El intercambio que siempre soñé #1 [TERMINADA]

2.

Capítulo 2

- Ese debe ser el canadiense - Dice mi madre emocionada mientras corre hacia la puerta, yo me acerqué y me escondí detrás de la muralla tratando de escuchar si era él o no.

- Hola - Escuche una voz masculina. - ¿Esta es la casa de los Parker?

- Estas en la casa indicada - Le responde mi madre con un tono alegre. - Tu debes ser el chico que viene de intercambio

- Ese soy yo - Sentí la puerta cerrarse y automáticamente salí corriendo hacia la cocina a buscar un vaso de agua.

- Un gusto, soy Justin Bieber - Podía sentir su bella voz desde la cocina, me asome sin que me vieran, solo le veía la espalda, pero parecía bastante guapo.

- El gusto es mío muchacho, mi nombre es Alex Parker, cualquier cosa que necesites solo lo pides y si no entiendes algo que decimos también nos dices - El ríe.

- Pues muchas gracias - Responde Justin, cuando por fin se puso de lado pude verle la cara, era guapísimo, con unos ojos color miel y una sonrisa maravillosa.

- ¿Sabes dónde esta ____? - Pregunta mi madre mientras se sienta al igual que Justin.

- Fue a la cocina por un vaso de agua - Ella asiente y luego dirige su vista a Justin, creo que ya es momento de que haga mi aparición o van a creer que estoy muerta.

- ¿Como estuvo el viaje Justin?

- Normal, algo agotador, pero no fue tan terrible, creo que he tenido viajes peores. - Este es el momento.

- Hola - Hago mi esperada aparición con el vaso de agua en la mano. - ¿Tu eres el canadiense ese o no? - Trate de sonar lo más despreocupada posible mientras me dirigía a Justin.

- Me llamo Justin, Justin Bieber - Me sonríe y juro que me derretí.

- Ah - Respondí sin darle demasiada importancia y sentándome frente a él.

Justin POV

Creo que era una de las voces más bonitas que había escuchado, sé que es exagerado pero así fue, no podía dejar de mirarla, se me hacía prácticamente imposible no quitarle un ojo de encima pero no podía parecer un baboso en frente de sus padres, eso se vería muy mal. Todo se me complico más cuando la chica se sentó frente a mí, ahora sí que se me hacía imposible no mirarla aunque sea de reojo y creo que ella se dio cuenta ya que se reía en silencio.

Si estuviera en Canadá todas las chicas estarían celosas porque estoy mirando de esta forma a una chica y mis amigos me preguntarían si tengo fiebre o algo así ya que yo jamás había quedado embobado gracias a una chica, para mí esto era algo nuevo, había estado con muchas chicas antes, pero nada serio. De a poco iba agarrando confianza y dejaba de mirar a la chica como si fuera un cuadro de algún museo, al terminar de tomar desayuno, ayudé a Anne a levantar la mesa.

Luego de conversar otro poco, ____ me llevo hacía mi habitación y me enseño lo básico de esta casa, y donde estaba cada cosa, era una casa bastante grande pero no lo suficiente como para perderme y no saber dónde están las cosas. La chica se veía bastante tranquila al enseñarme la casa y yo no lo entendía, yo estaba vuelto loco y queriendo pedirle el número de una vez por todas, pero me trataba de aguantar ya que viviría con ella dos años y no quería que pensara que yo era un arrastrado.

_____ POV

Luego de mostrarle la casa a Justin me fui a sentar a mi tan querido sofá, es el segundo lugar más cómodo de la casa, el primero es mi cama obviamente. Prendí la televisión y busque algún canal que diera alguna película o un programa de calidad, pero no estaban dando nada interesante así que me quede viendo la vida de los famosos un rato, aunque no fuera nada interesante.

- ¿Te puedo pedir un favor? - Me pregunta mi madre y yo suspire cansada mientras ponía toda mi atención en el televisor.

- Estoy viendo este programa - Apunte con el control remoto la televisión.

- Se que no te interesa en lo más mínimo la vida de los famosos - Suspire rendida.

