EGOÍSMO

SEGUNDA PARTE

Nota autora:

Como han visto en el título, esta es la segunda parte de Egoísmo. Es posible que lo hayan leído recientemente, o por el contrario, hace bastante tiempo. Por eso decidí iniciar con un capítulo tipo "previously", para ayudar a la memoria con un resumen rápido, insertando escenas binjinbok de la temporada pasada.

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ANTERIORMENTE:

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Nadie mira a Felix como lo hace Hyunjin.

Nadie mira Hyunjin como lo hace Changbin.

Nadie mira a Changbin como lo hace Felix.

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Hyunjin vivía en una especie de privación de afecto. Al no permitirse tocar ni ser tocado por prácticamente nadie, al no sentirse lo suficientemente bueno. Su corazón vivía en la constante necesidad de ser amado y protegido.

¿Era Changbin la persona indicada para satisfacer esa necesidad? Estaba totalmente seguro de aquello. ¿Era justo para Changbin entrar en una relación con alguien que seguía enamorado de otro? Probablemente no, priorizarse le parecía tremendamente egoísta. Pero, ¿era justo para él mismo negarse al amor por una ilusión que no se materializaría? ¿No sería positivo para todos permitir que el egoísmo dentro de él tomara el control?

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El silencio se hizo presente, Felix era absolutamente incapaz de leer lo que el rostro de Hyunjin expresaba. ¿Realmente quería saber? ¿Qué buscaba? ¿Quizás alguna respuesta que le permitiera alejarse sin sentirse culpable?

Culpable de no poder retribuir lo que Hyunjin le entregaba, culpable de saber que algo andaba mal en él y en su cuerpo que sólo sabía añorar a Changbin. Necesitaba encontrar un chivo expiatorio. Quería saber que Hyunjin tenía otra persona en la que volcar todas esas palabras bonitas, otra persona que podía ser dueña de esas sonrisas y de esos labios que aún moría por besar.

Pero si quería alejarse. ¿Qué hacía ahí? ¿Por qué tomó la primera oportunidad que tuvo para volver a verlo? ¿Por qué se encontraba a centímetros de esa boca que necesitaba tomar?

—Es tuyo —contestó Hyunjin, un poco nervioso—. Los cuatro son respecto a ti y todo lo que produces en mí cada vez que decides mirarme o no... Porque... Al parecer de eso se trata todo en mí, de no dejar de pensar en ti.

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—Lo siento, pero debo intentarlo —soltó Felix, antes de estampar sus labios contra la boca que estaba seguro, era la que realmente quería besar.

Changbin llevaba las últimas horas dándole una vuelta a como había ignorado a Felix. A quien siempre había estado para él cuando lo necesitaba, que siempre tenía una sonrisa y un abrazo cuando lo veía estresado o preocupado, que nunca hacía preguntas luego de las noches de sexo desenfrenado de las que lamentablemente no recordaba lo suficiente. ¿Valía la pena anteponer sus cánones estéticos a quien realmente era ese chico y todo lo que le entregaba?

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—Ah, sí —contestó Changbin, incómodo—, es cierto —Tomó un poco de soju, mientras intentaba organizar las ideas—. La otra noche estuve con Felix. Yo sé que sientes cosas por él, y por lo mismo, no tengo nada serio con él. Nada. Porque en realidad me importa más ser tu amigo. Pero lo he estado pensando... Él... De verdad me hace sentir deseado y querido.

Hyunjin sonrió buscando algo lo suficientemente interesante en la decoración de la sala o quizás en el techo, para poder distraer la angustia que lo invadía. Tomó su botella, observó y recorrió con el pulgar las alas del ganso grabado en el vidrio, dio un largo trago. Sonreía, más que para engañar al otro, para ver si conseguía embaucarse a sí mismo y convencerse de que sentía ganas genuinas de sonreír.