A la mañana siguiente Río de despertó enérgica y feliz… Preparó la cesta de picnic mientras Agatha aún dormía. Tenía sándwiches, uvas un poco de queso y juego para llevar a Agatha a una improvisada cita en el parque.
Estaba emocionada y radiante. Tenía puesto un lindo vestido floreado y unas sandalias.
―Corazón. -Debes despertar ahora. -Pidió dulcemente a Agatha mientras le apartaba el cabello de la cara para observar sus facciones. Era hermosa. Río la miraba embelesada hasta que Agatha abrió los ojos
―Vidal eres una completa acosadora. – Dijo Agatha antes de reir.
―Corazón, te traje algo de fruta con yogurt. -Dijo Río
―¿A donde vas?. – Preguntó Agatha un poco preocupada porque estaba vestida en sábado muy temprano
―Tenemos una cita hoy. Está en el calendario.
Agatha no recordaba nada importante.
Se envolvió en la sábana y notó que aquella nota acababa de ser escrita por la letra de Rio. Picnic.
Sonrió
―Rio, eres muy dulce. -Susurró Agatha antes darle un pequeño beso en los labios.
―Ponte linda y comoda porque vamos a caminar hasta hallar un buen lugar. – Agatha asintió y comenzó a comer su fruta mientras Rio abría la llave de la ducha para que Agatha se alistara
Rio espero pacientemente afuera mientras leía una revista, en la sección de herramientas.
Agatha llegó minutos después su cabello estaba un poco mojado, pero lo dejaría secar con el sol. Llevaba un vaquero ajustado y una blusa blanca sin mangas con unos tenis blancos a juego.
―Hermosa como siempre. -Dijo viendo que se había maquillado ligeramente para ella.
Río cargó la canasta y abrió la puerta del auto a su esposa.
―Mi amor, sube a tu carruaje. – Agatha se colocó el cinturón mientras Río acomodaba sus espejos y arrancaba el auto. Había pasado mucho tiempo desde su última cita oficial. Debido a que dedicaban mucho tiempo a su hija, pero eran felices.
Río manejaba con precaución y cada cierto tiempo acariciaba la pierna de Agatha. Amaba a su mujer y tenía algo lindo planeado para ella.
Estacionaron el auto frente al parque y Río abrió la puerta de Agatha.
Se adentraron al parque, pasando por un pequeño lago. Río encontró una buena sombra frente al lago y tendió una manta para sentarse.
Observaban a los patos nadar mientras comían. Agatha terminó su emparedado, estaba distraída se paró para estirar las piernas y luego notó la posición comprometedora que tenía Rio. Estaba hincada, pensó que trataba de ayudarle a amarrar su zapato, pero vio una pequeña caja negra en sus manos.
Agatha se puso pálida. El momento que siempre había temido estaba llegando
―Agatha, mi amor. ..Tenemos una maravillosa hija juntas y vivimos en un grandioso hogar. No quiero que te pierdas de ninguna experiencia. Te amo infinitamente y deseo que seas mi mujer ante la ley… ¿Te casas conmigo?. – La miró a los ojos esperando.
Agatha quería gritar de la emoción. Cuando era mucho más joven había tenido la ilusión de casarse.
A Rio comenzaba a dolerle la rodilla. Mantuvo su sonrisa esperando
―Agatha.
―¡Si!…-Dijo la bruja después del repentino silencio. Río le colocó el flamante anillo en el dedo.
Agatha lo observó unos segundos. Era enorme
―Es muy grande, ¿Por qué gastaste tanto?
―No es grande. Tus dedos son pequeños. – Respondió Río
Se levantó y la sostuvo en sus brazos unos segundos antes de darle un amoroso beso.
―Me haces muy feliz. – Susurró antes de besarla de nuevo.
Al fin iban a ser una pareja “normal”
Volvieron a casa… No podían esperar para contarle al aquelarre que se casarían
"¿Notan algo en mi mano?" – Escribió Agatha emocionada antes de mandar la foto a su grupo de WhatsApp
"No te creo es de un catálogo". -Escribió Alice
"Mira sus uñas. Son púrpuras. Si es la mano de Agatha". – Escribió Billy, seguido de una carita asombrada
"Wow"… "Río se lució con esa joya". -Puso Jen.
"¿Y para cuando la boda?" -Preguntó Nicholas
"Pensaba en diciembre… Por Navidad sería lindo"… Explicó Río en el mensaje
"Felicidades a las dos" escribió Alice
"Ya era hora". -Puso Nicholas
"Me deben 20 dólares cada uno" Advirtió Lilia
"Así que, ¿apostaron?" .- Preguntó Agatha
"Pensamos que no lo harías mamá. Es que la eternidad es mucho tiempo"
Agatha se quedó pensando un momento. No era hasta que la muerte las separe. Era mucho más que eso.
"NO LE METAN MIEDO A MI FUTURA ESPOSA O IRÉ POR SUS ALMAS ESTA NOCHE". -Escribió Río un poco molesta y en mayúsculas.
Todos se desaparecieron del chat.

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Reinicio
Fiksi PenggemarAgatha Harkness y Rio Vidal superan el sendero de las brujas y tienen un reinicio agradable. ¡Las segundas oportunidades existen!