Sweetness.

21 3 3
                                    

Un dulce olor le ocupó la mente al sentirlo, casi como el de los cereales tan buenos que servían, quizás estaba alucinando en el desayuno, entonces aún con los párpados pesados examinó con su boca lo que tenía frente a él, refregó su naríz en aquello de buen olor, sintió cabello lo cuál rápidamente lo hizo abrir los ojos asqueado y vió el pecho desnudo de Murdoc, un poco más tarde analizó que carajos estaba pasando y muy despacio movió los dedos, bajó la cabeza buscando dónde tenía metido su brazo y volvió a asquearse cuando lo vió dentro del pantalón de Murdoc, pero a la vez también sentía la mano del mísmo en su pantalón y con eso de alguna manera comprendió que ya no era normal y era una broma. Elevó la mirada y se encontró son la cara de enojo de Niccals, lo cuál lo espantó de inmediato dejándolo nervioso.

- ¿Qué-...?, ¿Stuart, qué carajos haces en mi cama...?. -.

- ¿Tú qué haces tocandome en una zona privada?. -.

- ¿Qué yo qué-...?. -.

Vió su mano y muy avergonzado la sacó, almenos aquello le servía cómo una excusa para desviar la pelea, después de todo, así parecía que ambos simplemente habían cometido errores.

- Después de las visitas nos dormimos y a Russel le pareció muy gracioso hacer eso, estoy seguro. -.

- Por Dios, no era necesario quitarme la camiseta. - Palpó las sábanas tratando de buscar su camiseta y no pudo hallarla, cosa que hizo que se enojara por tal estupidez.

Russel caminó dentro de la celda y al verlos despiertos se comenzó a burlar a carcajadas en sus caras.

- ¡¿DÓNDE MIERDA ESTÁ MI CAMISETA, GORDO?!. - Le gritó Murdoc.

- En la de arriba, gay. - Le respondió calmando su propia risa.

Bajó de la cama y la tomó, progresivamente Stuart también se levantó de ahí, no sabía en que horario estaban del día.

- Russ, ¿qué hora es?, ¿sabes?, siento como si hubiera dormido demasiado. - Le habló sin molestia.

- En unos minutos comienzan el desayuno, nos llamaron para avisar que iba a haber un retraso por falta de productos, los traen en un rato supuestamente. - Le explicó.

- Genial, nada que hacer entonces... -.

Se agachó en busca de su cuaderno y el lápiz pero ya no estaba, entonces le comenzó a temblar la vista y desesperado se tiró al suelo para revisar bien, pero no, no estaba, suficiente para comenzar a aterrarse, estresarse y preocuparse.

- ¡¡RUSS!!, ¡¿LE HICISTE ALGO A MI LIBRETA?!, ¡¿ALGUNO TOCÓ MI LIBRETA?!. - De inmediato Stuart se levantó a preguntar.

- No, recién me entero de que tienes una. De vez en cuando en tiempos libres limpian las celdas, la podrían haber llevado a su lugar o simplemente la podrían estar revisando para asegurarse de que no tienes nada raro. - Le comentó Russel.

Un pánico muy grande le entró, Murdoc giró la cabeza muy lentamente con una expresión de apenas estar procesandolo.

- Russel, vamos a necesitar encontrarla... esa libreta es-... - El guitarrista intentó expresar. - simplemente la necesitamos de vuelta. -.

- ¡¿Y SI ME TRASLADAN?!, ¡¿QUÉ VOY A HACER SIN USTEDES?!, ¡¿CÓMO ME VOY A IR?!, ¡¡POR DIOOOS!!. -.

- No va a pasar eso, Stuart. - Niccals lo quiso calmar.

- ¡¡VA A PASAR!!, ¡¡NO ME VAN A DEJAR SIN UN CASTIGO!!, ¡¡¡¡VOY A MOOORIIIIRMEEEEE!!!. - Gritoneaba lloriqueando.

- ¡STUART!, ¡CÁLMATE!, ¡SI TE DIGO QUE NO VA A PASAR NO VA A PASAR!. - Ahora se molestó Murdoc.

- Murdoc tiene razón, Stuart, tú creele, esas cosas no van a pasar, vamos a encontrarla y la vas a guardar bien, aún así no entiendo que es lo que tiene. -.

El de pieles verdes suspiró molesto y tomándolo de la muñeca lo tironeo para afuera de la celda, Russel los siguió por atrás.
Fueron a la sala de entretenimiento dónde habían muchas cosas de pintura y algunos instrumentos que habían llevado, estaban varios sentados mirando la televisión, eran conocidos asi que no tenían porqué preocuparse. Revisaron en los cajones dónde apilaban materiales gratuitos para que tuvieran un libre acceso, sin embargo no hallaba libretas por ningún lado. Algunas esparcidas en las mesas o muebles tenían nombre, lo cuál no lo tranquilizaba tanto, en parte era bueno porque no podrían identificar la suya, pero por otro lado no sabría como hallarla.
Cansado se tiró a una de las sillas y se tomó la cabeza por unos largos minutos, estaba muy preocupado, ¿qué iban a hacer...?, tenía tanto en esa libreta... además si alguien más la encontraba, tenía notas algo vergonzosas en las últimas páginas, y esos dibujos de Murdoc casi desnudo, iban a pensar que era gay. En una distracción escuchó un duro sonido provenir de la cercanía dentro de la sala, Murdoc le había metido un golpe a un tipo, lo estaba viendo y no lo entendía, lo había hecho sangrar al parecer, estaba en posición de lucha cuando se agachó a tomarlo y lo tiró por el suelo, los tipos de los asientos solo lo alentaban. Se subió arriba del tipo sentandose en su pecho y comenzó a golpearle la cara repetidas veces, Russel sólo miraba en completo silencio, él también lo estaba haciendo, sin embargo se preguntaba la razón de la violencia de Murdoc y porqué a ese pobre e inocente hombre... pero entonces recordó lo que dijo el oficial y desvío la mirada enojado con la situación. Un último golpe lo dejó adormecido y le quitó aquello de las manos, con una seña lo hizo mover a Russel y Stuart al ver que se iban también los siguió por detrás. En los pasillos Murdoc se dió la vuelta y tomándolo algo agresivo de la camisa al muchacho lo hizo elevar las manos devolviéndole la libreta.

- La llevaron a la sala y la tomó el estúpido, se burló un poco y me lo dijo en la cara pero ahí la tienes, no la vuelvas a perder, ¿me entendiste?, ya tengo problemas con Del por tu culpa. -.

- Murdoc... gracias... te prometo que no la voy a volver a perder... - Al ver aquello sonrió con pureza.

Russel no hacía más que comenzar a reconsiderar si aquello de la anterior noche había sido realmente de verdad, aún así fuera lo que fuera se veían muy tiernos tratandose bien, por otro lado, ahora Stuart comprendía la palabra "ablandarse" y ese proceso le parecía hermoso.

𝓣𝓸𝓷𝓲𝓰𝓱𝓽    [ꜱᴛᴜᴅᴏᴄ.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora