CAPÍTULO 4

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Han Jisung

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Han Jisung

—Profesor... —susurró la pequeña.

—¿Sí? ¿Te pasó algo Yuna? —respondió el mayor mientras miraba a la adorable niña de cuatro años.

—No azul —respondió la niña con una mirada triste.

—¿No azul? —preguntó confundido Jisung mientras se acomodaba sus lentes, luego niña le extendió un bote vacío de pintura azul.

—Ahh, se te acabó la pintura azul —la niña asintió y Jisung rió mientras buscaba un nuevo bote en el estante y una vez lo tuvo en manos, se encargó de llenar un bote mas pequeño para que la niña pudiese seguir pintando a gusto.

El mayor se detuvo a admirar a cada uno de sus alumnos, eran niños que no pasaban de los cinco años en su mayoría. Jisung siempre había adorado a los infantes y una de sus metas dentro de su plan de vida, era formar una familia y tener dos hijos; y cuando conoció a Lee Minho, esa meta se volvió un pensamiento en común para ambos jóvenes cuando empezaron a salir.

Pero esa idea se vió destruida luego de la infidelidad y demás mentiras de Minho.

Jisung parpadeó varias veces para alejar esas ganas de llorar que tenía. Podría haber pasado ya bastante tiempo de lo ocurrido, pero la verdad era que el dolor siempre se mantenía en su corazón y le era un poco difícil el pasar página del todo.

Suspiró pesadamente y se puso de pie para poder ver mas detenidamente el trabajo de los chicos.

Suspiró pesadamente y se puso de pie para poder ver mas detenidamente el trabajo de los chicos

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Lee Minho

Abrí los ojos con cierta pereza, luego me senté en la cama algo desorientado. No acostumbraba a tomar siestas, pero cuando lo hacia, a veces podía dormir por horas y probablemente esa era mi situación ya que tomé mi celular y al revisar la hora, eran pasadas las seis de la tarde.

Me levanté de la cama, estiré un poco mi espalda y posteriormente arreglé la sabana. Tomé mi celular y salí de la habitación.

Y genuinamente estaba sorprendido de haber dormido tanto, ya que siempre luchaba con el insomnio y eran raros los días en los que podía descansar sin problema. Era cansado pretender que todo estaba bien, cuando lo cierto era que vivía con el corazón roto y nula motivación para existir.

HEARTBEAT • 𝐌𝐈𝐍𝐒𝐔𝐍𝐆 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora