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Culiacán, Sin 📍 Sábado, 31 de agosto del 2024 3:21pm
Kenia hizo una parada en un mall en el centro de Culiacán, con la intención de ver si algo le gustaba. Aunque insistió en que entraría sola, los hombres de Iván no cedieron y le dijeron que la acompañarían. Resignada, Kenia aceptó, pero les pidió que al menos fueran discretos mientras la seguían dentro del centro comercial. Sabía que su vida ahora tenía más ojos encima de los que le gustaría, pero no podía evitar sentirse incómoda con la idea de tener a los hombres de Iván siempre a su alrededor.
Una vez que entró al mall, Kenia agradeció que no hubiera mucha gente. El ambiente tranquilo la ayudó a relajarse un poco.
━ Señorita, el patrón le manda esto ━ Volteo rápidamente al ver que le llamaban, encontrándose a un hombre de los de ivan, estirándole una tarjeta de crédito.
━ Dile que gracias, pero no la voy a aceptar ━ Kenia se negó.
El hombre, siguiendo las órdenes de su jefe, le insistió a Kenia que aceptara la tarjeta, mencionando que Iván ya le había advertido que era muy protestante y testaruda. Kenia, al ver que la situación estaba comenzando a llamar la atención de las personas alrededor, finalmente accedió, aunque con cierta frustración.
Kenia ya había armado mentalmente su outfit para el concierto. Imaginaba unas botas plateadas con brillos que llegaban hasta las rodillas, elegantes y llamativas, perfectas para destacar. Las combinaría con una blusa larga, adornada con estrellas plateadas que hicieran juego con las botas, y remataría el conjunto con una bolsa también plateada. El look era deslumbrante, lleno de brillo y perfectamente acorde para una noche de música con Tito Double P y Peso Pluma.
Sin perder más tiempo, Kenia se dispuso a buscar las prendas que había imaginado. Aunque la idea de tener la tarjeta de Iván en su poder, probablemente con millones de pesos, le generaba cierta inquietud, decidió no darle más importancia. Conforme avanzaba por las tiendas, empezó a encontrarse con fans que la reconocían. Eran amables y emocionados, pidiéndole fotos y autógrafos.
Kenia perdió la noción del tiempo mientras estaba en el centro comercial, y cuando finalmente revisó su celular, se dio cuenta de que ya eran las 6 de la tarde. Agradeció haber encontrado todo lo que buscaba, pero ahora se le hacía tarde para arreglarse. Decidió no usar la tarjeta de Iván para los pagos, una decisión que sabía tendría que discutir con él más adelante. Con las compras en mano, se apresuró a salir, enfocada en llegar a tiempo y prepararse para el concierto que la esperaba.
