoncito es Tamaki Amajiki, y yo me llamo Nejire Hado. Nos pidieron que viniéramos y les contáramos un poco cómo es el trabajo de héroes. ¡Cielos, estoy tan emocionada! Azumi, seamos amigas por favor —exclamó Nejire con entusiasmo, mientras seguía mencionando cosas sobre los demás estudiantes y su deseo de conocerlos mejor.

—¡Toc toc! —exclamó el rubio— solo digan "¿quién es?".

—Volveré a dormir.

Le dijo a Dark Shadow que todavía estaba a su lado, pero no pudo hacer mucho ya que el muchacho propuso un "todos contra uno", y Kirishima terminó cargando a Azumi hasta los vestidores, ya que ella había puesto problema para levantarse de nuevo.

Cuando Azumi finalmente se despertó en los vestidores, se dio cuenta de que los Tres Grandes eran los mismos con los que había chocado en el pasillo más temprano.

—Oh, genial... —murmuró, entrecerrando los ojos mientras miraba a Mirio, Nejire y Tamaki.

Y ahí estaba Azumi, recargada en Shoto, que al parecer no iba a participar. Los demás se prepararon, pero de repente a Mirio se le cayó el pantalón. Shoto cubrió los ojos de Azumi por puro reflejo, al menos hasta que Mirio se subió el pantalón de nuevo.

—¿Ustedes no van a pelear? —preguntó Aizawa, observando a Azumi y Shoto al lado de él.

—No obtuve mi licencia —dijo Todoroki con calma.

—Me siento muy agotada, sensei —contestó Azumi, y Aizawa asintió.

—Además, si Azumi le aplica una ilusión, estaría acabado —sonrió Shoto al decir.

Azumi sonrió también, aún sintiendo la calidez de la mano de Shoto sobre sus ojos.

—Tal vez sea mejor que me quede como espectadora esta vez —dijo ella, disfrutando de la comodidad de le brindaba su pecho y brazo sobre sus hombros.

—Sabia decisión —respondió Aizawa.