27.

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Capítulo 27

Justin POV

Volví de haber comprado los boletos y esperé a que sea la hora para subir a buscar a _____ y de esa forma irnos a nuestra cita. Me quedé mirando mi celular hasta que faltaban cinco minutos, subí las escaleras y toqué la puerta de _____ un par de veces, pero nadie contestaba. Abrí la puerta lentamente y la vi acostada con los ojos cerrados, estaba durmiendo.

Me acerqué a ella y la pude ver balbuceando unas cosas mientras tenía el ceño fruncido, unos segundos después comenzaron a caer lágrimas por sus ojos. Algo alarmado me senté en su cama, la miraba llorar, pero no estaba seguro si despertarla o no, había leído que no era sano hacerlo, pero me daba miedo verla así. Le hice cariño tratando de que eso funcionara mientras le susurraba algunas cosas, hasta que por fin abrió los ojos y me miró asustada.

- ¿Qué pasó? - Me pregunta asustada sentándose y yo simplemente le acaricie la cabeza.

- ¿Estabas teniendo una pesadilla? - Ella me mira algo confundida pero luego asiente.

- ¿Qué hora es? - Se limpia un poco las lágrimas.

- Ya son las nueve, debemos irnos a nuestra cita - Ella frunce el ceño y luego asiente.

- Bien, solo espérame un poco - Me levanto de la cama y ella hace lo mismo segundos después.

- Te espero abajo - Asiente y luego salgo de la habitación.

(...)

Nos bajamos del auto y caminamos de la mano hacia la entrada del parque, le entregamos nuestros boletos al chico de la entrada y este nos dejó pasar. Lo único que se escuchaba era música, gritos y risas, no conocía mucho todo esto, pero Gabriel me había recomendado este lugar y no se equivocaba, definitivamente era genial y el ambiente también lo era. Nos pusimos en la fila de la primera montaña rusa que se cruzó por nuestra vista, la fila no era tan larga, lo cual agradecí.

- Oh mierda - Susurra _____ mientras avanzábamos por la fila.

- ¿Qué te pasa? - Le pregunto divertido.

- Nos vamos a subir a la montaña rusa más peligrosa de todo el parque, ¿te parece poco eso? - Reí al verla tan nerviosa, aún que debo admitir que yo igual lo estaba un poco.

- No creo que sea para tanto - Le digo y luego me rasco la nuca, nuestro turno había llegado.

- ¿Y si mejor vamos a otro juego? - Me pregunta dulcemente y yo consideré esa opción por varios segundos, pero la rechacé automáticamente, debía ser valiente.

- Vamos _____, no seas miedosa - Tomo su mano y ambos nos subimos.

Nos sentamos uno junto a otro mientras dejábamos que los que trabajaban acá nos pusieran toda la seguridad necesaria. Podía notar que mi novia estaba realmente nerviosa, así que tomé su mano y la apreté con fuerza, ella me miró y sonrió levemente, pero pareció más como una mueca. Cuando la montaña rusa comenzó a avanzar más ella se aferró a mi mano con más fuerzas.

- Mierda - Cierra sus ojos con fuerza y yo sentía mi corazón palpitando como loco.

- Vamos _____, será divertido - Ella se queja y luego llegamos a la cima. - Aquí viene - Dije y luego bajamos a toda velocidad.

- ¡Aaaaaaaah! ¡Maldita sea! ¡La puta madre! - No pude evitar reír al escuchar sus gritos.

- ¡Aaaaaah! - Grité yo igual, era genial esta montaña rusa.

- ¡Voy a vomitar! - Ahora nos encontrábamos de cabeza. - ¡Mi peinado, maldita sea! - Reí más fuerte todavía.

_____ POV

El juego terminó y ambos nos bajamos, yo estaba más que mareada, pero al mismo tiempo quería más, necesitaba adrenalina en mi cuerpo. Comencé a saltar y a chillar cosas que ni yo misma entendía, lo único que quería era subirme a otro juego que sea igual o peor que este, necesitaba liberar mis tensiones.

- ¿Ahora a dónde vamos? - Le pregunto entusiasmada y el me mira como si fuera un bicho raro.

- Creí que después de eso no te ibas a querer subir a otro juego - Bufé.

- ¿Estás loco? ¡Quiero adrenalina! - Volví a saltar y el rio.

- Pues, vamos a la casa del terror entonces - Dejé de saltar para mirarlo confundida.

- Mi felicidad no es tan grande - Le digo obvia y el vuelve a reír.

- Vamos _____, yo te protejo si algún fantasma quiere comerte

- Los fantasmas no comen Justin

- Entonces un zombi

- Ellos tampoco, están muertos - Él gira los ojos y me mira fastidiado.

- Vamos aguafiestas - Toma de mi mano fastidiado y yo reí.

- Vamos - Besé su mejilla.

La casa del terror no resultó ser tan mala como pensé, es decir, había partes en las que la verdad me quería hacer pipí, pero la mayoría no daban ni miedo. En cambio, a Justin no le dio miedo ninguna maldita parte de la casa del terror, él incluso se veía divertido al verme chillando por ciertas cosas que aparecieron. Maldito.

(...)

Luego de habernos subido a prácticamente todos los juegos nos fuimos a sentar a una mesa mientras nos comíamos unas hamburguesas. Conversábamos y reíamos de distintas cosas, esta cita a sido absolutamente genial, no tengo ninguna queja.

- Espérame aquí - Fruncí el ceño al ver a Justin poniéndose de pie y caminando hacia un escenario, donde recientemente habían cantado unos chicos.

Mi novio comenzó a hablar con los que habían cantado antes, pareciera como si estuviera pidiéndoles un favor o algo parecido, yo veía la escena totalmente confundida. Mi confusión aumentó más todavía en tanto vi a Justin sentándose frente a un piano mientras ponía un micrófono frente a él.

- Muy buenas noches a todos - Las personas miran al escenario, incluyéndome. - Esta canción la hice yo y quería dedicársela a mi novia _____ - Me apunta y varías miradas se posaron en mi por unos segundos.

Comenzó a cantar una canción realmente bonita mientras tocaba el piano como todo un profesional, es decir, sabía que el tocaba la guitarra, pero no me esperaba que también tocara el piano. Mientras cantaba no pude evitar sonreír y sentir un montón de mariposas en mi estómago, él tenía la vista fija en mí y yo no pude evitar sonrojarme un par de veces.

Al terminar de cantar recibió una gran cantidad de aplausos, entre ellos los míos, yo no podía parar de aplaudir. Él se despidió y luego se acercó a mí, yo me puse de pie y le di un beso mientras escuchaba al resto de las personas suspirando y diciendo cosas dulces sobre nosotros.

- Te amo - Susurre y él sonrió.

- Yo igual - Y me volvió a besar.

Lo único que podía pensar ahora, era en las diabetes que me provocaba Justin Bieber. Dios, cada día era más dulce.

Continuará...

Publicado: abr. 08, 2013
Editado: sep. 03, 2017

*Claramente la canción de multimedia es la que cantó nuestro querido Justin*

El intercambio que siempre soñé #1 [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora