EL GUIÓN

CAPÍTULO 71: GRILLETES

La expresión de Fang Li se congeló abruptamente.

Si no explicaba, Xie Huai malinterpretaría que estaba buscando un sustituto. Si explicaba, Xie Huai sabría de él fingiendo su muerte.

Realmente era un dilema difícil.

Pero ya que había elegido estar junto a Xie Huai, todas estas eran cosas que debían ser enfrentadas. Evitarlo no resolvería el problema.

No se arrepentía de haberle dicho la verdad a Xie Huai.

No quería más engaños entre ellos dos.

Realmente estaba equivocado por fingir su muerte, porque en aquel entonces, cuando se había ido, no había pensado que se encontraría con Xie Huai de nuevo. Si hubiera sabido que las cosas llegarían a esto, definitivamente habría confesado mucho antes, en lugar de dejar que Xie Huai lo malinterpretara y se sintiera herido y angustiado.

En cuanto a sí mismo......

Después de cometer un error, uno debe aceptar la paliza. En primer lugar, tenía que tener la actitud adecuada.

Fang Li asumió la manera de un convicto culpable esperando su destino y dijo: "Lo siento."

Xie Huai miró a Fang Li plácidamente.

Fang Li se puso un poco ansioso e inquieto por su mirada. Él sabía que Xie Huai estaría enojado...... Después de todo, había engañado a Xie Huai tantas veces, y había hecho tantas cosas irrazonables. Incluso si había tenido sus propias dificultades, al final, el corazón humano estaba hecho de carne. Si Xie Huai tenía algún pensamiento hacia él debido a ello, probablemente también sería normal......

Y el hecho de que este mundo fuera un libro, era claramente también algo difícil de aceptar.

Justo cuando los pensamientos de Fang Li se amontonaban más y más, Xie Huai de repente extendió la mano y lo abrazó con fuerza.

El abrazo de Xie Huai era cálido pero fuerte, una fuerza que ponía el corazón de uno a gusto.

Fang Li se sobresaltó ligeramente.

Xie Huai apoyó su barbilla contra el lado del cuello de Fang Li, sus palabras bajas y roncas cayeron en su oído. "Estoy muy feliz de que sólo seas tú."

No hay necesidad de culpabilidad.

Simplemente hiciste lo único que podías hacer en ese momento, lo que creías correcto....... No conocías mis sentimientos, y tampoco has hecho nada por lo que disculparte conmigo.

Al contrario, hiciste mucho por mí.

Estoy muy feliz de que no seas Yan Sui.

Porque de principio a fin, lo que me atrajo fue el genuino, tierno y sereno tú bajo el exterior del señor demonio. Era el tú que brindaba amabilidad y calidez a los demás sin importar la situación en la que te encontraras. El tú que, incluso cuando no tenías más remedio que usar la identidad del señor de los demonios y sufrir numerosas restricciones, seguías siendo capaz de mantenerte fiel a tu corazón y llevar a cabo las cosas con razón y medida...... Fue precisamente esta faceta tuya la que me despertó la curiosidad, la que me hizo indagar y la que poco a poco fue conmoviendo mi corazón.

A través de capas y capas de niebla y fingimiento, el que vi y del que me enamoré siempre fue el verdadero tú. Nunca fue ese...... demonio de sangre fría que se dejó caer en las profundidades del infierno.

Y además, tú nunca has hecho nada malo. No hay ninguna deuda de la sangre de mi secta entre nosotros, ningún conflicto entre el bien y el mal.