𝓣𝓸𝓷𝓲𝓰𝓱𝓽 [ꜱᴛᴜᴅᴏᴄ.]

Wedding

- Tranquila, vas a estar preciosa para tu boda, tu marido te va a querer volver a pedir matrimonio. - Noodle tomó una brocha y comenzó a buscar en la bolsa un colorete, Ace tiraba la ropa al suelo en busca de algo útil, tenía quizás un par de faldas ya reunidas pero todavía no encontraba su pieza perfecta.

- Si, tú tranquila, corazón, vas a estar brillante, es más, aquí te tengo un conjuntito para la noche que te va a quedar divino. - Se burló el de pieles verdes motrandole ropa interior de la japonesa.

- ¡ACE!, ¡SUELTA ESO, MIERDITA!, ¡REVISA TODO LO QUE QUIERAS MENOS MI ROPA INTERIOR...! - Molesta se salió de papel y más tarde lo notó, Stuart sólo estaba quieto con un rostro de trauma total. - digo-, Britany, ella todavía es jóven para eso, déjala en paz, está bien con lo que tiene, vamos, dí algo, cariño. - Codeó al peliazul.

- Wow, estoy muy emocionada por esta boda. - En un tono de voz plano aludió.

- Si, se te nota, linda, hasta en el tonito de la voz, ¿no te parece? - Se le acercó molesta.

- Deja a la pobre muchacha, Stefanny, debe estar nerviosa por ver a su macho, uff, si yo estuviera en su lugar me estaría bajando la presión a cada rato, pero que hombre. - El pelinegro se abanicó con la mano.

- ¿Cuál es el nombre de tu marido, preciosa? - La japonesa se acercó a su rostro con maldad.

- Si, dile, bonita. - Ace puso ambas manos en la cama al acercarse con malicia.

- Murdoc Niccals-... - Tragó saliva.

- ¿Qué crees que estarán haciendo?, hablan bastante. - Apagó el cigarillo en la mesa de luz.

- Cosas de chicas. - Russel revisó una caja grande que se encontraba en la cama.

- Stuart y Ace no son chicas. - Murdoc levantó su pecho cansado de estar recostado.

- Pues Ace grita como una, si sabes a lo que me refiero. - Hizo una seña obscena que Murdoc muy bien comprendía.

- Satán, no me recuerdes a ese día. -.

- Siempre cometes los mismos errores con los hombres, tú. - Se burló con una leve risita al final.

- Russ, no fué para tanto... -.

- Me da pena verlo, siempre lo recuerdo, te juro que parecía una mujer mojándose. -.

- Yo-... había cometido una confusión simplemente... él aún me aprecia, bromeamos con eso, ya no le duele como antes. -.

- Lo vas a dejar a Stuart con la misma mirada si no te decides que hacer, estoy seguro de que no quieres no volver a ver sus dos bolas de billar incrustadas. -.

- ¿Y si le pido comprensión? -.

- Sabes que él te la va a dar, ya es otro tema que tú sepas como utilizarla. -.