EL GUIÓN

CAPÍTULO 51: EL DÍA Y LA NOCHE

Xie Huai miró al joven que estaba apoyado en el borde de la piscina. 

Probablemente porque había sido empapado por los efectos de las hierbas, ya estaba profundamente dormido.

El pelo del joven estaba húmedo por el vapor y se le pegaba desordenadamente a la espalda y a los lados de la cara. Su piel, al principio pálida, estaba ligeramente enrojecida por el baño de hierbas. Cuando estaba dormido, tenía la misma calma y satisfacción que en el pasado.

Xie Huai lentamente extendió la mano y sacó al joven de la piscina...... Después de un largo tiempo, una codicia insuprimible surgió en el fondo de sus ojos, tomando con avidez la vista de la persona que tenía ante él.

Ahora mismo, esta persona estaba viva ante sus ojos.

Lloraba, reía, se hacía el tonto......

Y sólo en este momento Xie Huai se atrevió a ser tan desenfrenado en acercarse a esta persona sin tener que enfrentarse a su evasión...... La mano de Xie Huai se apretó ligeramente alrededor del joven, como si quisiera fundirlo en sus propios huesos, un atisbo de turbia obsesión en el fondo de sus ojos negros. Bajó la cabeza y un suave beso cayó sobre los labios del joven.

Por fin has vuelto. ¿Cómo podría ser suficiente una vida de cien años? Haré que nadie en el mundo pueda volver a hacerte daño. 

Todo lo que quieras, puedo dártelo. 

Así que, por favor, no me dejes otra vez.

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Fang Li se dio la vuelta grogui. Abrió lentamente los ojos y estiró los brazos. El cansancio de todo su cuerpo parecía haber desaparecido, y sólo se sentía lleno de energía. Parecía que el remojo de hierbas de ayer había sido bastante efectivo. 

Coff, el tratamiento de Xie Huai probablemente también había tenido un efecto......

De lo contrario, probablemente no habría sido capaz de absorberlo tan rápidamente.

Fang Li se incorporó en una posición sentada, abriendo los ojos cerrados por el sueño para descubrir que estaba vestido con una túnica blanca sin forro, y que estaba limpio y seco. ¿Le había ayudado Xie Huai a vestirse?

No pudo evitar recordar lo que había sucedido ayer......

Sus oídos se calentaron ligeramente.

Pero cuando giró la cabeza, encontró a Xie Huai sentado en silencio a un lado, y su expresión se congeló inmediatamente en su rostro, y se despertó completamente de inmediato. ¿Por qué estás tan callado?

Fang Li se levantó con un escalofrío-.

Pero Xie Huai sólo lo miró impasible, levantándose y presionándolo de nuevo. Luego, se arrodilló y le agarró el pie con una mano, ayudándole lentamente y sin prisas a ponerse los zapatos.

Fang Li se estremeció débilmente.

Estaba demasiado nervioso y se había olvidado de ponerse los zapatos antes de.......

Bajó los ojos.

El hombre que tenía delante tenía un rostro tan frío y distante como el de un celestial, la expresión de su cara tan sosa como el agua, pero incluso con una postura tan sumisa, su espalda era recta como una pluma, con una existencia tan imposible de ignorar como la de un dios. Mirándole desde arriba, Fang Li podía ver claramente cada una de sus pestañas, y bajo el alto puente de su nariz, sus finos labios se apretaban suavemente con un atisbo de indiferencia......