Venttioto.

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Pasé cuatro tormentosos días más en el hospital, todos querían asegurarse de que realmente me encontraba bien.

Aunque moría por hacer algo productivo después de todo el tiempo que estuve en coma, no era mi plan ir el día de hoy a trabajar, más bien, quería descansar del hospital, un día libre antes de volver al curro.

Salí del hospital a eso de las 11:00 am, les había dicho a todos que saldría más tarde, solo para que no me comenzaran a sofocar con preguntas de como estaba ni consejos para cuidarme ahora que estaba de alta.

Así que tomé un taxi hacia mi casa, pagué con transferencia bancaria ya que lo único que tenía era mi móvil.

Al entrar, noté lo desordenada que se encontraba mi casa. ¿De verdad nunca acomodé nada?

Habían cajas por todos lados, algunas de ellas revueltas entre su contenido. Cinco cajas (no muy pequeñas) se volvieron mi perdición. Pero por lo menos podría distraerme con algo este día.

Al entrar a mi habitación, podría jurar que casi me desmayo por las vistas.
Ropa tirada por todos lados, botellas y envolturas de sepa Dios que tanto.
¿Cómo pude vivir así por tanto tiempo?

Me dí una ducha rápida, solo para quitarme lo que sentía como olor a cama de hospital.

Me puse algo cómodo y conecté mi teléfono a una bocina para escuchar música mientras limpiaba la casa.

Comencé sacando la ropa sucia de mi habitación, mientras se lavaba, alcé la basura y terminé de limpiar el cuarto.

Luego de eso tomé el par de cajas que llevaban la ropa que compré en Los Ángeles, no tenía ni idea de que fuera tantísima, las llevé a mi habitación y acomodé la ropa en el clóset.

Mi móvil comenzó a sonar antes de que pudiera seguir con otra de las cajas, el identificador de llamadas mostraba el nombre de Volkov.

A pesar de mis nulas ganas de comunicarme respondí su llamada.

-Priviet ruso.

-Isabelle, ¿Dónde coño estás?

-Bien.

-¿Qué?

-¿Qué?

-Te pregunté dónde estás.

-Ajá.

-Isabelle. ¿Sabes el susto que nos dió el doctor cuando dijo que no estabas? Pensamos lo peor.

-Pero si sólo me dio el alta.

-Si, hace cuatro putas horas.

-¿Y eso que tendrá que ver?

-Que nos dijiste que te daban el alta ahora, no hace cuatro putas horas.

-Ah, ¿De verdad? No me fijé, perdón.

-¿Dónde estás?

-¿Cómo dices? No te escucho bien.

-Dios mío, no empieces.

-¿Hola? Pspspsps ¿Volkof? Pspsps.

-Isabelle...

-No te escucho pspsps pero estoy bien pspspsps. Te cuelgo.

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⏰ Última actualización: Dec 09 ⏰

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