[11: Consejo]

503 85 43
                                    

Naruto algunas noches, cuando pasa por delante de su puerta, tiene que susurrarse a sí mismo: «No te pares»

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Naruto algunas noches, cuando pasa por delante de su puerta,
tiene que susurrarse a sí mismo: «No te pares».

.

.

Dos afirmaciones pueden ser ciertas al mismo tiempo.

Por ejemplo: Denki me cae bien porque es un muchacho inteligente y agradable. Y: pasar tiempo con él y ser testigo de lo mucho que mi presencia lo aterroriza me hace una gracia tremenda.

Me dan ganas de llamar a algún psicólogo solo por las risas y pedirle que valore lo mala persona que soy. Pero para cuando Denki y yo llevamos trabajando codo con codo cinco noches seguidas, he aceptado que no sirve de nada intentar asegurarle que no planeo darme un festín con su sangre. 

No hay manera de convencerlo de que no voy a dejarlo seco. Y no debería disfrutarlo tanto, pero me da gracia cada vez que lo veo moverse por el despacho en plan contorsionista para no darme la espalda o me paso la lengua por los colmillos y me fijo en que él deja de teclear. 

Normalmente, cierra los ojos justo después y profiere unos gemiditos que se cree que no oigo y... Los niños licántropos que se acercan en bici hasta la ventana de mi habitación y la señalan con el dedo tienen razón: soy un monstruo.

Y, aun así, sigo pasándomelo en grande. Incluso después de oír a Denki decir: «Por favor, Dios mío, no me dejes morir hasta haber cumplido los veinticinco o haber visitado el museo del espionaje, una de dos». Sí. Reza el chico.

No tiene ni idea de por qué su alfa le ha pedido que me ayude con una tarea al más puro estilo ¿Dónde está tal persona?, pero lo cierto es que lo hace sin rechistar. La mayor parte del tiempo nos dedicamos a revisar de nuevo la correspondencia de Sakura y a cotejar los nombres de las personas con las que tuvo contacto durante los últimos meses para ver si encontramos algo que esté relacionado con los licántropos.

Recopilamos información que yo no podría haber averiguado por mi cuenta, como por ejemplo que uno de los directores ejecutivos que entrevistó el año pasado para un artículo sobre especulación inmobiliaria posee propiedades cerca de la frontera entre los territorios licántropo y humano registradas bajo el nombre de una empresa fantasma. 

Aun cuando la mayoría de las pistas no acaban llevándonos a ninguna parte, me siento más cerca de Sakura que en todo el tiempo desde que desapareció.

Naruto se pasa una vez al día para comprobar si hemos averiguado algo, aunque nunca se queda mucho rato. Ante nuestra falta de progresos, mi padre habría reaccionado con una combinación de amenazas veladas y pullas a nuestra inteligencia, pero Naruto se las arregla para no presionarnos ni parecer decepcionado, incluso cuando se le dibujan arrugas de preocupación alrededor de la boca y la tensión se apodera de sus hombros. 

Es una pasada lo comedido que se muestra, la verdad. Tal vez forme parte de esas capacidades de liderazgo innatas que tiene. O a lo mejor le inculcaron paciencia en la academia de alfas.

PrometidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora