La pregunta de Psicotribulation

296 41 31
                                    

Baiser dio un par de pasos atrás. Ante ella no había un humano, sino un monstruo de poder inimaginable. Utena estaba aterrada; el poder bruto de Psicotribulation era demasiado para ella, e incluso Lujuria y Miracle no parecían poder moverse.

-¿Qué pasa, Baiser-chan? ¿Te mordió la lengua el ratón? -preguntó Tribulation, dedicándole una sonrisa y luego comenzó a caminar hacia ella.

Utena comenzó a retroceder hasta que cayó al piso. En ese momento, Tribulation estaba justo frente a ella y se agachó, aún manteniendo su sonrisa.

-Je, hazte más fuerte, Utena-chan, y encuentra la respuesta a mi pregunta. -Dijo antes de darle un simple golpe con el dedo en la frente. Utena fue expulsada de su espacio mental justo después de eso.

Utena despertó en su cama. Estaba sudando frío y aún temblaba. Se mantuvo así por unos minutos, hasta que empezó a reír, primero lentamente, como pequeñas risas sueltas, y pronto se convirtió en una carcajada completa.

En algún momento, dejó de reír de golpe para preguntar: -Lujuria, Miracle, ¿qué hacen contra un enemigo más fuerte que ustedes, más rápido que ustedes y al que no pueden engañar? -Ambas mencionadas aparecieron sentadas en la cama de Utena.

Ambas pensaron seriamente en sus respuestas, aunque rápidamente tuvo una de parte de Lujuria. -Claramente buscas sus debilidades y las explotas hasta que se someta a ti. -Dijo con una sonrisa y comenzando a excitarse. Pero Utena no quería esa respuesta, era la misma que había pensado, y sabía que no sería tan fácil.

Miracle miró al piso con un suspiro. Ya había estado en esa situación y la respuesta era clara para ella. -¿Te sometes? -preguntó casi tímidamente, como esperando no ser escuchada.

Ambas, Lujuria y Utena, la miraron. Tampoco era la respuesta que Utena quería, y realmente no quería probarla. "Diablos, creo que le he hecho demasiado daño", pensó Utena para sí misma, pero rápidamente descartó ese pensamiento.

-Da igual, necesito encontrar la respuesta a esa pregunta. Tal vez las chicas de Tres Magia tengan alguna buena respuesta. -Dijo Utena dando un par de vueltas en su cama para envolverse en sus cobijas.

ΩΑ

Utena estaba sentada junto a la máquina de café con Cronos en su regazo. También quería comprobar su teoría sobre que la más golpeada sería la que iría a verla esa noche, en este caso siendo Magenta. Se aseguró de golpearla un poco más que al resto, para ello la colocó en el lugar del medio cuando las capturó con la flor del mal.

-Oh, Magenta, qué bueno que llegas. Por favor, siéntate, hay tanto que quiero contarte. -Dijo Baiser arrojándole una lata de la bebida que siempre pedía Magenta.

Le explicó toda la situación, como ya era costumbre. "Tal vez podría guardar sus recuerdos para no tener que contárselo siempre", pensó Utena en algún momento. "¿Qué estoy pensando? Para eso tendría que tener el recuerdo de ella antes de venir, y por lo tanto su identidad. No puedo hacer eso". Utena sacudió la cabeza para alejar esos pensamientos.

-Realmente, qué situación tan complicada la tuya, pero si necesitas ayuda en algo no dudes en pedírmela. -Dijo Magenta alegremente.

-Justo esperaba que dijeras eso. Sí, necesito tu ayuda, tan solo con una pregunta. -Comenzó Utena, captando inmediatamente el interés de Magenta. -¿Qué harías, Magenta, contra un enemigo más fuerte que tú, más rápido que tú y al que no puedes engañar?

Magenta se puso pensativa. Era una pregunta complicada desde el lado del combate. -Mmm, es una pregunta difícil. ¿Tienes que enfrentarte contra alguien así? -preguntó curiosa.

-Digamos que sí, es parte de un entrenamiento. -Explicó Baiser.

Magenta sonrió radiantemente. -Creo que la única solución sería pedir ayuda. -Apuntando un pulgar hacia sí misma, dijo alegremente. -Tú dime dónde tengo que estar y te ayudaré encantada.

La dulzura de Magenta deslumbró a Baiser. Casi pudo escuchar en su interior a Lujuria y Miracle decir: -Diosa Magenta, concédenos el deseo de ser nuestra esposa, y su nariz sangró.

Recomponiéndose, le explicó a Magenta: -No, no puedo implicarte en eso. Solo necesitaba tu consejo. -Dijo casi excusándose.

-Oh, ya entiendo. Disculpa mi entusiasmo. -Se rascó la cabeza Magenta. La conversación entre ambas se volvió más casual en ese punto.

ΩΑ

Para comprobar su teoría, en esta ocasión la que quedó en medio cuando fueron amarradas fue Azul. Creía que era la segunda más comprensiva después de Magenta, y así fue.

-Oh, Azul, ven, siéntate. que quiero contarte algo. -Dijo arrojándole la bebida que pidió la última vez, y aunque Azul desconfió de ella desde el principio, al final terminó por creerle.

-Entonces he de suponer que no es la primera vez que vengo aquí, ¿verdad? -Preguntó Azul algo intrigada.

-Realmente es la segunda. Recientemente averigüé cómo hacer que vengas tú en lugar de Magenta. -Explicó Utena, mientras acariciaba a Cronos. -Por cierto, hay algo que quería preguntarte. -dijo Utena, dando paso a su pregunta.

Azul arqueó una ceja en anticipación. -Azul, ¿qué harías contra un enemigo más fuerte que tú, más rápido que tú y al que no puedes engañar? -Preguntó Utena mirando a Azul a los ojos. Era un pequeño experimento; quería generar un poco de la sensación que le generó Tribulation a ella.

El ambiente antes agradable se enfrió. Azul sintió los ojos de Utena sobre ella y eso la hizo estremecerse antes de tragar saliva. Pensó seriamente su respuesta; seguramente de esto dependería algo importante. -Usas todos tus recursos para ganarle, incluso si te cuesta la vida -dijo firmemente, devolviéndole una mirada intensa a Baiser.

Tras unos segundos de suspenso, Baiser suspiró. -Justo lo que esperaría de una chica mágica. -Admitió con una sonrisa.

-¿Puedo preguntar por qué la pregunta? -Preguntó Azul también suspirando. "Maldición, pensé que iba a atacarme en cualquier momento. ¿Qué clase de cosas podría hacerme ahora que estoy totalmente sola?" El solo pensamiento hizo estremecer a Azul.

-Podría decirse que estoy en una situación de ese estilo. -Explicó Utena, comenzando a explicar también su situación con Psicotribulation.

Cuando Utena terminó de contarle, ambas quedaron en silencio. Aunque era cómodo para Utena, Azul parecía querer decir algo más. -Bueno, tal vez Magenta ya te lo haya dicho, pero si necesitas ayuda puedes pedírmela. -Dijo Azul un poco apenada. Sentía que era lo que debía decir, sin embargo, aún se sentía mal de ofrecerle ayuda a una villana.

Baiser sonrió. "Ja, me pregunto qué me habría dicho si se lo contaba después de ese día", pensó Utena cuando su sonrisa se volvió un poco más complicada. -Gracias, Azul, pero como ya le dije a Magenta, es algo que tengo que vencer sola. -Explicó Utena, antes de comenzar a platicar más amenamente con Azul.

"Entonces, si funciona con Azul y Magenta, seguramente sea lo mismo para Sulfur. Solo me pregunto, ¿cómo podría empezar una plática amena con ella?" Se preguntó Utena recordando sus encuentros anteriores con Sulfur. Seguro era la miembro de Tres Magia con la que peor se llevó en el pasado, y con la que sería más difícil entablar amistad.

ΩΑ

La rara historia de cuando Utena quedo atrapada en un bucle temporalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora