𝓣𝓸𝓷𝓲𝓰𝓱𝓽 [ꜱᴛᴜᴅᴏᴄ.]

Words Like Violence, Actions Like Kisses

- ¡MUUURDOOOC! - Se emocionó al verlo, el mencionado sólo se acercó bastante hasta que lo tuvo frente a su rostro, le besó el párpado y de inmediato se puso nervioso.

- Ya bailaste mucho, ¿no crees? - Se acercó hasta su oído. - vamos a la mesa, debes estar cansado... -.

- Cómo digas. - Lo miró avergonzado.

Caminaron fuera de la pista, el de pieles verdes lo tomó de la cintura para no perderlo y al llegar a la mesa Ace sonreía al bajarse los lentes, parecía simplemente estar agradado con su trabajo.

- ¿Estás cansado, amor? - Le quitó una gota de sudor del rostro con su verdoso dedo.

- ¿Amor-...?, está borracho, ¿no? - Preguntó a los muchachos sentados.

- Sobrio, ni una copita. - Ace jugó también.

Se sentaron, Stuart lo miraba confundido, parecía algo nervioso en parte.

- Ten, para el calor. - Le sirvió en una copa un poco de la bebida de la mesa, rápido lo tomó del hombro acercándolo a él.

- Gracias Muds... -.

Russel decidió que no quería ver todo ese juego de mierda por lo que simplemente se durmió en su asiento a diferencia de Ace quién estaba atento a ayudar a Murdoc, pero al parecer, ni siquiera lo necesitaba, lo tenía comiendo de su mano con facilidad.

- ¿Qué quieres hacer ahora...? - Bajó su mano a la cintura del peliazul, este mísmo rápidamente se la subió y le sonrió.

- Bueno, me gustaría descansar un rato... cómodamente... si sabes a lo que me estoy refiriendo. -.

- Aah, obvio que sé a que te refieres...Ace, ¿no te molesta si me lo llevo a otra mesa...? - Murdoc le guiñó un ojo.

- Yo no tengo problema, vayan a hacer sus cosas tranquilos. - El de lentes sonrió, sin aviso el de cabellos cortos levantó al muchacho al tomarlo nuevamente de la cintura, este no reaccionaba, sólo miraba al frente y al cómplice de Ace, no podía entender a qué se refería.
Estaba más oscuro en esa zona, era una mesa del otro lado al final. Pasó sus uñas levemente por los muslos del muchacho, este lo miró confundido.

- ¿Qué te está pasando, Murdoc?, ¿estás seguro de que no bebiste nada? - Preguntó nervioso.

- Muy seguro, Stuart... la noche todavía es larga, ¿y si vamos al coche? -.

- Pero si recién nos sentamos... ¿qué quieres ir a hacer al coche? -.

- Ya sabes, charlar, aquí es-... demasiado público, yo estoy grande para estas cosas, ¿qué dices? -.

- Bien, pero jurame que estás siendo honesto y sólo vamos a ir a charlar. - Justo con esas palabras lo había flechado duramente, no podía mentirle a ese molesto rostro que ocultaba tanta dulzura en el fondo, ahora la confianza se le había drenado por completo, no sabía que responder.

- Y-yo-... - Se quedó tartamudeando para luego hacer silencio.

- Juramelo, Murdoc. - Se molestó todavía más.

- Bien, tú ganas, no eran esas mis intenciones... - Confesó.

- Y cuando me serviste esa copa tampoco eran tus intenciones que se me fuera el calor, ¿no? - Lo desafió con la mirada.

- Si-... bueno-... yo quería invitarte algo, ya sabes, no tomaste nada en toda la noche, Stu... - Se justificó, ahora tenía un rostro de miedo.

- No tengo ganas de jugar contigo, no soy un novio de juguete al que puedas usar para descargar tu calentura, ¿sabes?, ya lo hiciste una vez, no va a pasar una segunda, si quieres hacerme algo, primero hazme saber lo que sientes. -.