Solarballs//one-shots

¿Temor?

Au: Local58 AU
Ship: ninguno
Palabras: 840
Perspectiva: narrador omnisciente

Estaban reunidas las seis lunas más grandes del sistema solar. Todas, o al menos su gran mayoría, unidos por un objetivo común.

Aunque claro, había alguien más en esa pequeña reunión, astrobola.
El pequeño humano que parece obsesionado con la Luna ¿por que será?

El humano estaba cerca de su satélite, principalmente porque él lo ayudaría a salir del cinturón de asteroides si quería.
Debía esperar paciente a que esa "reunión" acabara.

Astrobola no había prestado demasiada atención a lo que hablaban, estaba concentrado en algunos informes para su jefe, hablando sobre la posibilidad de vivir en Titán.

Pero se alarmaría al escuchar cierta frase.

–juntos vamos a destruir a la Tierra–

Dijo Ganimedes, con su tono orgulloso de siempre, esperando la aprobación de Luna, quien miraba sin mucho interés.

Algo que parecía extraño a los ojos de los demás, una luna no parece importarle que hay estrategias para destruir a su planeta, es como si estuviera a favor de esto.

Astrobola por otro lado sintió su sangre congelarse y su corazón palpitar aceleradamente, su familia estaba ahí, su pequeño hijo estaba ahí...¿qué será de ellos?

–no permitirás esto...¿verdad?–

Preguntó el pequeño humano, mirando horrorizado a Luna, él cual no mostraba emoción alguna.

–Astrobola tranquilo, nos aseguraremos que estés bien–

Dijo Titán, tratando de calmar al ser viviente.
Pero el humano no prestaba atención, solo pudo salir de su nave y acercarse directamente a Luna.

–¡Tu no lo entiendes...! Luna...por favor...–

Astrobola trataba de llamar la atención de su satélite, estaba casi rogando por un poco de ayuda en esa situación.

Todos observaban la escena curiosos, principalmente por la actitud tan temerosa del humano, quien más que tener miedo parecía tener pavor, estar horrorizado y con su corazón en la boca.

–¿destruir a la Tierra con asteroides?–

Preguntó Luna, fingiendo pensar un momento, aunque rápidamente se empezaría a reír a carcajadas.

–ustedes son tan poco originales...–

Dijo el satélite, calmando su risa y volviendo a su compostura.

Compostura que nadie había visto.

Todos conocen a Luna por ser alguien pacifista, tranquilo y amable.
Pero ya no tiene esa actitud, parece alguien diferente.

Cosa que sorprendió a más de uno.

–¿porque destruirlo desde afuera cuando se puede desde adentro?–

Está pregunta inquieto a Titán, quien era el que había convivido más tiempo con Luna.
¿Quién en su sano juicio haría tal cosa?

Ganimedes juzgó al más pequeño con la mirada, era claro su descontento, su poca paciencia y la respuesta que necesitaba.

–¡sé claro! ¿Estás o no estás con nosotros?–

Preguntó el más alto, claramente molesto por la situación tan confusa que se esta presentando.
Pero el satélite de la Tierra actuó indiferente ante esta propuesta.

–trabajo mejor solo...–

Respondió Luna, mirando a lo lejos a Tierra, debía regresar lo más pronto posible.

–¿a qué te refieres con...?–

Europa trató de hablar, pero se calló al ver que Luna se iba sin mirar atrás, sintiéndose claramente ofendida, se acercó al humano, exigiendo respuestas.

–¿qué le pasa a ese tonto?–

Preguntó ella, molesta pero con una pequeña curiosidad.
Luna no fue claro con lo que decía, dejaba más incógnitas que pistas, más rompecabezas que piezas.
¿Era eso lo que quería?

El humano seguía atemorizado, al ver a aquella chica acercarse, su instinto lo obligó a esconderse en su nave.

–yo...él...su luz...Tierra–

Astrobola tartamudeaba, le era imposible formular una palabra correcta, todo parecía un balbuceo sin sentido.

–¿astrobola estás bien?–

Titán era el más preocupado, el humano no actuaba así antes, algo había ocurrido.
Y era algo relacionado a Luna.

–no...¡no!–

Este grito tomó por sorpresa a los presentes, era paranoia, ansiedad.
Titán se giró para ver a Deimos y Fobos, ellos al ser vecinos de órbita con Luna, podrían saber que es lo que ocurre.

–no es la primera vez que Astrobola actúa así–

Dijo Fobos, algo inquieto, quizás nervioso.

–él necesita tiempo, deberíamos darle unos minutos para que se calme–

Explicó Deimos, empujando ligeramente la nave del humano para que pudiera irse más rápido.

–ustedes dos saben algo–

Dijo Callisto, acercando a los satélites marcianos.
Ambos pequeños se miraron con nerviosismo, no sabían si podían hablar.

–¿porque Astrobola luce tan asustado?–

Volvió a preguntar la chica más alta, manteniendo su postura seria, esperando así obtener una respuesta.

–¡No sabemos!–

Gritó Deimos, abrazando fuertemente a Fobos.

–debemos estar callados...o lo mismo le sucederá a nuestro planeta–

Susurro Fobos, abrazando a su hermano y esperando pacientemente que Luna se fuera a su órbita.

–lo mejor es preguntar luego...ellos no darán respuesta–

Dijo Ganimedes, notando que seguía sin haber una respuesta.
Su voz fue clara y Callisto se alejó de ambos niños, quienes tardaron unos minutos en calmarse.

Pero Titán no dejaba de preguntarse una cosa.

–¿qué es lo que oculta Luna?–

Se preguntaba así mismo, quienes se consideran cercanos al satélite, actúan con temor ¿qué es lo que hace Luna para obtener esas reacciones?

Pero de algo estaba seguro, no debía ser algo bueno.