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MADDIE.

Iba saliendo de mis clases, llevaba lentes oscuros ya que desde mi resaca de fin de semana me habian salido unas ojeras que parecia muerta.

Baje las escaleras de la entrada y en un arbol no tan lejos vi a Robert recargado en un arbol con un ramo de flores y una sonrisa.

Mierda.

Finji no verlo pero el se acerco a mi y me sonrio, me senti nerviosa y tenia miedo que Nicholas nos sorprendiera.

- Hola Maddie.- dijo sonriendome y me entrego las flojes, nunca antes me habian dado un detalle asi.- Son para ti.

- Hola Robert, gracias por el detalle aon lindas- voltee a los lados y tome las flores.

- Trate de comunucarme despues de la fiesta pero...tu cel mandaba a buzon.

- Si, es que me quede sin bateria y lo perdi asi que es dificil encontrarlo asi- dije finjiendo demencia, pero en ese instante me entro una maldita llamada y Robert encaro una ceja.

- ¿Entonces ese no es tu telefono?

- Si, ya lo encontre- mierda me delataron.

- Bueno quise venir a buscarte, crees que podriamos ir por un cafe un dia, o ai prefieres unos drinks.

- Si me parece bien, nesesito checar mi agenda tengo exámenes- mentira.

- Bien, te escribire, y esta vez no pierdas el telefono- se coloco sus lentes oscuros y se subio a su camionsta y se fue.

No es que no me gustaria salir con el, en verdad si quisiera pero el dia de la fiesta Nicholas se veia muy molesto y tenia miedo que tratara de hacerle daño a Robert por mi culpa.

A lo lejos escuche un chiflido, gire mi cabeza con cara de molesta, no soy un maldito perro, mi exprecion se endurecio al ver que fue Nicholas quien me silbo.

Me acerque molesta a el, estaba recargado en el cofre del auto rodeado de sus estupidos amigos y su novia junto a el, apenas me acerque Nicholas les pidio que nos dejaran a solas.

No dijo nada, me tomo del brazo bruscamente a lo que solte un quejido, abrio la puerta de coopiloto y se podria decir que me lanzo al asciento, cerro la puerta de golpe y dio vuelta al auto para subirse a su asciento.

Apenas se subio y quise reclamarle lo del silvido pero el ya estaba furioso y alterado.

- ¿Quien te crees que...

- ¡Te adverti sobre acercarte a ese idiota!- grito, vio las flores en mis manos y despues me miro a mi.

- ¡Yo no lo llame, el ah sido quien vino a buscarme, yo ni siquiera lo esperaba!- Nicholas arranco el auto y condujo hasta la casa.

Si a velocidad normal haciamos 30 minuto, a velocidad de Nicholas furioso llegamos en 10.

Baje furiosa del auto y el trato de estrujarme de nuevo pero no se lo permiti y lo encare.

- Escucha Nicholas, no me importa los problemas que tengas con Robert o otras personas, tu y yo no compartimos sangre, no soy una Chavez asi que deja de joderme por que si yo quiero salho con el y si no no lo hago, ni siquiera mi madre me prohibe las cosas mucho menos tu- lo mire de pies a cabeza antes de darme media vuelta y entrar a la casa.

Espero y asi le quede claro que no puede tratar de manipularme o prohibirme.

...

Ya era mas de media noche y tenia hambre asi que baje a la cocina a buscar un bocadillo.

Al entrar di un sobresalto a ver que Nicholas tambien estaba ahi, llevaba unos pantalones de pijama y una camisa interior blanca, tenia en su boca lo que parecia un pedazo de pan y en la otra el bote entero de la leche.

Lleve mi mano al pecho por el susto y el solo siguio comiendo.

Tome un paquete de galletas y saque un vaso de la cocineta, mire a Nicholas y le señale el bote de leche que tenia en su mano.

- ¿Podrias....

El solo lo extendio y lo tome, servi un poco en el vaso y la tape para guardarla.

Me sentia demaciado incomoda asi que tome mis cosas y subi a mi recamara casi corriendo.

MI ESTUP*DO HERMANASTRO // NICHOLAS CHAVEZDonde viven las historias. Descúbrelo ahora