Como un ángel caído que cayó del cielo, ven, desciende hasta donde estoy. En la noche estrellada está la oscuridad y en la eternidad Diosa tú serás... vuela al cielo.
Volaremos lejos, encontraremos la manera.
Veremos el final, seremos el final.
S...
Su nombre solo dice problemas, traición y engaño. Pero olor unos lo vemos
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
◆━━━━━▣✦▣━━━━━◆
La sala permanecía casi en silencio, pues los sollozos de Farlan lograban escucharse aún estando pegado a su madre. Le había asustado demasiado ver a Eren sostenerlo mientras sangraba de la mano, él sabía quien era y nunca se imaginó que fuera así.
Eren lo miró, deseando en el alma haberlo conocido de otra manera, en otra situación y que sus lágrimas fueran de alegría y no de temor. Pero no existía algo así de bueno para él. Su mano manchaba el mantel, dejándoles en claro que no se estaba curando a voluntad propia.
—Hablemos tranquilamente —habló Eren con una voz que daba pena a cualquiera—. Solucionar los problemas de Eldia no requiere conflicto. Hange y los demás están a salvo. Solo los trasladamos.
—Eren, nosotros también queríamos hablar contigo —le dijo Armin con una mínima esperanza de hacerlo entrar en razón—. ¿Por qué planeaste el asalto a Marley sin consultárselo a nadie? ¿De verdad te convencieron Zeke y Yelena?
Un nuevo silencio se instaló, Eren tenía la mirada sobre la mesa, no podía mirar a ninguno a los ojos, mucho menos a la mayor.
—Soy libre. —Se digno a hablar—. Haga lo que haga, elija lo que elija. Todas son decisiones nacidas de mi voluntad libre.
—¿Lo que hiciste tras ver a Yelena era tu voluntad? —cuestionó Armin incrédulo
—Si.
—¡No! ¡Te están manipulando! —exclamó Mikasa—. Aunque fueran enemigos, tú no sacrificarías a niños inocentes. Y tú nos querías y valorabas más que a nadie. —Silencio—. ¿No es así? Me salvaste en aquella cabaña. ¡Me diste la bufanda porque eres buena persona!
—Las manos sobre la mesa —advirtió Eren. La única persona que no lo hacía era Jazmín por tener abrazado a su hijo que se quedó dormido después del llanto—. En Liberio tuve una conversación con Zeke. Solo entre verdaderos hermanos. Zeke tiene más información sobre los titanes que Marley. Armin, sigues visitando a Annie, ¿verdad? ¿Lo haces por voluntad propia?
—¿Qué? —Armin abrió más los ojos, sin saber que responder
—Si los recuerdos forjan a las personas, parte de ti está hecha de Bertholdt. De un soldado enamorado de una soldado enemiga. Armin. Bertholdt corrompió tu cerebro. Es a ti a quien manipula el enemigo.
—¡Eren!
—Tú igual, Mikasa —Eren la interrumpió, levantando la voz
—Basta, Eren —pidió Jazmín de forma calmada, tenía que estarlo por sus hijos
