Pavel Naret Phoom es un conocido fotógrafo de veintisiete años, que trabaja para Retro, una de las más famosas revistas de moda de Tailandia. Además es un hombre terriblemente guapo pero aunque tiene a muchos seguidores y seguidoras a sus pies, se m...
En la siguiente noche de sábado, Pooh y su amigo quedaron en volver al local donde había conocido a Pavel por primera vez pero justo cuando iban a entrar, el más bajo le sujetó del brazo para detenerle.
...-Oye...oye
-¿Qué pasa?, ¿Le has visto?
-No pero allí atrás hay un tipo apoyado en la barrera metálica que no te quita los ojos de encima
-¿Y cómo sabes que es a mi a quien está mirado?
-Pues porque todavía lo hace
Pooh incrédulo negó con la cabeza, sin embargo se giró, encuentrandose con que era Dome, el ex de Pavel.
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-¿Le conoces?-preguntó entonces el más bajo.
El más alto no dijo nada, tan solo devolvió la fija mirada al enfermero y acto seguido movió la cabeza para hacerle una molesta señal, acto que hizo que el mayor esbozase una media sonrisa y a continuación dejase de mirarle.
-Vamos dentro - habló finalmente Pooh con seriedad, volviendo a ver a su amigo.
Una vez entraron, el más bajo algo confuso volvió a preguntar.
-¿Conocías a ese tipo?
-Si, sé perfectamente quién es él
-¿Y?, ¿Vas a decírmelo o no?
Pooh entonces soltó un sonoro resoplido.
-Es el enfermero, el tal Dome
-Dome ... Dome... Ahora no caigo
-El ex de Pavel
Tommy se tapó la boca abierta.
-¿Qué?...oh mierda, ¿Y si...
-¿Y si... ¿qué?
-No nada pero no sé...me dio la impresión de que te miraba por qué te conoce
-Probablemente lo haga... Maldita sea no veo a Pavel - maldijo Pooh mirando hacia la barra, ¿Será que todavía no llega?
-¿Crees que se encuentre con él?, oh mierda, ¿Y si han vuelto?-preguntó el más bajo tocando el hombro de este- ¿Y si...
-Joder....¿quieres callarte ya y ayudarme a encontrarle?- protestó Pooh.
-Si.... Si, perdona
-Tú ve por allí , Tommy y yo iré por allá, ¿Ok?- organizó el más alto- nos encontraremos de nuevo en este punto en quince minutos, ¿lo has entendido?
-Si...Si, entendido
Luego de ver a su amigo perderse entre la gente que bailaba ajena a su preocupación, Pooh buscó entre las docenas de caras que había en la otra parte del local, sin dejar de pensar en lo que le había preguntado y entonces un nudo en el estómago le apretó el alma.
