Al caer la noche, Yuu se tomó un descanso tras hacer la colada en Savanaclaw para dar una vuelta por el campus; aún no se podía quitar de la cabeza lo que había ocurrido aquel día en Octavinelle y necesitaba calmarse si no quería pasar la noche en vela.
Por costumbre decidió dirigirse al dormitorio Ramshackle y se detuvo delante de la puerta de la reja exterior, lo más cerca que se le permitía estar.
Miró el viejo edificio con tristeza; hacía poco que lo habían renovado por dentro y por fuera para hacerlo más habitable. Y a pesar de que aún tenía muchos problemas por arreglar, había sido su hogar por meses.
«Solo me queda un día para que me quiten el dormitorio...», pensó.
Sabía que ya era demasiado tarde para arrepentirse y que era inútil preguntarse qué habría pasado si hubiera tomado un camino diferente, pero se le acababa el tiempo y las ideas. Azul tenía claro que iba a hacerse con su dormitorio para convertirlo en un nuevo restaurante y forzarlo a trabajar para él en cuanto finalizara el tercer ocaso.
Lo único que les quedaba a sus amigos y a él era una mínima esperanza que desaparecía cada segundo que pasaba...
De repente, unas extrañas pero bonitas luces de color verde comenzaron a flotar en el aire como luciérnagas, distrayéndolo momentáneamente de su desesperación. Dio unos pasos atrás para poder admirarlas con más detenimiento.
«¿Qué son estas luces? ¡Qué bonitas!», pensó maravillado.
En el suelo detrás de él sonó un golpe seco como si alguien hubiera caído de una baja altura.
—¿Hm? Tú eres... —le habló una serena voz grave.
Las luces desaparecieron y Yuu se dio la vuelta para toparse con aquel misterioso y apuesto fae de Diasomnia que había conocido el mes pasado; era una noche como aquella, él estaba solo en el exterior del dormitorio tras un mal día y el joven desconocido estaba caminando por aquel lugar para visitar Ramshackle sin saber que estaba habitado, esperando admirar la calma y las ruinas del lugar.
A pesar de que le había dicho que podía seguir paseando por el lugar todas las veces que quisiera, no se habían vuelto a ver desde aquel curioso encuentro que concluyó con un apretón de manos.
—¡Oh, Tsunotaro! —lo llamó inconscientemente con el apodo que había decidido para él—. Ha pasado un tiempo.
Pillado completamente por sorpresa con aquel apodo tan estrafalario, el estudiante de Diasomnia abrió los ojos como platos.
—¿Tsunotaro? —repitió para asegurarse de que había oído bien—. Con Tsunotaro... ¿Te estás refiriendo a mí?—Mi amigo Grim propuso aquel nombre cuando le hablé de ti, y me dijiste que podía llamarte como yo quisiera —explicó Yuu alegremente—. ¿Qué te parece?
En el fondo estaba nervioso por saber cómo reaccionaría a ser llamado por un nombre que literalmente significaba "chico con cuernos". Para su desconcierto el joven, lejos de enfadarse, resopló en un fallido intento de contener una alegre carcajada:
—¡Jajaja! ¡Pensar que alguien me llamaría Tsunotaro! Realmente no conoces el miedo —exclamó divertido.Aquel humano nunca cesaba de sorprenderlo: primero le pedía estrechar la mano para llegar a un acuerdo nada más conocerlo y ahora se refería a él con un nombre así con tanta naturalidad.
—Puedo elegir otro nombre si lo prefieres; al principio me parecía raro hasta a mí...
—Está bien, fui yo quien te dijo nombrarme como quisieras —lo tranquilizó el recién nombrado Tsunotaro—. Te concederé permiso para que me llames por este curioso apodo.
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Twisted Wonderland | La Marca De Mickey
FanfictionYuu Oshiro despierta sin saber cómo en un mundo mágico donde son admirados los conocidos como "Siete Grandes". A pesar de no ser capaz usar magia, es aceptado en la famosa escuela "Night Raven College", donde tiene extraños sueños con esas famosas l...