Notita de autora: Les recomiendo escuchar "Older" de Isabel LaRosa.
Espero que lo disfruten mucho 🔥♣ ♣ ♣
POV. Park Jimin.
¿Era un capricho?
Quizás.
Sabía en el fondo que esto estaba mal, aún así continúe con esto.
Después de saludar a Jungkook y a su novio, fui hasta la oficina de dirección sin tener una buena excusa en mente, como si el mundo estuviera a mi favor, Kim Namjoon estaba saliendo de allí, nuestros ojos se toparon pero antes de si quiera poder saludarlo él paso a mi lado sin decir una palabra; me ignoró con total facilidad.
Pensé en que tal vez se arrepentía de lo que pasó, ahora las palabras de mi mejor amigo tenían un peso de verdad que me hizo golpearme con la realidad. Exhalé con fuerza antes de subir las escaleras, mi celular estaba descargado así que no podía enviarle un mensaje a Jin, y para evitar otro enojo de su parte, preferí ir hasta el jodido salón e informarle que me iría. Subí a pasos lentos y desanimados mientras que en mi cabeza se creaban cientos de preguntas sin respuestas certeras, es decir, ¿No le gusto? ¿Es porqué soy menor que él? ¿Hay algún problema en mí? Es cierto, era un estúpido capricho, querer llamar su atención era un juego que elevaba mi ego por los aires, porque sí, me encantaba ver cómo su oscura mirada caía en mis labios y barrían mi cuerpo sin perder detallé. Pero todo fue momentáneo, y su indiferencia era la prueba de ello.
Llegué al salón B-5 y noté que él no estaba «Gracias a Dios» Jin me dió unos libros de historia para la clase de mañana y sin esperar más salí del lugar, y por supuesto, como nada puede salirme bien, me topé nuevamente con él.
Dí un paso hacia atrás y lo miré con firmeza, antes de que pudiera decir algo, él habló.
— Discúlpeme.
— No se preocupe, fue mi error — dije aquello con doble sentido, refiriéndome a lo vivido con el mayor.
— ¿Podría usted aceptar hablar conmigo después de clases?
Fruncí el ceño.
— Si es sobre lo que pasó, no debe preocuparse.
— No fue mi intención — dijo con firmeza.
— ¿No fue su intención besarme? — le pregunté incrédulo, molesto.
Su mirada oscura y dominante descendió a mis ojos color miel.
— No fue mi intención ignorarlo hace unos minutos — respondió —. Discúlpeme por mi hostil comportamiento.