EL GUIÓN

CAPÍTULO 4: ATENDER EN LA CAMA

La mirada compasiva de Fang Li se posó en Shui Yao. El problema número uno de los personajes carne de cañón era que no podían diferenciar si sus oponentes eran fuertes o débiles.

Como maestro de alto nivel en la etapa máxima de Formación de Alma y alguien con un raro físico Dao innato, incluso si Xie Huai estaba actualmente encarcelado y su cultivo temporalmente sellado, todavía era más que un rival para un pequeño espíritu que ni siquiera había alcanzado la Formación de Fundación y confiaba en su apariencia para salir adelante.

Shui Yai se ahuecó la muñeca y se sentó en el suelo, con el rostro pálido por el dolor y una expresión de incredulidad.

Las disputas internas estaban estrictamente prohibidas en la corte trasera del señor demonio, así que, aunque hubiera desacuerdos, todos fingían llevarse bien en apariencia. Sin embargo, esta persona se atrevía a actuar con tanto descaro justo delante de Su Excelencia.......

Shui Yao bajó los ojos, una mirada insidiosa pasó por sus ojos. Bien entonces, ¡esta era la oportunidad perfecta para eliminarle!

Desde el mismo momento en que había visto a Xie Huai, había sentido una intensa sensación de crisis.

Shui Yao se giró y se arrastró hacia Fang Li de rodillas, con los ojos llenos de lágrimas y un aspecto delicado y lastimero mientras se atragantaba: "Su Excelencia, no sólo no hace caso a Su Excelencia, sino que incluso se atreve a atacar a alguien en público. Su Excelencia, ¡por favor juzgue!"

Xie Huai no se apiadaría del sexo débil, pero Fang Li sí. Incapaz de soportar ver a una belleza herida así, dijo con expresión tierna: "No llores."

Shui Yao miró aturdido el rostro de Fang Li, sin poder evitar un momento de estupefacción. El rostro normalmente frío y tiránico de Su Excelencia estaba ahora teñido de suave compasión, e incluso su voz tenía un matiz que le hacía a uno echarse a temblar...... Los latidos de su corazón empezaron a acelerarse. Que Su Excelencia le tratara de forma tan especial, ¿podría, podría ser......?

Después de consolar a la belleza, Fang Li se volvió para mirar a Xie Huai.

Xie Huai ya había dejado la piedra en su mano y le devolvía la mirada con expresión tranquila. Sus ojos insondablemente oscuros no tenían ni una sola ondulación, fríos e indiferentes como el día en que se conocieron, como si no le importara lo más mínimo lo que pudiera ocurrir a continuación.......

Las comisuras de los labios de Fang Li se levantaron ligeramente mientras arrastraba las palabras. "En cuanto a él..."

Shui Yao y los espectadores que les rodeaban contuvieron la respiración. Shui Yao estaba tan excitado que empezó a temblar débilmente, ¡sólo esperaba que Su Excelencia ordenara su ejecución!

Los demás también pensaron que así sería. Anteriormente, también había habido quienes habían montado un escándalo delante de Su Excelencia. Su Excelencia no se había molestado en preguntar qué había pasado o quién se había equivocado antes de arrojar a ambas partes juntas al Mar de la Estrella Caída para alimentar a los peces. A partir de entonces, todos se volvieron mucho más comedidos. Aunque discutieran, no se atreverían a pasarse de la raya; al menos, no se atreverían a discutir cerca de Su Excelencia.

La dignidad de Su Excelencia era inviolable. Esta persona no sólo carecía de modales, sino que incluso había herido a alguien delante de Su Excelencia. Estaba seguro de morir sin un cadáver intacto, ¡e incluso azotar su alma o refinar su espíritu no sería exagerado!

Fang Li enganchó los labios, diciendo con voz pausada: "Esta noche, llevenle a las habitaciones de este señor."

La multitud: "¿¿¿......???"