CAPÍTULO 25

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T/N MEZA.

Hoy pase un día de ensueños en The Paola, la diosa que llevo dentro me hizo sacar mi lado pervertido y tome la iniciativa con Cesar, me encanto hacerlo gemir, que me pidiera que parara cuando estaba llegando al límite, como me desnudo sin apartar sus ojos de mí y luego me hozo suya, vamos de regreso al departamento, el timbre de un celular rompe el cómodo silencio que nos acompaña, busco en mi bolso y el identificador me muestra un número que no conozco pero contesto.

°LLAMADA DE DESCONOCIDO°

(T/N) Hola - digo.

(DESCONOCIDO) ¿T/n Meza? - es la voz de una mujer.

(T/N) Sí, quien me habla - digo ya que no conozco esa voz.

(SARA) Es Sara Smith, del banco de órganos, tenemos el riñón para su madre - me explica.

(T/N) Enserio - digo emocionada, miro a Cesar.

(SARA) Necesitamos que venga al hospital inmediatamente - dice.

(T/N) En una hora estamos ahí - digo y cuelgo, miro a Cesar quien me mira con curiosidad.

°FIN DE LA LLAMADA°

- Ya tienen el riñón para mi mamá - siento como dos lágrimas ruedan por mí mejillas, ya todo va a estar bien, mi mamá se va a poner bien, gracias a Dios.

- Vamos al departamento para cambiarnos de ropa - me dice Cesar - Mientras llama a tu madre para que esté lista, en media hora pasamos por ella.

- Está bien - susurro, le marco a Vanessa y a los dos tonos contesta.

°LLAMADA DE VANESSA°

(VANESSA) Hey, Meza. ¿Qué te cuentas? - me dice animada.

(T/N) Vanessa, ya tenemos el riñón de mi mamá - la escucho gritar del otro lado del teléfono y tengo que quitarlo de mi oído - En media hora pasamos por ustedes, alista un bulto con algo de ropa para mi mamá y busca su expediente.

(VANESSA) Está bien, aquí te esperamos - me dice y cuelga.

°FIN DE LA LLAMADA°

Siento sus manos acariciar las mías, lo miro, el limpia mis mejillas.

- Todo va a estar bien, no te preocupes - me dice, se lleva mi mano a su boca.

- Gracias - respondo.

Llegamos al departamento y me doy una rápida ducha, me cambio con unos pantalones cafés, una blusa blanca y me calzo con unos tenis blancos, cojo mi bolso, voy al estudio por Cesar y él está al teléfono.

- De acuerdo, mamá, Nos mantenemos en contacto - dice y cuelga - ¿Lista? - yo asiento - Le comuniqué al doctor Swan y mi madre está fuera de la ciudad, pero se va a mantener en contacto con el hospital...

Pasamos a recoger a mi madre quien estaba muy ansiosa por la cirugía, Vanessa, Cesar y yo le dimos ánimos diciéndole que todo iba a salir bien, llegamos al hospital y el doctor Swan nos está esperando, llenamos una planilla y luego pasan a mi madre a una habitación para hidratarla y prepararla para la cirugía.

- En un rato podrán pasar un momento antes de entrar a la cirugía - dice el doctor, mi madre nos da una tierna sonrisa y nos fundimos en un abrazo las tres.

- Yo voy a estar bien - dice y limpia nuestras lágrimas - Señor Parra, se las encargo en lo que regreso - le guiña un ojo.

- No se preocupe, señora Meza - le regala una sonrisa sincera, me abraza por los hombros y mi madre se va con la enfermera, nos sentamos en la sala de espera a esperar que nos dejen pasar.

- ¿Quieren algo de comer o beber? - nos dice Cesar a Vanessa y a mí, nosotras negamos, mi hermana recuesta su cabeza en mi hombro y yo la acaricio.

- Todo va a salir bien - le digo para tranquilizarla y para creérmelo yo misma.

