Entre las tantas cosas interesantes que el señor Nam había dicho, Seungmin recordaba especialmente una selección de palabras: 《 Como todo caos que comienza, en algún momento debe terminar》. Se vislumbraba el cumplimiento de aquellas sabias lecciones de vida que había aprendido mientras el tiempo transcurria. Un par de meses más le permitieron a todos ir olvidando el asunto con Kwangmin, dándole la oportunidad de demostrar que estando "soltero" tenía mucho para ofrecer. Sus notas escolares nuevamente eran excelentes, también su desempeño en el club, debido a los resultados envidiables sus padres estaban contentos. Por lo tanto el problema inicial estaba prácticamente concluido.
Habían pasado ya cinco meses desde la fiesta de los atletas, misma que provocó todo el problema en el que se envolvió. Además el ciclo escolar estaba por terminar, así que la temporada de exámenes concluiría junto a la presentación de la obra teatral anual. Seungmin estaba emocionado por acudir, de manera que acompañado con todos sus amigos consiguieron entradas.
El día de la presentación llegaron con sus boletos para los mejores puestos, así no se perderían ningún detalle. En cuanto el telón se levantó y la escenografía pudo verse, Jisung se mostró ofendido.
— ¿Pero por qué pintaron así? —Se quejó su amigo aéreo. Seungmin se rio al recordar que era precisamente eso lo que pensó que ocurriría cuando estuvo en el teatro aquella vez.
— Ya mismo comienza, luego los regañas —sugirió a su amigo.
En la presentación Hyunjin tenía participación como un extra, no tendría líneas, pero estaría como un soldado y eso llamaba su atención. La obra cumplió con las expectativas de todos, pudieron además observar a los amigos de Hyunjin también presentes en el teatro, quizás como apoyo. En cuanto a ellos su preámbulo era sencillo: eran leales a Hyunjin. Con eso bastaba.
Al término de la obra oficialmente estaban de vacaciones. Eso les permitiría ocho semanas para preparar la mente y estar listos a enfrentar el último año escolar. El auditorio comenzó a quedarse vacío mientras Seungmin y sus acompañantes decidieron unirse a los voluntarios para dejar el teatro limpio. Minho y Félix fueron con el grupo que se ocupaba de las butacas, Jihwen apoyaba con la separación de residuos, mientras Jisung decidió acompañar a Seungmin para buscar el equipo de limpieza de alfombras.
— Me ofende demasiado el que no me contaste —le comentó mientras ingresaban a la sección de limpieza—. Pero en parte lo entiendo. Estando en una situación similar tampoco te lo hubiera dicho. Así que quedas perdonado —asintió tomando los utensilios—. Un día debes llevarme a la villa.
Seungmin sonrió encantado con la conversación. Desde que se enteró de su relación, Jisung no dejaba pasar oportunidad alguna para hablar sobre el asunto. Se sentía, según por sus propias palabras, maravillado con el mundo en el que se encontraban sumergidos con el secreto.
— Es hermosa en realidad, Hyun y yo planemos ir en vacaciones —se rio con dulzura, ganándose una mirada de cariño—. El señor Nam dice que es temporada de los frutos silvestres, una clase poco usual en la zona, así que estaremos allí para la cosecha —suspiró enamorado mientras ayudaba a acomodar las cosas—. Es curioso, como si yo ahora fuera una persona diferente.
— Todos somos diferentes ahora, a decir verdad —estuvo de acuerdo mientras retomaban el camino de regreso—. Félix y yo estamos intentando tener una relación, Minho parece estar mejorando su ánimo y de paso me gusta ver su personalidad real. Jihwen incluso es parte de nuestro grupo ahora, sin olvidar que Hyunjin y tú están juntos. Todos somos diferentes, pero si me lo preguntas, creo que somos más felices.
— Lo sé, aunque a veces extraño a Youngmin —confesó, empujando el carrito con herramientas—. Me pregunto como estará, y si le va bien.
— ¿No has hablado con él?
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Antologías De La Nueva Tierra: El Canto Del Dragón (HYUNMIN)
FanficLa vida terrestre tuvo una segunda oportunidad después de extinguir a los causantes del daño. Los líderes de la nueva tierra impusieron normas para velar por el bien de la existencia humana. Así que nada ni nadie, tenía derecho a corromper sus princ...