- Depende de qué tipo de favor es - La mire y esta sonreía.

- Anda a mostrarle la ciudad a Justin - Fruncí el ceño.

- Ah no, que aburrido - Tome una almohada y lo puse en mi cara.

- Vamos _____, no seas una amargada

- ¿Por qué no se la muestras tu?

- Es casi de tu edad, lo pasaran bien, yo soy una anciana y quizás lo aburra

- Me debes una mamá - Le dije parándome del sofá.

- Algún día me lo agradecerás - Solté una carcajada.

- Que exagerada - Empecé a subir las escaleras.

Subí las escaleras lentamente, no tenía ganas de salir a caminar y mostrarle la ciudad, eso haría que me ponga nerviosa y no es la idea, no tengo ninguna intención en que alguien se de cuenta de que lo encuentro guapísimo. Me pare frente a su habitación y entre sin tocar la puerta, fue como un impulso y ahora me arrepiento completamente, el chico se dio vuelta mirando confundido a mi dirección, estaba sin camiseta y con unos jeans nada más.

- Perdón - Le dije nerviosa mientras miraba hacia otro lado, no podía mirarlo hasta que se pusiera algo encima

- No te preocupes - De reojo pude ver que sonreía. - ¿Que sucede?

- Mi madre me dijo que te llevara a conocer la ciudad, solo si quieres - Esta vez sí lo mire, de todas formas, me incómoda un poco que aún no se ponga la camiseta.

- Claro que quiero - Toma una camiseta de su maleta y se la pone, sonreí aliviada, ahora lo podría mirar sin ponerme roja como un tomate. - Creo que ya estoy listo ¿Vamos?

- Bueno - Sonreí y luego di media vuelta empezando a caminar en busca de mi celular para poder irnos.

Salimos de casa y le mostré al menos lo que quedaba cerca de casa ya que tomaría mucho tiempo mostrarle otros lugares más lejanos. La verdad es que él era muy simpático y de vez en cuando lanzaba algún chiste sin sentido, lo pude conocer mucho más cuando nos sentamos a tomarnos un helado, estuvimos fuera de casa unas 4 horas y aun así teníamos siempre algún tema de conversación. Ya era hora de ir a casa así que emprendimos rumbo de vuelta y en el camino nos encontramos con mis mejores amigas.

- ¡Hola! - Me saluda Scarlett, estaba junto a Diana, Paula y Ashley, todas ellas eran mi grupo de amigas.

- Hola guapas - Las saludé y pude notar la vista de Ashley clavada en Justin.

- ¿No nos presentaras a tu amigo? - Me pregunta Ashley, pero mirando fijamente a Justin quien se le veía algo incómodo.

- Claro - Dije confundida parándome junto a él y por fin captando la atención de mi amiga. - Él es Justin, es el chico que llego a mi casa gracias a que Oliver se fue

- Un gusto - Ashley se le acerca demasiado para mi gusto y le besa la mejilla haciendo un ruido bastante incómodo.

- El gusto es mío - Responde Justin lanzando una sonrisa incómoda.

- Bueno, nosotras debemos irnos - Dice Paula tomando del brazo a Ashley alejándola de Justin, ella igual se dio cuenta de lo caliente que estaba Ashley. - Fue un placer conocerte Justin y _____ te hablo en la tarde - Asentí.

Seguimos nuestro rumbo de vuelta a casa, pero en esta ocasión yo venía algo más callada, me molestaba un poco la actitud que tenía Ashley con cada cosa que se moviera, siempre que veía a un chico como que se excitaba al instante y empezaba a coquetear con el como si su vida dependiera de ello. Eso es algo que a mí en particular siempre me ha molestado de ella, esta como necesitada todo el día. Al llegar a casa me encerré en mi habitación y parece que Justin hizo lo mismo, me recosté en mi cama y cerré los ojos buscando alguna forma de decirle a Ashley lo puta que es, pero claro, sin lastimar sus sentimientos.

Continuará...

Publicado: feb. 06, 2013
Editado: sep. 18, 2016