Frio de invierno

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Au: Small world Au
Ship: Saturno x Urano
Palabras: 1069
Perspectiva: narrador omnisciente
Pedido hecho por: @evxWAAFb

Pedidos abiertos 🩷🩷

–este lugar es un poco frío ¿no crees?–

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–este lugar es un poco frío ¿no crees?–

Dijo Saturno, con una pequeña sonrisa mientras caminaba entre la nieve.

Era la temporada de invierno, muchos lugares de la ciudad se cubren de nieve durante toda la estación, lo que genera una sensación de frío.

–cuando vives aquí durante toda tu vida...ya te acostumbras–

Respondió Urano, no era una persona de muchas palabras, pero hacía su esfuerzo para al menos entablar una conversación con una persona tan agradable.

–supongo que ya el frío no te afecta tanto–

Saturno viene del centro de la ciudad, donde quizás también hace frío, pero al menos es un poco más fácil comprar calefacción, mantas y hacer chocolate caliente.

–si, podrías decir que si–

Respondió el más bajo, trancando de divisar su casa, notando que estaban un poco lejos y ya estaba oscureciendo.

Saturno por otro lado, a pesar de su abrigo, gorro, guantes y termo de café caliente, se estaba congelando, sus malos temblaban y ya casi no sentía sus pies.

–¿aún estamos lejos?–

Preguntó el de ojos amarillos, tratando de disimular su pequeño temblor.

Pero él no disimula bien.

Bastaron unas pocas palabras para que Urano notara el frío que sentía su gran amigo.

–solo unos metros más, tranquilo, en casa tengo algunas mantas, podrás arroparte cuando lleguemos. Neptuno podría cocinar algo, déjame llamarlo–

¿Unos metros? Lo que faltaba era al menos una milla.

El más bajo revisó entre sus bolsillos, tratando de buscar  su celular o un par de guantes que ayuden a Saturno a lidiar con el frío, pero era imposible, no traía nada, solo unas cuantas monedas que le sobraron al comprar pintura.

–oh, tú siempre tan amable, Urano–

Dijo Saturno, con una sonrisa tranquila.
Pero se podía notar otra intención en su sonrisa.

Ahí fue cuando al pequeño se le ocurrió una idea al ver la sonrisa de su amigo.

Con cuidado tocaría su cuello, recordando que traía una bufanda, Urano se la quitaría y se la extendería a Saturno.

–ya va a anochecer y empezará a hacer demasiado frío, ten, sé que lo necesitas–

El de cabello azul evitaba mirar a su amigo a los ojos, estaba un poco avergonzado y de alguna forma tímido.
Como si su corazón se acelerara solo con verlo sonreír.

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