Capítulo 20

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Beomgyu

La voz de Taehyun me sacó de mi trance y horrorizado vi los estragos cometidos por mi falta de control. A mi alrededor mis amigos temblaban adoloridos y con los ojos llorosos ¡Incluso casi asesino a Yeji!

Permanecer suponía un gran riesgo, Tori sigue inestable y el mínimo detonante podría darle de nuevo el poder. Así que, por ello, y por mi incapacidad para enfrentar la situación, salí corriendo. Me transformé suprimiendo a mi lobo y no miré atrás. Corrí tan rápido como mi cuerpo me permitió sin ningún destino fijo, solo con la idea de alejarme de todos porque no quiero herirlos. Huir no solucionará nada, sé que tarde o temprano me van a encontrar y tocará enfrentar la realidad. Que sea de esa forma entonces, pero no ahora. Por el momento bloqueé el link con la manada y mi familia, y ya más lúcido también cambié el rumbo para no dejar huellas fáciles de seguir. Yeonjun es el único capaz de rastrearme, o lo era; en el estado que lo dejé dudo que siquiera se levante durante unas horas.

Al final volví a lastimarlo, como al resto. Nos rompimos nuevamente, tanto en la conexión humana como la lobuna. Y hablando de la última, Tori con el paso de los minutos se calmó, o mejor dicho ya no es una amenaza. En su lugar se odia a sí mismo y ni intenta comunicarse conmigo. De todas formas tampoco deseo oírlo. Solo de sentir el viento en mi pelaje, las ramas de los pequeños arbustos rasguñando y el sobre esfuerzo que tomar este camino representa incluso si sé que evitarlo está entre mis posibilidades.

Las horas se fueron volando y antes de darme cuenta el sol empezaba a ponerse. Me detuve durante pequeños periodos en algún que otro refugio provisorio y apenas recuperaba el aliento me largaba de nuevo a correr. Porque el agotamiento no se compara con la desesperación de mi espíritu. Ni siquiera busco un destino en especial, pero siento que algo me espera en alguna parte. O quizás solo se trata de continuar hasta desfallecer. Lo que viniera primero.

-Tan brillante, hermosa y poderosa.

La luna llena se hizo presente alumbrando con su luz, a lo lejos la veía en su mayor esplendor. Y por muy descabellado que suene aumenté mi ritmo pensando en alcanzarla, en tocarla y exigirle una maldita explicación a la deidad que supuestamente llenaba los corazones de mi especie pero que, sentía, nunca le importé. Y sin siquiera notarlo e hipnotizada por acercarme lo máximo posible, llegué a la punta de un risco y frené en seco sin importarme el peligro de mi posición. La altura, la brisa helada e incluso el volver a mi forma humana no me intimidaban. Porque ahí estaba ella, imponente y distante, a la vez que simulaba que si estiraba un poco mis brazos le llegaría.

-¿Por qué? ¿Por qué me hiciste todo esto? -cerré mis puños- Se supone que somos tus hijos, que nos amas... Pero no has hecho más causarme dolor... -mis ojos volvían a picar- ¿Todo esto fue parte de tu plan? ¿Perder a mi mate? ¿Ilusionarme con un puesto que jamás sería mío? ¿Enamorarme de quién sería destinado de otra persona?

Mi cicatrización antes tan veloz se ve afectada por mi estado, así que las heridas auto infligidas en las palmas de mis manos se abrieron fácilmente dejando que el hermoso lugar se manchara con mi condenada sangre.

-¿Qué hice mal? ¿Por qué me odias? Entrené todos los días, me sacrifiqué una y otra vez, ¡lo di todo de mí! Y aun así... -las piernas me empezaban a flaquear- No fue suficiente. ¿Tanto disfrutas verme sufrir? ¡Casi los mato! -de nuevo la imagen de todos en esa habitación se cruzó por mi mente- Cuando por fin sentí que mi vida estaba mejorando, ¡volviste a hacerlo! -grité; ya nada importa de todas formas- ¡Dime, diosa! ¿Cuánto más? ¿Cuánto más piensas castigarme por no seguir tus malditas normas? Solo quería ser feliz... solo eso...

Tal cual predije, mi agotado cuerpo cedió; me derrumbé de rodillas frente a ella y mi lado "orgulloso" detesta agachar la cabeza y lucir tan débil. Mas no me quedan fuerzas algunas para enfrentar nada, esa llama se extinguió junto con mis ganas de seguir viviendo.

Rechazo(Yeongyu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora