ENIGMA

66.

Gulf desde que supo que era un Omega y además había sido elegido como prometido del enigma en lo único que pensaba era en casarse y formar una familia junto a él. Pensó que tendría el noviazgo ideal pero no fue asi, Win nunca mostró un interés como el que Gulf deseaba. Creyó que se debía a lo difícil que había sido su vida a joven edad, perder a su familia y lidiar con la desaparicion de su hermana eran cosas que habían marcado al enigma.

El Omega siempre recuerda la primera vez que conoció a Win. La gran sonrisa que tenía aquel día estaba grabado en su corazón, aquella que perdió cuando ocurrió el incidente de su familia. A causa de eso el enigma cambio mucho volviendose un poco más frío y distante. Nunca entendió el raro acercamiento con el alfa despreciable, hermano adoptivo de Kongkwan. Porque por más que Win le haya dicho que no tenía ningún interés más que el de venganza o que solo se acercaba a él por Kongkwan algo en su interior le decía que el enigma no estaba siendo del todo sincero. Solo bastaba con verlo, la forma en la cual las pupilas de Win se dilataban cuando veían al alfa. Gulf era muy observador y muy receptivo, las pequeñas cosas que para muchas personas pasarían desapercibidas al Omega no se le escapaba ningún detalle.

Las veces que Win llegaba apestando al aroma de Bright hacían que su odio crezca hacia el alfa. Este era una amenaza a su ya inestable relación arreglada porque aunque le constará aceptarlo lo único que retenía al enigma a su lado era que esa decisión había sido la última voluntad de sus difuntos padres y su algo caracterizaba a Win era la obediencia y el valor de su palabra.

Gulf sentía que cada vez iba perdiendo a Win poco a poco o quizás nunca quiso aceptar la idea de que nunca le perteneció Win en realidad. Lo único que pudo pensar fue alejarlos al ver que cada vez Win se le desaparecía muy seguido. Pagó para que atacaran la casa donde vivían, justamente coincidió  con el día después a la primera vez que Win se acostó con el alfa. Gulf hizo que lo lastimaran de tal forma que todo parecía que habían dado con el enigma, todo parecía tan real. Incluso la herida que recibió con tal de seguir su mentira que Win no tuvo más remedio que irse de aquel lugar al verse descubierto y a la culpa que este tenía por no haber sido cuidadoso. Win revivió el trauma nuevamente de casi perder a las personas importantes en su vida y de no haber sido capaz de protegerlas.

Pensó que este alejamiento funcionaría pero no contaba que Win ya había marcado al alfa una noche antes y que ese lazo no podría romperlo tan fácilmente.

Ahora estaba frente a la persona que le había robado todo, Bright. El alfa llevaba a la semilla de Win en su interior, la semilla que debería haber llevado él.

(...)

Bright fue encontrado por la secretaría de su padre

_ Ayuda, gritó la chica.

Bright se despertó luego de una hora un poco desorientado

_ ¿Estás bien? Preguntó su padre.

_ ¿Que me paso?

_ Te desmayaste...mi secretaria te encontró en el pasillo inconsciente.

Bright comenzó a ordenar sus ideas hasta que recordó que tuvo una discusión con el Omega, hijo de los Trapipattanapong.

_ Ese infeliz.....

_ ¿Ya recordaste que paso? Talvez sea bueno que visites a un médico dijo su padre.

Bright no quiso comentarle el asunto de su discusión con Gulf, ya demasiado problemas le había dado en la fiesta de compromiso del Omega. El alfa resolvería solo el asunto, sin meter a su familia en esto.

_ No es necesario dijo Bright. Estoy bien, papá...

_ Te veo algo pálido últimamente

_ Solo tengo estrés...nada de otro mundo minimizó la situación.