Media hora después la enfermera, sale y nos dice que podemos pasar, voy a la habitación y mi mamá está acostada en una cama con una intravenosa en el brazo derecho, se ve tranquila, la llenamos de besos y abrazos, hasta que el doctor Swan entra y nos dice que ya es tiempo.

- Mami, aquí te esperamos - sollozo - Te amo - las lágrimas no me dejan continuar, siento unas fuertes manos agarrarme por los hombros, veo como los camilleros se llevan a mi madre y con ella todo mi sosiego y tranquilidad hasta que no vuelva a verla, Cesar me da la vuelta, me abraza fuerte, acaricia mi cabello y susurra en mi oído.

- Todo va a estar bien, yo estoy contigo - lo miro a los ojos - Vamos a la sala de espera - yo asiento y salimos de la habitación.

CESAR PARRA.

Ver a T/n así preocupada y triste, me parte el alma, nunca he pasado por una situación como esta, pero sé que por cualquier miembro de mi familia lo haría, hable con el doctor Swan y le pedí que no escatimara esfuerzos, ni recursos y que por el dinero no se preocupara.

Cuando el doctor Swan entra con los enfermeros para ir al quirófano, voy detrás de ellos para estar con T/n la veo llorar, mientras se llevan a su madre, la agarro por los hombros para darle fuerzas, luego le doy la vuelta, la envuelvo en mis brazos y ella llora.

- Todo va a estar bien, yo estoy contigo - susurro a su oído y acaricio su pelo, me mira a los ojos y los veo triste - Vamos a la sala de espera - asiente y salimos de la habitación.

T/n y Vanessa están muy ansiosas por recibir noticias acerca de su madre, tanto así que tuve que obligarlas a comer algo, ya que no querían moverse de la sala de espera.

- A su madre no le va a gustar que estén sin comer tanto tiempo - ellas se miran entre sí y luego asiente - Todavía falta tiempo para que termine la cirugía, vamos a la cafetería por algo ligero y unos cafés - se ponen de pie, agarro a T/n de la mano y caminamos hacia la cafetería, ya estando allí pedimos unos sándwiches de queso y jugo de naranja para cada uno, para la larga espera Vanessa y yo pedimos café y T/n un té, volvimos a la sala de espera y tomamos asiento.

T/n está recostada de mi hombro y su hermana duerme con la cabeza en sus piernas, ya es de madrugada, cuando el doctor Swan sale del quirófano, despierto a T/n y ella a la vez a su hermana, quienes corren al encuentro con el doctor.

- Doctor, ¿Cómo está mi madre? ¿La operación salió bien? ¿Podemos verla? - dice T/n tan rápido que el doctor ríe y eso me alivia, ya que sé que trae buenas noticias.

- Su madre está dormida y sedada, la operación fue todo un éxito, solo tenemos que esperar y hasta mañana en la noche podrán verla, tenemos que esperar a que se recupere - dice contestando a toda sus preguntas.

Las dos hermanas se abrazan con emoción, luego T/n voltea hacia mí, sin pensarlo dos veces se tira en mis brazos y me abraza fuerte, la escucho sollozar en el hueco de mi cuello, levanto su cara para limpiar sus lágrimas.

- Gracias - dice, levanto una ceja - Por estar aquí, por el dine... - no la dejo terminar y la interrumpo con un beso en sus labios.

- No me des las gracias - le digo y ella me vuelve abrazar, momentos después decidimos ir a descansar y T/n quiere irse a casa de su madre con Vanessa para que esta no esté sola, pero yo necesito cuidar de ella y le propongo que se vayan a dormir en la casa y que seguro habrá algo de ropa que le puede quedar, T/n me mira sorprendida y hasta yo lo hago, por lo que acabo de decir, ellas aceptan, le damos nuestros datos a la enfermera de turno por si se presenta algún inconveniente, luego salimos al departamento a descansar, ya mañana será otro día...

Ya es muy tarde😰🫤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora