CUATRO

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JADE

Todo era elegante

Las personas me miraban como un bicho raro, me sentía incómoda estar en este lugar.

Sabía que no encajaba, pero una vez más mi mente me jugaba una mala pasada.

-¿Donde está Ian?-pregunto después de varios minutos

-Quédate atenta a los movimientos-soltó Sara la madre de Ian.

-¿Porque?-esto es confuso.

-Basta mamá, deja a Jade-, Miranda me toma del brazo y caminamos por el salón.

Ella es la única que me trata bien, aunque tenemos una extra relación de no llevarnos mal, pero tampoco somos las mejores amigas.

-Ian se arrepentirá de esto-me mira con ternura.

-Se lo que hace-siento un dolor en mi pecho.

-¿Si?-me observa con sorpresa .

-Rebecca, ella tiene mucho que ver-murmuro .

-Es una odiosa-aprieta las manos .

A lo lejos veo a papa y quiero ir con el, pero se que no es momento para más drama en mi vida.

-Mira ahí viene-levantó la mirada y veo que se acomoda el traje.

Su cabello está desordenado, sus labios están hinchados y no tengo más que decir al ver a Rebecca saliendo del mismo lugar acomodándose el vestido.

Mis lagrimas están a punto de salir, pero sonrío ante todo. Si cree que me dejará en vergüenza está equivocado

-Fue una velada estupenda-es lo único que mencionó antes de abandonar el salón.

Mis pasos son decisivos y no pienso seguir con este juego sucio. Si él quiere estar con su asistente es libre de hacerlo igual esto es un matrimonio que beneficia a nuestras familias.

Si el no me debe fidelidad yo tampoco.

-¡Jade!-la voz de Ian hace eco en el pasillo del salón

Camino más rápido y trato de llegar hacia el otro lado del camino, pero entonces me toman del brazo.

-Deja tu actitud infantil Jade-el aliento de Ian inunda mis fosas nasales, el olor a alcohol es lo primero que percibo

-Si me trajiste para ver como desapareces con tu asistente me hubiese quedado en casa-me zafo de su agarre

-Sabes que esto es arreglado y condiciones no puedes exigirme algo que nunca pasará como amarte-me suelta con odio.

Mis lagrimas caen, pero soy más rápida al limpiarlas .

-Bien, si eso es lo que quieres-sonrío-, no quiero estar en casa, trabajaré y no pretendas que me manipularas.

El chofer se hace presente y antes de subir al auto, veo llegar un auto de último modelo y colección, no se de quien se trate.

Muchos que están fuera murmuran asombrados y otros graban el momento no estoy para espectáculos y me subo al auto.

-Necesito llegar a casa rápido-es lo único que digo.

Al llegar realizó la rutina de siempre y con los ojos llorosos me resigno a saber que Ian jamás me amara.

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-¡No tenías porque hablarle así!-grita Ian.

-¡¿Y que querías que hiciera, que la felicitara?!-me exalto

Él camina de un lado a otro mientras que yo estoy de lo más tranquila desmaquillándome.

Andrés mi suegro me ha dado un trabajo en la empresa así que no desaproveche la oportunidad para poder hacerle la vida imposible a Ian.

Dos meses han pasado en donde todo es peleas y reclamos. No pienso quedarme como adorno en esta casa.

-Deja de meterte con Rebecca-amenaza

-Ian, tu zorra no me interesa en lo más mínimo-me le burlo.

-Una palabra más y te arrepentirás-dice mientras me toma del cabello.

-¿Tanto la amas?-sonrió

-Es un amor que tú jamás sentirás por lo poca cosa que eres-borró mi sonrisa con lo que dice-, ni siquiera tu padre te soporta.

He perfeccionado mis sentimientos pues aún cuando sus palabras dolieron vuelvo a sonreír.

-Bueno, no me importa ya que tú te diviertes con ella, yo puedo hacer lo mismo con Adrián-me mira con asco

-Has lo que te convenga-sale de la habitación

Suelto el aire, miro con recelo la puerta y es que Rebecca es una persona que juro no soporto.

Quizás es su personalidad o la mía que no pueden conectar. Ella ni siquiera es odiosa conmigo, se porta muy bien y eso me causa conflicto.

Se que tiene algo contra mi así que necesito tener cuidado con ella.

Ian me ha negado varias veces que tiene algo con ella, pero se en el fondo que es un mentiroso.

Ni siquiera puede mantener respeto hacia mi. Mi teléfono suena con un mensaje y me doy cuenta que es mamá.

Mom

Necesito verte mañana, tenemos que hablar.

No respondo porque se de lo que necesita hablar y siento una punzada en el pecho, no puedo hacer lo que ahora necesitan.

Mis padres aún tienen podes sobre mi vida

Mi esposo también

Y siento que soy un juguete para ellos.

Quizás si escapó pueda ser libre de todos ellos.


Notas de autor

  Hola...
Espero que les haya gustado este capítulo.

    Actualizo todos los días, pero mañana y el día miércoles estaré un poco ocupada y trataré de subir los capítulos

  Dejen su corazón amarillo si quieren el siguiente capítulo 💛

Nos leemos pronto

Besos,

   Didi❤️‍🩹

Instagram: Didisin14_

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