Encontrarte (Camren)

Capitulo 1: El brillo invisible de tu sonrisa.

¿Alguna vez has pensado en lo bonita que es la naturaleza? Como los pájaros cantan por la mañana para darte los buenos días, la humedad se vuelve liquida formando pequeñas gotas en las hojas, que luego caen deslizándose por ellas, el Sol iluminando cada rincón... No. En ese momento nada podía ser apreciado por Lauren, quién se había dormido como de costumbre y le tocaba salir de casa a toda prisa.

Con una tostada en la boca y acomodando su mochila negra en sus hombros, por encima de su chaqueta de cuero también negra, se encontraba corriendo por la calle como si su vida dependiera de ello. Se le cayó la tostada a medio camino, cosa que no pudo remediar, ya que del suelo no iba a comer, así que se tuvo que resignar a no comer nada hasta la hora de la comida, pero al menos llegó a tiempo.

Se paró delante de la puerta del colegio, donde sus amigas Dinah, Normani y Ally, la esperaban como ya era usual, Lauren no había sido puntual nunca, ni cuando se trató de salir del vientre de su madre.

-¡Respira mujer! -dijo Dinah mientras ponía una mano en la espalda de la chica, que estaba doblada con las manos en sus rodillas recuperando el aire. -pero sobretodo peínate, la humedad te ha dejado el pelo como un nido de pájaros. -bromeo y todas rieron.

-¿Estoy muy mal? -preguntó Lauren mientras recuperaba la compostura y pasaba las manos por su pelo tratando de peinarlo.

-Si hablas de tu pelo, esta genial, si hablas de tu cerebro... -señaló Normani a la cabeza de la chica con su dedo indice, haciendo pequeños círculos en el aire. -no, eso esta muy mal. -río.

-Oh... Tengo algo para ti. -Lauren movió su mochila hasta el lado izquierdo de su cuerpo y empezó a rebuscar entre sus cosas.

-¿Qué es? - preguntó emocionada.

-Tu gracia. -sonrío falsamente para que Normani lo notara, acomodó la mochila bien en sus hombros de nuevo y se dirigió dentro del recinto.

-¡Que idiota eres Lauren! -todas rieron y la alcanzaron entrando con ella.

Llevaban apenas tres días de clase, así que estaban en sus taquillas mirando sus nuevos horarios, comprobando si coincidían en alguna clase, para su suerte compartían la mayoría de clases, no todas juntas, pero al menos con alguna del grupo. Era su último año y pintaba muy bien, no podían quejarse de los horarios, tenían más libertad que años pasados debido a su edad...

Lauren y Ally tenían biología juntas, así que se dirigieron hasta su aula. Hablando entre ellas y se sentaron juntas en la primera fila.

-¿Sabes? Estoy pensando en teñirme el pelo de negro, ¿que te parece? -preguntó Lauren a Ally.

-Uf, no sé, es difícil si no lo veo con mis propios ojos, pero creo que sí, el negro te sienta bien. -paró un momento y miró hacia el frente, el profesor estaba acomodando unos papeles en la mesa, luego volvió la vista hacia ella otra vez. -pero parecerás una darks, siempre vas de negro esto seria la gota que colmaría el vaso. -río burlándose.

-Oye, no soy "darks" -puso comillas con los dedos. -pero simplemente me gusta... Sí, definitivamente creo que...

Se vio interrumpida cuando el profesor empezó a hablar, y ahí empezaba la terrible biología que ella tanto odiaba... Bueno en realidad pocas clases le gustaban, Lauren no era amante del estudio y con suerte sacaba aprobados raspados, era realmente nula para concentrarse estudiando, a los cinco minutos ya estaba con la cabeza muy lejos de sus apuntes. Como ahora de aquella clase, se encontraba con la cabeza echada hacia atrás mirando al techo pensando en sus cosas, cuando de repente algo la despertó, alguien había llamado a la puerta de su clase. Hubo un momento de silencio hasta que el profesor dio paso.