Lee Minho
Habían pasado cuatro años desde que había comenzado mi vida universitaria, y finalmente, con la toga y el birrete en mano, me había graduado. Fue un logro monumental, algo que mi familia celebraba con orgullo, especialmente mi abuelo. Sin embargo, el verdadero triunfo para mí no estaba en el diploma que había recibido, sino en la vida que estaba construyendo con Jisung.
Jisung, por su parte, había tomado una decisión que me había sorprendido y preocupado a partes iguales: poner en pausa sus estudios para dedicarse completamente a trabajar. Era una decisión que no compartía del todo, pero comprendía sus motivos. Cada vez que intentaba ofrecerle mi ayuda, él se negaba con una sonrisa suave, asegurándome que quería ser él quien me ayudara a mí, para que pudiéramos comenzar a preparar juntos nuestro futuro.
Era su manera de protegernos, de asegurarse de que nuestro pequeño mundo estuviera a salvo de cualquier amenaza externa, especialmente de mi familia y, más concretamente, de mi abuelo.
Habíamos decidido vivir juntos hace poco más de dos meses, y a pesar de las advertencias y las amenazas sutiles de mi abuelo sobre lo que podría suceder si no seguía sus planes, para mí no había nada más glorioso que compartir un espacio con la persona que amaba. Cada día era una bendición, desde las mañanas en que despertaba con él a mi lado, hasta las noches en que cenábamos juntos después de un largo día. La intimidad que habíamos construido en ese apartamento, por pequeño que fuera, era mi refugio, un lugar donde los problemas y expectativas del mundo exterior no podían alcanzarnos.
Nuestra rutina era sencilla, pero estaba llena de pequeños momentos que hacían que la vida tuviera sentido. Me encantaba observar cómo Jisung se movía por el apartamento, preparando café en las mañanas o tarareando canciones mientras cocinaba la cena. Esos eran los momentos que atesoraba más que cualquier logro académico o aprobación familiar. Para mí, eso era la verdadera gloria: tener a Jisung a mi lado, sentir su apoyo incondicional y saber que, a pesar de todas las presiones externas, habíamos elegido estar juntos.
Pero sabía que esta paz era frágil. Los tratos y advertencias de mi abuelo no dejaban de acechar en el fondo de mi mente. Él nunca había aprobado mi relación con Jisung, viéndola como una distracción de lo que consideraba mi verdadero destino: seguir con la tradición familiar, casarme con alguien de "buen estatus" y mantener el legado que tanto valoraba. Para él, Jisung era una amenaza, alguien que me alejaba de ese camino predestinado.
Sin embargo, cada vez que esos pensamientos nublaban mi mente, bastaba con mirar a Jisung para recordar por qué valía la pena enfrentarse a todo eso. Su sonrisa, su risa, la forma en que me hacía sentir completo... todo eso era más importante que cualquier plan trazado por mi abuelo. Jisung y yo habíamos comenzado a soñar con un futuro juntos, uno donde podríamos ser felices sin tener que escondernos ni justificar nuestro amor.
ESTÁS LEYENDO
HEARTBEAT • 𝐌𝐈𝐍𝐒𝐔𝐍𝐆
Fanfiction"Desearía que me amaras de nuevo, como ayer." Donde Lee Minho engaña a Han Jisung, pero cuatro años después se reencuentran y reviven viejos recuerdos que podrían dar lugar a un nuevo comienzo juntos o ser el cierre de un ciclo tortuoso para ambos j...